Saltar al contenido

abelgarruchopastor_puertosantamaria

Portuense y con solo 15 primaveras en su haber, Abel Garrucho Pastor tiene claro cual es su sueño. "--Me gustaría llegar a ser profesional, aunque soy consciente de que sólo unos pocos llegan a vivir del billar". Su afición empezó a fraguarse hace tan solo dos años, de forma casual. "--Fui con mi padre a un local en el que había una mesa de billar y nos enteramos de que había un club".

Ahí empezó su andadura por distintos torneos, hasta que con su victoria en el campeonato andaluz de billar libre y gracias al apoyo que le brindó Juan de los Reyes, director de árbitros de la Federación Andaluza de Billar, el máximo organismo federativo español se fijó en él y le envió al Centro de Alto Rendimiento (CAR) Infanta Cristina de Murcia para realizar junto a otros diez jóvenes una prueba. Sólo tres de ellos la pasaron. Abel fue uno de ellos, y hoy, la Federación Española de Billar se hace cargo de todos sus gastos de manutención y alojamiento, con el objetivo de mimar a los que pueden ser futuros campeones en la disciplina.

abelgarrucho_sub17_puertosantamariaSu gran oportunidad para demostrar su valía llegó con la celebración del XIX Campeonato de España de Billar a Tres Bandas sub-17, (en la imagen, recogiendo la medalla) que tuvo lugar en la murciana localidad de Los Narejos entre el 9 y el 11 de octubre pasados. La disciplina a tres bandas es muy diferente al billar tradicional que todos conocemos, el objetivo son la realización de carambolas a varias bandas, por lo que exige una gran precisión en su ejecución. Abel llegó a la final y tuvo en sus manos la victoria al contar con una amplia ventaja, que finalmente su rival, el también andaluz Miguel Peñuela, supo remontar para hacerse con el título. Un subcampeonato que sin embargo dejó buen sabor de boca

Para ello trabaja desde su exilio murciano, desde el que no puede evitar echar de menos a sus amigos y en el que no puede descuidar en ningún momento sus estudios de bachillerato, ya que de no lograr unos buenos resultados académicos la federación no le permitiría seguir sus entrenamientos en el CAR a los que dedica algo más de tres horas diariamente. Todo para llegar a ser un día como Dani Sánchez, cuarto en la clasificación mundial e ídolo de Abel, y al que tuvo la oportunidad de conocer durante la celebración de la copa del mundo en Alcalá de Guadaira.

billar_puertosantamariaPero no todo es billar, a Abel también le atrae la idea de estudiar Medicina. Por el momento toca vivir el presente, y que su trabajo y una pizca de suerte le favorezcan, ya sea ante las mesas de billar o en las consultas de los centros sanitarios. (Textos: Álvaro Sánchez).

Su entrenamiento diario dura 3 horas y media de práctica y 1 hora de ejercicio físico, por lo que su tiempo de descanso es bastante reducido. Es muy difícil vivir de este deporte ya que para ello necesita entrar en la lista de los 30 mejores jugadores, algo sumamente difícil ya que las presentaciones a campeonatos españoles se rigen por la elección de los dos mejores jugadores por comunidad autónoma.

9

joaquinalbert2_puertosantamaria

Joaquín Albert Gálvez nació el 30 de Diciembre de 1.947, en el Barrio Alto en la calle Santa Clara núm. 9, es el más pequeño de sus hermanos. Cuando tenía solo 12 años cogió por primera vez una guitarra, y aprendió a afinarla solo. En aquellos años difíciles, su padre no podía pagarle un maestro de guitarra, por lo que se tuvo que convertir en autodidacta, aprovechaba cuando su hermano Fernando comenzaba ya a tocar la guitarra con los amigos música moderna para fijarse como afinaban y donde ponían los dedos de la mano izquierda, para cuando se quedaba solo coger la guitarra y sacarle sonido flamenco que es lo que ya le gustaba a Joaquín, realmente.

joaquinalbert_1964_puertosantamaria

En el tablao 'La Pañoleta' de Jerez, con 17 años, en 1964. (Foto Iglesias).

