| Texto: Verbigracia García L.
Hace 40 años uno de los ejes de la movida portuense era la calle Curva. Comenzaban a despuntar las discotecas al aire libre en el extrarradio durante los meses de verano y empezaba a funcionar el centro comercial Viatahermosa, que tuvo un primer verano de llenos absolutos, en especial con los pubs que estaban abiertos durante toda la noche. No había regulación escrupulosa sobre aperturas, horarios y ruidos. El centro acogía el ocio juvenil durante todo el año.
En 1984 el bullicio nocturno estaba entre la calle Curva, la recién recuperada Plaza de la Cárcel, Herrería (con el multitudinario Tharsis), Jesús de los Milagros hasta alcanzar Palacios y Luna para extenderse hasta la Bajamar con la aparición de El Convento. Ya funcionaba Tótem (hoy Soho), junto a La Herrería, que sería un veterano rincón de música alternativa, y junto a la salida del Macario, en Misericordia, estaba el Pub Nilo; en Larga con Santo Domingo, el Milord y en Alquiladores el Luis XV o el pub Danubio.
Pero ya por 1984 se intuye un modelo de pub generalista, de combinados al por mayor y con ambiente de "bulla", atracción para estar en el lugar donde estaban todos los amigos y desconocidos.
En la calle Curva estarían El Hangar y la discoteca Studio 4, disco de invierno para aún bailar agarrados (estaba en su declive El Oasis, donde está El Faro, y en la calle San Bartolomé reunía a los estudiantes Galaxia). Junto a Studio 4 estaba el Pub Chevalier.
Estuvo abierto a lo largo de los 80, con altibajos de público, con un nombre que aludía a la distinción con que nació el concepto de Pub, bar de copas juvenil, y lugar de reunión de amigos selectos. Unos guantes y un bastón representaban en su logo esa selección, glamour añejo y guasón al que aludía al actor Maurice Chevalier (y había un brandy de Caballero con tal nombre). Los nombres en blanco y negro eran símbolo de distinción (Chaplin, Bogart, Groucho...).
De 1984 es la foto que añadimos a esta crónica de los pubs de aquellos años. Esta foto pertenece a un cuadro que decoraba las paredes de Chevalier. Clientes que disfrutaban de la compañía y el lugar con las combinaciones alcohólicas básicas y mezclas olvidadas como la menta con limón.
Dicha fotografía estaba olvidada en ese cuadro y la hemos rescatado en GDP para que los lectores de esta publicación se animen a identificarlos. Será una manera de darle una vida añadida a esta foto recobrada y el ambiente de aquellas noches de insomnio de hace 40 años.
Galaxia no estaba en la calle Santos Domingo , estaba en San Bartolomé
Mi homenaje también al pub Blanco y Negro de Juan Cebrian. No es fácil mantenerse navegando tantos años y con un estilo autentico fuera de lo puramente comercial.
El pub Nilo también hizo época.
Que bonito recuerdo, tenía unas mesitas donde dejábamos notas escritas, juegos para pasar el rato como cartas, conecta cuatro y un escalextrix grande, era un sitio donde la juventud nos encantaba ir q buenos ratos