La relación que tuve durante mi infancia como recadero de los porteros y acomodadores del Teatro Principal se prolongó en el tiempo, manteniéndose hasta mediados de los años sesenta debido a que no perdí el contacto con mi vecino de la calle Luna, Manuel Gatica Ramírez, conocido por ‘Gordo Gatica’, alma mater de fútbol base local y empleado de la empresa Nuchera, propietaria del Teatro y de los cines de verano, Cinema España, Cine Colón, Cinema Puerto y Cine Florida. /En la imagen, de izquierda a derecha: Antonio Carbonell, Pascual Manzano, ‘Gordo Gatica’ y Pepe Garrucho. Verano de 1965. Foto: Colección MCL.
Mi pasión por el fútbol y la estima que sentía por Manolo, favoreció que, en el verano de 1965, le ayudara por las tardes a limpiar el familiar Cine Colón, recogiendo los papeles de caramelos, bolsas, así como a colocar las sillas grises metálica y regar el suelo que era de arena de color casi amarillo, como la del albero, con granitos de gravilla. En aquella cuadrilla de chavales que también ayudaban para ver el cine gratis, se encontraban Pascual Manzano Sendra y José Antonio Garrucho Pérez.
Pascual, además era compañero en el Instituto Laboral. Su padre, marinero de profesión, Manuel Manzano Calatayud, conocido por ‘El roteño’ y buen amigo de mis hermanos, al conocer que su hijo había suspendidos asignaturas en junio me propuso que le echara una mano. Fue un verano provechoso que sirvió para consolidar una buena amistad y afecto que nos profesamos desde aquel entonces, pidiéndole consejos a Pascual como experto electricista en algunas ocasiones.
Con Pepe Garrucho, tampoco he perdido el contacto ya que su vida profesional ha estado relacionada con la actividad pesquera, como empleado en el sector comercial y lo veía con frecuencia cuando acudía a la Lonja de Pescado, donde en más de una ocasión conversábamos, saliendo a relucir aquellos años del Cine Colón y del entrañable ‘Gordo Gatica’.
En el verano de 2008 nos abandonó Manuel Gatica Ramírez, ‘Gordo Gatica’, pero aún nos acordamos de él, no solo por sus años como empleado y portero en el Cine Colon y posteriormente en el Central Cinema y Teatro Principal, sino también por su extraordinaria labor con el fútbol base de nuestra ciudad. /Texto: Antonio Carbonell.
soy quique y conocì a manolo cuando yo jugaba en el san marcos,grandisima persona.
¡Que gran persona era Manolo "el gordo Gatica"!, inolvidables los recuerdos de su trayectoria por la vida sencilla y austera que siempre disfrutó, con una sonrisa permanente en su cara. Ademas de su trayectoria en la empresa Nuchera durante tantisimos años, guardo un gran recuerdo del Cine Colon, lo que mas he admirado de Manolo fué su afición al futbol, "sevillista de los de verdad", y sobre todo su gran labor con el futbol base portuense, que humanidad desprendía en todo momento, y que respeto le tenían los pequeños futbolistas, que con el paso de los años llegaron a ser grandes jugadores, ver al "gordo Gatica" sentado en la grada del Polideportivo a las 8,30 de la mañana rodeado de los chavales equipados con su bolsa de deporte, conforme llegaban para jugar a las 10 y dandoles los " buenos dias Manolo" con ese respeto y educación que el les transmitía, era para mi un motivo de gran satisfación. Otro día hablaremos de los tiempos del Safa junto con su gran amigo el entrañable Rafael y sus "papas aliñás". Como vemos, pequeñas cosas, pero que a la larga son las que de verdad importan en esta vida que nos ha tocado vivir.