Todos los sábados se juntaba con dos amigos más y se pasaban por las iglesias para preguntarle al cura las direcciones de los bautizos, tomas de dichos etc. y aparecían por las casas con las guitarras con lo cual siempre eran bienvenidos por los asistentes y él practicaba tocando para ellos. Una vez se encontró ante un reto que alguien le lanzó: “--Toca por soleá”, a lo que Joaquín le respondió: «--Usted cante que yo le acompaño» y ello sin tener ni idea de cómo se tocaba una soleá. Siempre salía airoso del trance. Así que para enterarse como se tocaba la soleá tuvo que ingeniárselas de tal forma que con el dinero que le daba el padre para ir al cine los domingos (1,50 pesetas), no iba y las guardaba para el lunes que invitaba a media botellita de fino a un guitarrista llamado “Guilloto” que trabajaba en el Ayuntamiento de nuestra Ciudad y que acostumbraba frecuentar “La Angelita” o “Las Siete Esquinas». Sobre las cinco de la tarde que era cuando terminaba de trabajar, después de un par de copas cogía la guitarra y empezaba a tocar, cuando veía la ocasión le espetaba: «--Toca un poco por soleá”, de esa forma y sin que sospechara nada aprendía, como  muchos guitarristas, robando con la vista y escuchando.

albert_nino_jero_panoleta_puertosantamaria

Joaquin Albert, tocándole a 'Niño Jero' en el Tabalo de la Pañoleta. Jerez. 1964.

Con el paso del tiempo empezó a formarse y soltarse en la guitarra de forma que los cantaores flamencos de El Puerto empezaban a llamarlo para tocar en las fiestas. Con 17 años después de sacarse el carnet de artista en el Teatro San Fernando de Sevilla, le salió el primer contrato en serio como profesional en el conocido tablao “La Pañoleta” de Jerez de la Frontera. Agustín Vega conocido bailaor y hermano de Antonia la dueña del tablao, fue quien lo contrató. Allí tuvo la oportunidad de acompañar a grandes profesionales del flamenco y tocar junto a grandes guitarristas como Manolo, Parrilla de Jerez.

albert_elchacho_puertosantamaria

En el Tablao 'Los Tarantos' en Sitges (Barcelona), con 'el Chacho', el 25 de agosto de 1970 y tantos...

EN BARCELONA.
Con 18 años después su gran experiencia en “La Pañoleta”, decide irse voluntario al Servicio Militar y, casándose a la finalización del mismo. Entonces le salió un nuevo contrato en Sitges (Barcelona) en el famoso Tablao “Los Tarántos” donde estuvo durante cuatro años trabajando con grandes figuras del flamenco y lo anunciaban como el guitarrista “Joaquín de El Puerto”. Después  se vino de Barcelona, por razones de salud de su mujer sin trabajo ni expectativas, pero fue contratado enseguida y durante unos cuantos años en el “Tablao de Cádiz”, no parando ya en su trayectoria profesional y recorriendo prácticamente España entera hasta la actualidad.

albert_bautista_puertosantamaria

Con Conchita Bautista, en Bodegas Terry durante un Festival a beneficio de la Cruz Roja, el 4 de septiembre de 1965. (Foto Rafa).

albert_loleymanuel_puertosantamaria

Con Lole y Manuel y el Niño de los Rizos, en el Tablao de Cádiz.

ACOMPAÑANDO A ARTISTAS.
La Perla de Cádiz, Lola Flores, Camarón de la Isla, Manolo el Malagueño, Juanito Maravillas, Chano Lobato, María Jiménez, Fernanda y Bernarda de Utrera, Antonio Núñez “Chocolate”, La Sallago de Sanlucar, Pansequito, Alonso Núñez “Rancapino”, Perlita de Huelva, Fernando Terremoto (padre), Tio Borrico, Sordera de Jerez, Agujeta el Viejo, Chato de la Isla, Orillo de El Puerto, El Chozas de Jerez, Mariana Cornejo, Manolo Simón, Fernándo Gálvez, Manolo Gero, Manuel Monje, Pijote, Paco Bonilla, Manuel Malia, Cascarilla de Cádiz, Gitano de Bronce, Antonio El Camborio, Juanata de Jerez, Agustín Vega.

albert_tablaocadiz_puertosantamaria

En el Tablao de Cádiz, donde trabajaría varios años a su vuelta de Barcelona. De izquierda a derecha: las hermanas Cipri y Luisa de Sevilla, El Pijote hermano de Camarón, Orillo de El Puerto y los guitarristas Joaquín Albert, Antonio Márquez y el Niño de los Rizos, el 27 de abril de 1973.

albert_ninorizos_puertosantamaria

Tocando al alimón con el Niño de los Rizos.

