Luis era un niño en una posguerra atroz de hambre y oscuridad, monago insumiso, cómplice de estraperlista, militante antifranquista clandestino, obrero fabril, albañil capaz y vecino solidario sin etiquetas. Octogenario, Luís Rincón Noya contempla desde la atalaya de su 3º A de la Plaza del maestro Dueñas, junto a su compañera de todas sus vidas, Soledad, no en balde son progenitores de siete hijos con todos sus avíos, las grandezas y las miserias que la condición humana le ha mostrado a lo largo de su ya luenga existencia. De figura menuda y corazón grande, este lazarillo que fue de ciego, sindicalista orgulloso de su clase, y desengañado de la partitocracia en donde los actores principales y únicos del panorama político son los grandes partidos, se reivindica día a día como amo de casa, abuelo vocacional y ferviente amante de la lectura, que en sus ratos libres escribe con la bonhomía que siempre ha llevado por bandera. (Ilustración: María Lizaso).
Dice que nació sin habérsele pedido permiso el 27 de marzo de 1929 en la Calle Larga, muy cerquita de casa de señoritos, en el seno de una familia pobre pero muy honrada. Su padre Salvador, que murió cuando el pequeño Luís no levantaba un palmo del suelo, era de oficio “jilaó”. Se dedicaba a elaborar las cuerdas que después usaban los rederos para hacer las redes de pesca, y lo dejó rodeado de mujeres como único varón entre siete hermanos.
De una infancia de posguerra repleta de calamidades, de hambre y de incomprensiones, recuerda como a un cuñado suyo, Manolo, que regentaba el bar Los Cisnes en plena Calle Luna, cuando los sublevados contra la República se hicieron con el control de la ciudad, le cerraron el local previo destrozo del mismo que, unido a su reciente viudez hizo que se trastornara por completo recluyéndosele en su casa por loco. Locura convenientemente fingida a instancias de un amigo falangista para evitar el casi seguro fusilamiento que le esperaba si llegaba a curarse.
O cuando un comandante militar de triste memoria en El Puerto, hizo masticar a dos de sus hermanas la bandera republicana por haber asistido a la manifestación del último primero de mayo antes del alzamiento militar. Raro era el día en que no veía a su madre –costurera de pobres- llorar por el fusilamiento de un esposo, un padre, un hermano o alguna amiga o conocida. Su casa, recuerda, durante mucho tiempo fue un velatorio permanente.
“--Era horrible ver a la gente por la calle en los años cuarenta morirse de hambre. No en sentido figurado, sino literalmente caerse muertos de hambre”, reflexiona en voz alta este superviviente de la lucha fraticida entre hermanos, al que tocó casi siempre estar en el tramo medio vacío de la botella. La recogida de caracoles, el rebusco en las tinas donde echaban los restos del pescado después de limpiarlos, las labores propias de monago en la Iglesia Mayor Prioral, portear maletas en la estación de ferrocarril y ayudar a los estraperlistas en el transporte de su carga, fueron entre otras, actividades que permitieron tanto a él como a su familia supervivir en aquella sinrazón de existencia.
En la fotografía, durante la Primera Comunión de su hija Maria Ángeles. Sus hijo Luis y Juan de pequeños, Luis Rincón y su mujer, embarazada de su hija Sole)
Una foto más reciente, Luis y su mujer. y sus hijas Sole y Maria Ángeles)
Su aprendizaje de la cerrajería y forja, ocupación que le cautivó por encima de cualquier otra, le llevó hasta la primera fábrica de botellas que hubo en El Puerto, y cuando ésta cerró por falta de materia prima como consecuencia de la guerra mundial, entró a formar parte de la plantilla de otra de baldosas que también llegó a cerrar por el mismo motivo. Pero fue su último y definitivo trabajo como albañil en la fábrica de botellas V.I.P.A., en el que estuvo hasta su jubilación, el que despertó su conciencia social y de clase a favor del mundo obrero.
Impreso de Vidrieras Palma (VIPA) fábrica de botellas existente en el lugar que hoy ocupan viviendas frente a la Casa de la Cultura).
