Alberto Alcaraz Roca (1931-2009), natural de Roquetas (Almería) dejó huella en la Bahía de Cádiz. Murió en los primeros días de este mes de Octubre, tras una larga vida dedicada a la pesca. Con sus barcos, como el Roquetero, Enri, María la Belema, Rosa María Martí, Alver o Nuestra Señora de África, que faenaron en las costas del Mediterráneo y en Marruecos, 'en el moro', se dedicó en cuerpo y alma a su pasión. Mecánico naval en los años 70 se incorpora como armador a la flota pesquera portuense proveniente de Alhucemas y, según recuerdos que me cuenta Antonio Carbonell, quien vivió junto a él como secretario muchas horas de faena en la Cofradía de Pescadores portuense, no escatimaba ningún medio para mejorar la seguridad de sus trabajadores y la bonanza económica de ese puerto pesquero. (En la imagen, Alberto Alcaraz Roca, dirigiéndose a los pensionistas del mundo del mar, días antes de la Navidad, en el restaurante El Resbaladero. Diciembre de 1982). (La foto es de la Colección de A.C.L.)
Es fácil, cuando alguien se ha ido, hablar bien de él pero es que todo el mundo lo hace. Alberto ha dejado un gran recuerdo en lo personal y en lo profesional. Desde su llegada a El Puerto, su afabilidad, sus buenas maneras, su talante dialogador le hacen ser querido y respetado, por la marinería y los demás armadores. En el año 1976, las agrupaciones de trabajadores y armadores, por unanimidad de todos sus miembros, lo eligen Patrón Mayor hasta el año 1984. Hay quien dice que pudo haber estado más tiempo pero razones personales se lo impidieron.
Homenaje de reconocimiento del sector pesquero andaluz a Alberto Alcaraz Roca en el año 1984. Antonio Ruiz Junquera, kiko” Patrón Mayor que fue de la Cofradía de Pescadores de Barbate hace entrega de una placa a Alberto Alcaraz Roca que aparece acompañado de su esposa Flora Vera García También se encuentran en la foto Manuel Montes Quirós, vocal de la Junta General de la Cofradía de Pescadores y Enrique Flethes Scharfhausen, Comandante Militar de Marina de Cádiz. En el acto la labor y los esfuerzos de Alberto Alcaraz Roca por la actividad pesquera porteña, se relacionó con los del presidente Adolfo Suárez, guardando las distancias, claro, sobre todo en la época de transición. (La foto es de la Colección de A.C.L.).
Durante los dos mandatos que estuvo como timonel de los destinos de los pescadores y armadores portuenses logró la mejor época de esplendor de la flota de El Puerto que llegó a tener 132 barcos más otras 100 unidades que venían a descargar. Convirtió a la Lonja de Pescados de El Puerto de Santa María en una de las principales en ventas de España, después de la de Vigo, y Cádiz. En su etapa, en 1978, se inaugura frente al Muelle del Vaporcito, en la margen izquierda del río Guadalete, una nueva Lonja de Pescados que se ha mantenido viva hasta noviembre de 2006. Formó parte de la mesa de elaboración de las Ordenanzas de Trabajadores del Mar.
Fiestas del Carmen. Año 1978. Finalizada unas de las reuniones con el padre Ramón González Montaño y los hermanos de la Hermandad del Carmen donde se presentaba por parte de la Cofradía de Pescadores los actos y agasajos a los pensionistas del mar, podemos ver, de izquierda a derecha al corresponsal de Diario de Cádiz de la época, a la sazón Antonio Femenia Maiquez, Antonio Carbonell López, Joaquín Bellido Vélez, patrón de primera clase de pesca de litoral y patrón mayor de la Cofradía de pescadores, (1991-1995); Alberto Alcaraz Roca, patrón mayor de la Cofradía de Pescadores, (1976-1985): Vicente Sánchez Carbonell, practico de pesca mecánico naval; José Manuel Vélez Cortes, redero; José García Malvido, patrón de pesca y José Luis Ayala Naviero, redero. (La foto es de Rafa. Colección de A.C.L.).
El río Guadalete, con barcos pesqueros en ambas márgenes de la desembocadura.
Llevó a cabo el adecentamiento y mejoras en el Edificio de la Cofradía de Pescadores en la Avenida de Bajamar. Nuevas oficinas, Salón de Actos, Sala de Juntas, Biblioteca; se hizo la construcción de la fábrica de Hielo y realzó la Festividad de la Patrona del Mar, con la procesión terrestre y marítima y la recuperación de los festejos populares de antaño, como la cucaña marítima, logrando a inicios de la década de los años 80 que la Fiestas del Carmen y del Mar alcanzara cotas insospechadas.