EL CARNAVAL.
No solo en el mundo del flamenco se ha destacado Joaquín Albert, en el mundo del carnaval ha sido y es autor de letras en comparsas y chirigotas, en 1985 autor de la comparsa “Pillos de la Lonja”, 1.986 de la comparsa de Chipiona “Trotamundos de la Copla”, 1987 la chirigota de Punta Umbría “De Cuarenta pa-arriba”, 1.989 la chirigota “Lo siento picha”, “Andaluces de Jaén” comparsa en 1.990, “Como un juguete” comparsa en 1.991, la comparsa “Periquillo el de los Palotes” en 1.993, en 1.994 “El Fantasma de la Opera”, 1.997 “Guadalete”, 1.999 “La vieja Trova”, 2.002 “El Pan Nuestro”, 2003 “Il Romántico, 2.004 “El Nómada, 2.006 “El Patrón de la Bahía.

El_patron_de_La_Bahia

En las tablas del Teatro Falla, fondeó en 2006 la comparsa 'Los Patrones de la Bahía', con  una réplica del Vapor en el escenario y un tipo como el del uniforme de Pepe 'el del Vapor'.

También ha sido componente de las comparsas “Los Pillos de Bagdad” año 1.962, “Pillos de la Lonja”, 1.985, “Raza Mora” 1.978, “Cantares” 1.979, “Simios” y “La Vieja Trova".

razamora_1978_puertosantamaria

La Comparsa Raza Mora, en 1978.

RECONOCIMIENTOS Y DISTINCIONES.

  • Primer Pito de Oro del Carnaval de El Puerto año 2.000
  • Pregonero del Carnaval de El Puerto de Santa María año 2.002
  • Insignia de Oro de la Peña El Vaporcito, año 2.003
  • Vaporcito de Oro de La Peña La Mezquita
  • Águila de bronce del Municipio de Águilas (Murcia) año 2.006
  • Antifaz de Oro del Municipio de Águilas (Murcia) año 2.006

albert_mairena_puertosantamaria

Joaquín Albert con Don Antonio Mairena y su hermano Manolo, en El Puerto. Vemos detrás de Joaquín una ceja del aficionado al flamenco Francisco Varo Marchán 'Cuqui'. Joaquín fue el autor de la música del espectáculo montado por 'Volaverunt Tablas', 'Rafael por Alegrías' dedicado a Alberti y estrenado en El Puerto en el Auditorio Municipal 'San Miguel'. También fue autor de la música de otro espectáculo de Volaverunt 'Coplas de Don Antonio', dedicado a Machado.

Joaquín ha trabajado en la Autoridad Portuaria de la que se encuentra jubilosamente jubilado. Es abuelo de la joven cantaora Sofía Gálvez, que tiene 16 años, y en breve veremos en Gente del Puerto. (Textos: Francisco Ramírez Tallón).

5

francisco-anglada-gallardo_puertosantamariaEn 1906, una de las pioneras fábricas de automóviles en España, la de Anglada Gallardo, había cerrado sus puertas en las instalaciones abiertas desde 1899 en la calle Cielo. La falta de inversores obligó al mecánico Anglada (en la imagen) a trasladar su negocio a Córdoba, donde encontró respaldo económico.

El emprendedor mecánico portuense Francisco Anglada Gallardo  llegó a un acuerdo con empresarios cordobeses para trasladar su factoría de automóviles ubicada en la calle Cielo hasta la capital de la Mezquita cerrando sus dependencias en El Puerto. La “falta de apoyos inversores”, subrayaba, había obligado a Anglada, de origen malagueño, a tirar la toalla. La empresa automovilística comenzó su andadura el 13 de septiembre de 1899 con la construcción de bicicletas marca Hércules y cuyo pintado de los cuadros supuso la primera cadena demontaje conocida en España.

Tras un fulgurante éxito con las bicis, que llegaron a ser premiadas en ferias internacionales, la firma pasó también al invento del siglo: los automóviles, con la ayuda del ingeniero Agustín Scandella, llegando a dar empleo a 40 trabajadores, algunos de ellos procedentes de puntos distantes del país, ante la iniciativa pionera para competir con los automóviles foráneos. La factoría también se especializó en máquinas en general, como el encargo que recibió de la firma de Cervezas Tosar, instalada a principios del siglo XX en El Puerto, con nótula num. 063 en Gente del Puerto.

anglada_taller_cielos_puertosantamaria

Taller Anglada en la calle Cielos, a la izquierda la Parroquia San Joaquín.

