| Texto: José María Morillo
Hay silencios que no son vacíos, sino esperas. Durante décadas, los archivos de la más que centenaria Academia de BBAA aguardaban la llegada de unas manos expertas capaces de traducir el polvo documental en historia y las partituras dormidas en sonido. El pasado sábado, el Auditorio Municipal 'Las Capuchinas' fue testigo de uno de esos momentos de excelencia para la historiografía local: la presentación del volumen «El Fondo Musical de la Academia de Bellas Artes Santa Cecilia. Historia, contenido y hallazgos».
La autora, la violinista y musicóloga portuense Ana María Castillero Gómez —para el mundo, Anama—, no se limitó a presentar un libro, sino que ofreció una llave maestra para acceder a una parte de la identidad sonora de El Puerto de Santa María. El evento, enmarcado en los actos del 125 aniversario de la Academia, congregó a una mezcla heterogénea de investigadores, melómanos, alumnado y académicos, poniendo de manfiesto que el patrimonio musical es un organismo vivo que interesa.

El trabajo de Anama Castillero destaca por una doble vertiente: la metodología científica y la accesibilidad. La autora ha desglosado fuentes documentales, colecciones y materiales inéditos que componen el archivo de la Academia. Su labor ha consistido en rescatar, ordenar y estudiar un legado que corría el riesgo de quedar en el olvido, ofreciendo una visión rigurosa sobre la evolución musical vivida desde la Academia.

No estamos pues, ante una simple catalogación, sino ante una reconstrucción con la música de la vida cultural portuense durante varias generaciones a través de sus pentagramas. La obra pone en valor el esfuerzo de quienes mantuvieron viva la actividad de la institución por más de un siglo. Gracias a la labor de Anama Castillero, el eco de ese legado ha encontrado su camino de vuelta al presente, asegurando que esa parte de la memoria musical de El Puerto de Santa María siga resonando para las futuras generaciones.
Para entender la sensibilidad con la que se aborda este estudio, es necesario mirar el background de su autora. Anama Castillero no es una teórica de gabinete sino una música integral. Su trayectoria como violinista, docente y musicoterapeuta, con formación tanto en España como en Estados Unidos, le otorga una perspectiva única sobre el hecho musical.

Habiendo colaborado con instituciones de la talla de la Orquesta Sinfónica de Euskadi, la Orquesta del Bicentenario de Cádiz o la de la Universidad de Granada, Anama Castillero conoce el peso de la interpretación. Actualmente, desde la dirección de Aetas Música, proyecto centrado en la educación temprana, demuestra su compromiso con la base social de la música. Es esa fusión entre la alta interpretación y la pedagogía lo que le ha permitido entender que un archivo no sirve de nada si no se difunde.

Castillero ha descrito la génesis personal del proceso como un acto de amor hacia su Ciudad y su historia: «Durante mucho tiempo he guardado un sueño que crecía en silencio, como una melodía frágil que espera el momento exacto para volver a resonar. Ese sueño es este libro: un pequeño tesoro que conserva parte de la historia musical de mi Ciudad… las palabras y la música de un legado dormido se encuentran una vez más ».
| Con nuestro agradecimiento a José Luis Lojo.


Un trabajo de investigación extraordinario y una presentación original e inteligente en la que destacó, como una gran violinista. Enhorabuena a la familia, en especial a los padres, por haber educado a su tres hijas en el difícil arte de la música