En un acto despedida al Ayudante Militar de Marina de Marina de esta ciudad en el año 1986, aparecen en la fotografía Miguel Sibon Jiménez Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de Cádiz, José María Millán Sevilla, Secretario de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Cádiz y Alberto Alcaraz Roca. (La foto es de la Colección de A.C.L.).
En el mes de noviembre de 1982, tiene que asumir una gran responsabilidad y crear una vendeduría dentro del seno de la Cofradía de Pescadores para prestar los servicios a más de un centenar de embarcaciones que faenaban al norte y Sur de Marruecos. Su actitud y la defensa a ultranza de la institución que presidía durante la huelga de la marinería de 1977, propiciada por la situación que vivían también otro sectores productivos del país y la falta de tacto de los sindicatos y de las administraciones de aquella época que consideraban a las Cofradías de Pescadores como el ultimo reducto del franquismo, fue determinante para que a partir de ese momento las viejas instituciones pesqueras tuvieran el reconocimiento del Gobierno de España y como viene ocurriendo desde entonces pieza fundamental en la vertebración del sector pesquero de bajura.
Alberto fue socio fundador de la Federación Andaluza de Cofradías de Pescadores, llegando a ser su Vicepresidente; fue Presidente de la Federación Provincial de Cofradias de Pescadores de Cádiz y vocal de de zona suratlántica en la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores. Ahora, a sus 78 años presidía la compañía de seguros más prestigiosa del sector marítimo: Mutua de Riesgo Marítimo (Murimar) a la que reflotó y dotó de una nueva directiva, nuevos mercados e impulsó nuevos productos. (En la imagen, Alberto Alcaraz, en una fotografía tomada poco antes de su enfermedad).
Hasta aquí lo profesional; en lo personal, qué decir, sólo cosas buenas. A mi suegro lo conocí a mediados de los años noventa; desde entonces sólo he observado cariño por parte de él y de los demás hacia él. Estaba orgulloso de sus hijos, de sus nietos, de sus yernos y nuera. Era el pater familias siempre dispuesto a ayudar a quienquiera que se lo pidiese. Su opinión nos importaba y a él acudíamos a consultarle prácticamente todo. Su falta nos ha dejado a todos huérfanos; a la gente de la mar, por haber perdido a un profesional justo y riguroso; a su familia, por la falta de un padre, de un consejero, de un amigo. En su recuerdo, un agradecimiento a todos cuantos abarrotaron la Iglesia en su última despedida y que demostraron el cariño y respeto que le tenían.
Textos:
Juan Luis Gutiérrez.
Abogado.
"Los pensionistas del mar, los de piel dura y el rostro arrugado se merecen esto y mucho más porque con su trabajo y su tesón elevan la profesión a la que representan más de lo que podemos alcanzar". Estas palabras fueron pronunciadas por Alberto Alcaraz Roca, Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores el día 16 de julio de 1978. (Leer más pulsando en la nótula 347. Homenaje a los Pensionistas del Mar, en Gente del Puerto).
Desde los años sesenta hasta finales de los noventa trabajé en una de las vendedurias de la lonja, tanto en la de esta banda, como en la que se encontraba frente al muelle del vapor. La falta de trabajo por la perdida de barcos y una oportunidad que se me ofreció para trabajar fuera del Puerto, en Cadíz, me hizo perder el contacto con el muelle. Conocí la subasta del pescado a las 4 de la tarde, así como la de madrugada, como también estar al tanto de la labor de Alberto Alcaraz durante mas de ocho años, como posteriormente la de su sustituto, Manolo Montes.
A todo esto el mes pasado tuve la oportunidad de revivir de nuevo algunas cosas debido a que he leído una biografía de El Patrón Mayor Manolo Montes. que esta escrita por José Luis Fernández Parejo, según consta en la misma. En esa historia de su vida, consignando sus hechos logrados y sus fracasos, así como todo cuanto de significativo pueda interesar de la misma.
Sin embargo, lo que me ha llamado la atención que en los comentarios de esta página, dedicada a Alberto Alcaraz Roca, se habla de rumores sobre la concesión del título de Hijo Predilecto a Manolo Montes, así como opiniones que discrepan de lo que parece ser está en la calle.
Con independencia de lo que se relata en la biografía ya que como dice el refrán “cada cual cuenta la feria como le va”, mi opinión personal es que lo que podía haber sido una buena referencia para Montes, es muy posible que sea su espada de Damocles, por entrar en descalificaciones y ataques a terceras personas, incluso señalando como mister “X” a un funcionario de la Ayudantía Militar de Marina al que tengo la seguridad que todos lo conocíamos pero no precisamente por ser funcionario de la Marina de Guerra… Y si no es mister "X" quien creo, si que deja muy claro que era como un hermano para él.. Gran torpeza, ya que es no es de recibo de ninguna manera lo que se dice.
