| Texto: Verbigracia García L.
Hay canciones que no se escuchan, se respiran. Se instalan en la piel con la sutileza de una brisa marina que no avisa. La Canción Que Odias, el nuevo single de Bella. --nombre artístico de Julia González Almendros--, es precisamente eso: una herida que se baila, una ironía que florece bajo el sol del sur de Andalucía la Baja. La cantautora de El Puerto de Santa María vuelve a demostrar que se puede decir mucho cuando se dice con arte, y que el desamor --cuando se canta desde la sinceridad-- puede ser incluso luminoso.
La composición, compartida con Carlos J. Montado Cruz y Domingo Lorenzo Varela, tiende puentes entre la melancolía y el ritmo, entre el desencanto y las ganas de seguir adelante. Lo que comienza como un reproche disfrazado de verso, termina convertido en un estribillo que nos atrapa, nos sacude y nos deja tarareando esa rabia dulce que todos, alguna vez, hemos sentido. Como un regodearse en la pena.
El videoclip, dirigido con sensibilidad por Irene García y Marta Gallardo, enmarca la historia entre los verdes abiertos y las playas de arenas doradas de El Puerto de Santa María. La naturaleza no es un decorado: es el espejo. En ella, Bella canta con la serenidad de quien ha comprendido que odiar una canción también es una forma de amarla.
El coche clásico que aporta Fosco Valimaña añade ese toque de memoria y carretera, como si el amor perdido fuese un viaje que aún no hemos terminado del todo.
La Canción Que Odias le pone música a esa sensación tan universal de odiar lo que nos hace sentir vivos. Como todas las canciones que, en el fondo, nos duelen justo donde más nos gusta sentir.