Don Manuel Martínez Alfonso, siendo profesor en el Instituto Laboral, me comentó en cierta ocasión, creo recordar que también lo refiere en su obra, ‘El Puerto de Santa María, en la Literatura Española’, que cuando llegó a El Puerto, al primer portuense que conoció fue al ‘Kako’ (ver nótula núm. 04 en Gdp) ya que recibiendo instrucciones de don Antonio de la Torre, que por aquellas fechas era concejal, se acercó a la Estación de RENFE, ofreciéndole su colaboración, acompañándolo posteriormente hasta el Hotel Loreto, donde quedaría alojado. /En la fotografía publicada Manuel Bejarano Armario, polifacético artista; Francisco Pérez Bernal, ‘Kako'; y Pepichi Nogués, músicos que coincidieron durante muchos años. Se les echa mucho de menos. /Foto: Colección M.S.L.
Don Manuel llegaba de Valencia, en octubre de 1952, para dirigir el Instituto Laboral y desde entonces ‘El Kako’ siempre fue muy considerado por parte del recordado escritor y profesor Martínez Alfonso.
Personalmente conservo muy gratos recuerdos de ‘El Kako’, por su extraordinaria colaboración en las excursiones que el sector pesquero organizaba para sus pensionistas en la época de esplendor de la pesca, siendo, en bastantes ocasiones, el gran animador y la estrella invitada de los eventos.
‘El Kako’, unos años antes de fallecer, pasaba una delicada situación económica debido a la crisis existente y, aunque, se le podía ver más pensativo de lo habitual, en el célebre Bar La Perdiz, calle Larga esquina con Ganado, este catedrático callejero y polifacético artista, persona honrada y discreta, sabía mejor que nadie que la constancia y no achicarse nunca ante la adversidad, permite, sorteando los avatares de la vida, continuar y sacar el jornal para la familia.
Francisco Pérez Bernal, conocido por ‘El Kako’, catedrático de la calle, a quien tenía en una gran estima, se nos fue el día 8 de mayo de 2014, (ver nótula núm 2.124 en GdP) y, según su nieto, ‘se la paró el corazón en el hospital de El Puerto de Santa María’. Descansa en paz, allá donde estés. /Texto: Antonio Carbonell
Hace un momento estaba escuchando a los Sabandeños, excelente Agrupación de Música Popular Canaria, y he recordado al entrañable y querido personaje popular “Kako”. En cierta ocasión, corría los años 80, el singular “Kako”, mientras cantaba “Palmero sube a la Palma”, intentaba escalar una de las Palmeras, próximas al Hospital de San Juan de Dios, en la Avenida Micaela Aramburu, mientras tanto, Manolito Bejarano, polifacético artista local, con cámara fotográfica en ristre hacía el paripé de un reportaje ante el asombro de propios y extraños. Genio y Figura. Dos personajes populares que hoy tanto se echa en falta.
Inolvidable kako, gran músico y mejor persona.