Día de la Familia del Mar 2025
| Texto: José María Morillo
En El Puerto hay nombres que suenan a campana de pesquero antiguo, a madera gastada por la sal y la creosota, a sirena del Vapor en sus mejores tiempos. Este fin de semana, entre los bancos de la parroquia del Carmen y San Marcos, tres de esos nombres volvieron a resonar con fuerza, como reconocimiento a toda una vida ligada al mar: Catalina Santos, Rosa Robles y María Correa, primeras mujeres en recibir el reconocimiento de Familia del Mar que concede la hermandad del Carmen. Se podía escuchar, como en las noches silentes, el murmullo de las mareas.
Las tres comparten una vida cosida con hilo de red: mujeres de marineros —hoy ya viudas— que crecieron sabiendo que el viento no siempre sopla a favor y que, sin embarcar, también navegaron todas las tempestades y que, cuando los hombres estaban faenando lejos, ellas mantenían firme el timón de la casa, la familia, colaborando con diversas responsabilidades con la propia hermandad del Carmen. Desde muy jóvenes se integraron en la cofradía, o en su entorno, arrimando el hombro en lo que hiciera falta… lo que fuera. Porque así funciona la gente de la mar en tierra firme: cuando falta uno, el resto empuja.
La celebración del Día de la Familia del Mar volvió a reunir a la gran familia marinera de El Puerto de Santa María, esa que llega puntual todos los años desde los setenta, como si fuese una marejada anunciada. La misa del domingo llenó la parroquia de rostros curtidos por el sol, de arrugas que cuentan historias de amanecidas en el muelle y de mujeres que aprendieron a esperar sin hacer ruido, escuchando muy bien lo que dice el silencio cuando la mar está brava.
Allí estaban la junta de gobierno de la hermandad —con Mar Vázquez al frente—, el primer teniente de alcalde, Javier Bello, y un buen número de portuenses que acudieron más por el corazón que por el protocolo. Y allí estuvo también el periodista Pedro Payán, que puso voz a una semblanza cargada de memoria y cariño, recordando que en estas tres mujeres hay todo un compendio de lo que significa pertenecer a la familia grande del mar.