Si es cuestión de opinar en el cuanto a la concesión del título de Hijo Predilecto, en le caso de que sean destinados a pescadores porteños, tenemos un gran elenco de personas donde elegir y que viven en la actualidad. Han permanecido toda su vida en la mar, y subsisten en la actualidad con pensiones muy bajitas viendo como la vida se va acabando y nadie se acuerda de ellos. Gracia a gente del Puerto, vamos conociendo cada día más, y es de agradecer.
En la Barriada Estrella del Mar, en el Grupo de Viviendas de los Pescadores, y en otros lugares de El Puerto, viven algunos de ellos que en momentos de sus vidas salvaron de perecer ahogados en el mar a algún compañero y que además como vocales de la Junta General de la Cofradía de Pescadores se ocuparon y trabajaron para el sector pesquero en varios mandatos sin percibir una sola peseta.
Sin embargo, mi propuesta, va dirigida a nuestras madres, también dignas candidatas a Hilas predilectas, que toda su vida, como mujer marinera, han sufrido en silencio, no solo la intranquilidad constante por la ausencia de sus pescadores, sino otros azotes peores que los del mar, como son los que ocasionan el olvido de las mejoras sociales por parte de los dirigentes pesqueros. Desde tiempo inmemorial la mujer marinera es administradora de los escasos recursos económicos que la mar proporciona a los suyos durante la vida laboral y, llegada la jubilación, tienen que hacer encajes de bolillos para que la familia pueda subsistir. Esto ha ocurrido siempre y empeora desde el momento que fallecen sus maridos, nuestras padres, ya que la situación se hace insostenible por la reducción de la pensión. Su entereza y humildad ha convertido a nuestras madres en ejemplo perfecto para que sean nombradas Hijas Predilecta de esta ciudad.
Aunque no está mal la idea de que la concesión de Hijo Predilecto a titulo póstumo sea para los pescadores que no pudieron regresar de la mar. Sería, sin duda, alguna, un acontecimiento que quedaría grabado en la retina de todos los porteños y porteñas y se haría justicia ya que “los pueblos que honran a sus hijos, se honran a sí mismos. ...”. ¡Ojala la Corporación Municipal se hags eco de esta humilde sugerencia!
Al leer lo de Alberto, me viene a la memoria "Gavina", que gracias a él y a otros buenos pescadores, pudierón mis padres tener una vivienda digna, en la barriada Estrella del mar.
Gavina era Jose Luis Alvarez Sevilla, maestro redero y el gran impulsor junto con Alberto y el padre Ramón de las Fiestas del Carmen.
Ahora que Alberto alcaraz roca, permaneció 9 años. además por medio con tiempo de la transición cuya meritoria labor queda aquí reflejada. Tengo que mencionar a Basilio Lloret, Joaquín Bellido Vélez y Carmelo Fernández Camacho que también fueron Patrones Mayores de la Cofradía de Pescadores, desaparecida en el año 2006. Digo esto porque no entiendo el porqué en una biografía de El Patrón Mayor Manolo Montes, diga que ha permanecido en el cargo de Patrón Mayor 20 años, relatando además sus vivencias como pescador y su labor como Patrón Mayor. La realidad es que Manuel Montes Quirós solo permanneció durante 11 años y no sucesivamente como Patrón Mayor. Un error, posiblemente, pero grande.
No voy a entrar en sus vivencias y logros dentro de la Cofradía de Pescadores de Montes porque considero que todos los que fueron Patrones Mayores, con sus luces y sus sombras, colaboraron dentro de sus posibilidades.
De cualquier manera, en mi nombre y en el de mi familia, integrada por pescadores, considero que si pretenden proponer a Manuel Montes Quirós para la concesión del título de Hijo Predilecto de El Puerto de Santa María, como se viene comentando, opino que se homenajeen a todos los Patrones Mayores y a los huérfanos que en la mar perdieron a sus padres y de los que nadie se acuerda. Pero, sobre todo, la concesión del titulo de Hijo Predilecto a título póstumo de El Puerto de Santa María a los pescadores que se sacrificaron honradamente para sacar el jornal y que no pudieron ser velados porque el mar se los trago. Eso sería muy bien visto por todo el sector de la marinería, por las familias de los que se fueron, como las que quedamos. Creo que esto también lo apoyaría y lo entenderia Manolo Montes.
¡Que maravilla! Alberto Alcaraz, nos trae a la memoria a componentes de su Junta y a otros profesionales y excelentes lobos de la mar que nos abandonaron también, pero que merecen ser recordados, Francisco Morato Martínez, conocido por Paco “Peti”; Juan Devesa Cabrera, Vicente y Manuel Sánchez Carbonell, José Joaquín Cairón Requino, los hermanos Sánchez La O, José Manuel y Julio, conocidos por ‘El Mesti’ y el ‘Arropia’, “Mangoli” Eduardo Aguilocho ¡Cuántas cosas desconocemos!