La fábrica de automóviles construyó entre 1901 y 1906 unos 24 automóviles, de los que algunos fueron exportados a América y uno de ellos fue adquirido por SM el rey Alfonso XIII.

anglada_-coche_puertosantamaria

Uno de los automóviles surgidos de la fábrica portuense Anglada.

En su catálogo figuraban avanzados modelos de 2 a 4 asientos e incluso un potente ómnibus de 14plazas. Curiosamente, poco antes de la instalación de Anglada, llegó a El Puerto el primer coche comprado por un vecino. Pedro Hernández Cabrera había adquirido en París por 8.000 francos un Renault Freres, que alcanzaba la friolera de 45 kilómetros por hora, aun con el precario estado en que se encontraban los caminos que llevaban a la localidad. (Textos: Fransico Andrés Gallardo).

anglada_publicidad_puertosantamaria

Publicidad de Automóviles Anglada, en un carro tirado por semovientes en la Cabalgata y Batalla de Flores que se celebraba durante las Fiestas de Verano en el Paseo de la Victoria. Además vemos propaganda de la Imprenta Luis Pérez Grant, Cognac Terry, Amontillado Pepe Luis, Cervezas Tosar y Restaurante La Alegría.

el_lute_arniz_paco_candel_barcelona1

En la imagen, de izquierda a derecha, el escritor Paco Candel, desconocido, Eleuterio Sánchez “el Lute” y Paco Arniz. La fotografía está tomada en la Terraza Martini, la coctelería de moda en la Barcelona de los años sesenta y setenta, situada en la confluencia del Paseo de Gracia, 16 con la Gran Vía, hoy desaparecida.

Allí vivió Paco Arníz una curiosa anécdota con Eleuterio Sánchez “el Lute”, ex presidiario del Penal de El Puerto. Cuando los presentaron, Paco Candel a Eleuterio que Arniz venía de El Puerto, a lo que éste le preguntó --pensando en clave carcelaria-- que «en que galería has estado». El entuerto se deshizo enseguida cuando le explicaron que Paco Arniz era nacido en nuestra Ciudad.

el_lute_arniz_barcelona2

La Terraza Martini fue noticia el pasado año 2008 cuando fue vendida por 10,8 millones de euros, el precio más alto pagado por un piso en la capital catalana. El torreón, con 806 metros cuadrados de superficie y 185 metros cuadrados de terraza fue adquirido por una familia catalana que ha trasladado allí, tras la reforma, su residencia.

4

lapuntilla_aerea_puertosantamaria

Vista aérea de la Playa de La Puntilla.

Para alguien que ha nacido en este rinconcito del sur, oír playa de La Puntilla es abrir la ventana de los recuerdos. Para muchos, entre los que me encuentro, La Puntilla es algo más que una playa, es un tiempo pasado cargado de anécdotas, venturas y desventuras. Allí fue donde mis ojos vieron por primera vez el mar. Soy jerezana y aunque estábamos tan cerca del mar, 15km, a la vez estábamos lejos. En los años 50 y 60 la vida no era ni mucho menos como en la actualidad.

Por el Carmen empezaban los baños, qué nervios con los preparativos, la ilusión se desbordaba. Los domingos por la mañana, ¡venga niñas a levantarse no vayamos a perder el tren!, con los cestos llenos de comida, toalla para tirarnos en la arena y la sombrilla, la cultura de saber estar al sol era importantísima para no acabar rojos como salmonetes. Los que no tenían cuidado con aquel sol traicionero pagaban las consecuencias, días después cambiaban la piel como si de serpientes se tratara, luego quedaban como dálmatas, me sonrío recordando todo aquello, y puedo verme, en una mano el cubo y la pala, bajo el brazo la pelota y sobre la cabeza un gorro para no coger una insolación. Yo de niña era rubia , cuando acavaba el verano, con el sol y el agua del mar, mi pelo se había vuelto tan dorado que a menudo me confundían con una nórdica, cuando llegábamos a El Puerto venga, un coche de caballos. Me gustaba sentarme en el pescante para ver el mar la primera y qué maravilla, yo no podía resistirme, en cuánto llegábamos a La Puntilla salía corriendo a meterme en el agua, qué buena estaba, cuanta feliciad sentía.