Su incorporación al movimiento sindical se comprende con estas palabras: “--Cuando llegué a la fábrica y vi a un centenar largo de hombres trabajando en unas condiciones laborales infamantes, con un calor de muerte y sirviendo a unas máquinas de fabricación automática con medios artesanales, comprendí que la época de la esclavitud aún no había terminado”. Fue Esteban Caamaño Bernal quien a través de Calixto García, compañero de la fábrica, el que le introdujo en la Hermandad Obrera de Acción Católica (H.O.A.C.). En el sindicato vertical de la época fue enlace sindical, jurado de empresa, presidente de la sección social local del Sindicato de Construcción, Vidrio y Cerámica, y vocal provincial de esta misma rama. Colaboró con Esteban, Isidoro Gálvez y su hermano Manolín y otros compañeros de Cádiz, San Fernando y Jerez en la implantación por esta zona del Sindicato Unión Sindical Obrera (U.S.O.). Siente especial admiración y aprecio por Tina Aguinaco y Jaime San Narciso, dos asturianos, profesora ella y médico él, que por sus estudios y formación pertenecían a la clase media, pero que sin embargo, por sus valores humanos estaban más cerca de los pobres que sus propios congéneres. (En la imagen, torre chimenea de la desaparecida fábrica de botellas).
Con la restauración de la democracia abandonó un tanto desengañado el mundo sindical y político, pero sus inquietudes solidarias le llevaron a impulsar el movimiento vecinal incipiente que se habría paso en esos momentos de apertura del país. Tuvo el honor –según sus palabras- de ser el primer presidente de la Asociación de Vecinos “San Jaime” en la zona de Crevillet. Ahora, tras una larga y trabajada vida de compromiso hacia los demás, su descanso activo lo ejerce como escritor ya premiado en algunos certámenes literarios, manteniendo por siempre el orgullo de haberse ganado la amistad y el respeto de todos sus compañeros en el mundo del trabajo. (Textos: Manolo Morillo).
Me gustaria tener el dibujo que encabeza la historia de mi padre.¿ Seria posible ?
ahora que parece,que las cosas se estan poniendo en marcha,cada dia te extraño mas,me gustaria tanto que pudieras ver a la juventud,en la calle pidiendo lo suyo,lo nuestro,lo que nos pertenece por derecho propio......fuieste un ejemplo para todos nosotros y para todo el que en algun momento formo parte de tu vida y tu lucha,que ahora es la nuestra,VA POR TI PAPI ..TE QUEREMOS
me llamo Aldara RINCON don LUIS RINCON NOYA era mi abuelo ,le pongo don porque para mi era un gran señor ,del cual yo me siento muy orgullosa , mi abuelo no tenia grandes cosas materiales ,sin embargo tenia un corazon, unos valores ,y una forma de vivir la vida bastante contagiosa . He tenido la gran suerte de que mis hijos han podido compartir con su bisabuelo o su "abuelito" como ellos lo llamaban muchos momentos y eso me parece que no lo podrian pagar con nada .Lo estraño mucho y desde aqui para que el donde este me oiga mi poquita voz y desagradable como el decia que tenia te queremos decir TE QUEREMOS ABUELO
QUE RAZON TIENES HERMANA. CADA DIA LO EXTRAÑO MAS, Y CADA DIA ME CUESTA MAS PENSAR QUE YA NO HABLARE MAS CON EL, NI LE DARE UN BESO NI PODRE PEDIRLE UN CONSEJO. ES VERDAD QUE EN PARTE CADA DIA LO LLEVAS CON MENOS LAGRIMAS PERO EL DOLOR ES EL MISMO. TE QUIERO MUCHO PAPA Y TE EXTRAÑO. CUIDA DE TODOS NOSOTROS.
El tiempo pasa.Ya hace casi dos semanas del fallecimiento de mi padre y el dolor se va suavizando pero es ahora cuando más noto su falta.
Consigo pensar en él sin llorar pero no consigo asimilar el no volver a verlo.
Ocurre que convertimos en costumbre y banalizamos el gozar de nuestros mayores.Creemos que estamos preparados para afrontar su pérdida pero cuando llega el día te das cuenta que siguen siendo importantísimos en tu vida y que darias lo que fuera por no tener que despedirte de ellos.
Además D.Luis Rincón gozaba de unas ganas de vivir y disfrutar de la vida inmensas con lo que todavia piensas más en lo injusta que ha sido su muerte.
Es ley de vida y a todos nos llega la hora.
Murió como queria sin sufrimiento y rodeado de los suyos.La pena es que algunos/@s de sus nietos/@s no llegarán a conocerlo sino en en el recuerdo de su familia que tanto lo quiere y admira.
Besos papá.
Quiero desde esta oportunidad que me brinda esta fabulosa web, aprovechar la ocasión para enviarles mis más sentidas condolencias a toda la Familia RINCÓN ARES, pues aunque ya he podido dárselas por correo a mi Amigo y Maestro Juan y personalmente a mi admirada Soledad, al resto de familiares me ha sido y me será dificíl de con ellos contactar para poder expresárselas.
Un amigo de la familia y admirador de este entrañable matrimonio.
Lo siento muchisimo pues no savia nada, el era un gran amigo y me gustaba mucho sobre lo que escribia. Guardo los folios que me daba con sus historias y ahora mas. Perdi9mos a un buen hombre y sobre todo gran persona. UN BESITO MUY GRANDE LUIS
No conocí a este buen hombre, pero estoy seguro que ha tenido mucho que ver en lo grande y en la buena persona que es su nieto Abri, seguro que se parecen en mucho....
Un Abrazo a toda la familia.
Mi mas sincero pésame para toda la familia, era un hombre de gran corazón. Descansa en paz
Mi más sentido pésame a toda la familia.
Mi padre, Luis Rincón, murió el dia 22 de enero rodeado de sus seres queridos, tras haberse despedido con lucidez de cada uno de ellos, tras habernos regalado 82 años de vida honrada y comprometida con la gente trabajadora, con su clase.
Murió como vivió siendo consciente de sus actos y afrontando la vida y la muerte con el valor de las personas que saben que tiene miedo pero que deben actuar pese a él.
Nos dejó dos legados: su familia, su inmensa prole- cosanguinea o del corazón- y por otro su utopía: que un dia veamos una tierra - como decía Labordeta - que ponga Libertad, una tierra donde se acabe eso de que " hay quien come y no trabaja y hay quien trabaja y no come", un mundo donde haya una plaza que lleve su nombre y allí podamos sentirnos orgullosos y orgullosas de descansar tras haber cumplido con las tareas que nos encomendó, cuando sabía que iba a morir, Luis Rincón, mi padre, un hombre bueno.
Si quereis visitar su blog "El Abuelo Luis", http://elabueloluis.blogspot.com/
os prometo ir colgando poco a poco el resto de su ingente obra biografica y de ficción.
Tambien podeis saber cosas de el en facebook:
http://www.facebook.com/?ref=logo#!/profile.php?id=1608853046
Ha fallecido el bueno de Luis. Esta tarde, a las 16:30, es la despedida en el Tanatorio de El Puerto.
Yo tambien estoy orgulloso del mejor abuelo que mis hijos podrian tener.
PUES YO TAMBIEN ESTOY MUY ORGULLOSA DE TI PRECIOSA......BESITOS.
Y aquí esta una de sus nietas, orgullosísima también de tener unos abuelos tan magníficos que me han inculcado tan bellos valores. Toda mi afición por la lectura vino por él, por verle con sus gafas y sus estanterías de libros, por el carnet de la biblioteca y los paseos hasta allí. Cada vez que sacaba una buena nota me encanta decírsela a él para que se sintiese orgulloso de mí, y aún ahora en mi primer año de carrera sigo llamándole para que me felicite por mis exámene jeje.
¡Besos abuelos!
SOY LA HIJA PEQUEÑA DE LUIS Y SOLE.
ES CIERTO FRANCISCO , PAGLIANI ERA SOBRINO DE MI PADRE ( MURIO RECIENTEMENTE ) HIJO DE SU HERMANA PACA ( TAMBIEN FALLECIDA NO HACE MUCHO ).
ME HA GUSTADO MUCHO EL RESUMEN DE LA VIDA ESTE LUCHADOR NATO QUE SIEMPRE NOS HA INCULCADO LA HONESTIDAD POR ENCIMA DE TODOS LOS VALORES.
¡ FELICIDADES Y GRACIAS PAPÁ Y MAMÁ !
La señora mayor que está a la izquierda en fotografía, vivió en la calle Ganado, donde Pepe Romerijo cocía el marisco. Esta señora era tía de un amigo de la infancia que no he vuelto a ver, se llamaba o se llama Pagliani. Creo que si Luis lee este comentario sabrá a quien me refiero. Luis tenía un tío que era capataz de una fábrica de mosaicos que había en la calle Yerba que también vivió en calle Ganado en la misma casa que indico más arriba.
En que nº vivIa Luis de la calle larga en 151.Yo no lo recuerdo.Me lo pueden decir.