En La Puntilla nos conocíamos casi todos. Pasear por la orilla significaba ir saludando, por aquí y por allí salían conocidos. Fulanita se ha casado, menganita también y, ¿te acuerdas de aquella niña de Sevilla?, pues menudo bombo tiene, no se ve los pies, ¡ohi! que gorda y que guapa te has puesto chiquilla, le decían a la embarazada. A mí me decían que los niños venian de Paris y que los traía la cigüeña en el pico, pero de eso nada me dijo una niña mayor que yo, esa lo ha hecho, ¿hacer qué? me preguntaba yo , y así entre juego y veras me enteré cómo y de dónde venian los niños. Y es que mientras hacíamos la digestión y nuestras madres dormitaban allí en los pinares, a la sombra de aquellos árboles (si no estoy mal informada creo que no hay un lugar igual en la provincia de Cádiz, los pinares de La Puntilla eran únicos) las niñas de los años 50 y 60 teníamos unas conversaciones muy instructivas, a escondidas nos pasábamos todo tipo de información que la moral de la época censuraba.

pinares_lapuntilla_puertosantamaria

Pinares de la Puntilla (foto Jorge Roa).

Conforme crecíamos cambiaban los juegos de hacer castillos de arena en la orilla o hacer el submarino, eso era muy divertido, cogíamos un palo con ambas manos, los brazos estirados, antes de que llegara la ola nos tirábamos al agua boca abajo, el agua nos arrastraba unos metros hasta la orilla y así una y otra vez. Éramos incansables, ojito con los flotadores y con las colchonetas, alguna vez decían: a fulanito lo tubieron que recoger cuando pasaba el vaporcito si no lo cogen la corriente lo lleva a America. Recuerdo aquellos veraneantes que venían de Arcos, Medina Sidonia. etc., y el roneo de los jóvenes de la época que cuanto arte y cuanta gracia había que tener para ronear como Dios manda. ¡qué cosas pasaban!

vaporporelcanal_puertosantamaria

El Vapor de El Puerto a su paso por el Canal.

Y del Canal cuantas cosas podríamos decir, mi abuela decía que antes desembocaba en otro sitio y que cambiaron el cauce después de unas terribles inundaciones, el rio Cartuja se desbordó, murió mucha gente ahogada y los daños materiales fueron cuantiosos. Mi familia pertenecía al mundo del toro, mi abuela materna era Maria Chica sobrina carnal del ganadero jerezano Curro Chica, yo me eduqué en las Esclavas en Jerez y tuve la suerte de, siendo mi familia quien era, nadie me dijera no te juntes con éste o con el otro, al contrario mi abuela siempre estaba dispuesta a ayudar a quien lo necesitara y así nos educó, nadie es mejor que nadie por pertenecer a una clase social o a otra.

Los taurinos decían algo así como que «Quien no ha visto toros en El Puerto no sabe lo que es un día de toros» y yo digo que quien no ha estado en La Puntilla no sabe lo que era un día de playa de los de antes. El recuerdo de aquel tiempo me lleva a los ahogados del canal. ¡Cuanta gente jóven falleció de manera absurda!, era impactante ver el cuerpo sin vida del ahogado alli sobre la arena esperando la llegada de la Guardia Civil. Algún alma piadosa lo tapaba, espontáneamente se oía una oración por aquella persona que tan sólo un rato antes estaba llena de vida y ahora por una imprudencia yacía en la arena muerta, curiosamente siempre eran hombres jóvenes. Cuanto dolor y cuantas lágrimas se derramaron, pero la tragedia se repetía una y otra vez cada verano.

playavaldelagrana_aerea_Puerto

Playa de Valdelagrana, vista aerea, finales de los sesenta del siglo pasado.

Recuerdo que en el verano de 1960, no se me olvida la fecha porque tengo una pulsera que me regalaron el día de mi santo con la fecha grabada, pues bién, como tantas veces cruzamos a Valdelagrana en barca, entre las personas iba una mujer enlutada con un ramo de flores en las manos, cuando estábamos en medio del canal lanzó las flores al agua, nadie dijo nada pero se acabaron las risas. No se quien era aquella mujer pero nunca olvidaré su cara.

Atravesando-desde-La-Puntilla-a-Valdelagrana

Atravesando desde La Puntilla a Valdelagrana en bote. (Foto Colección V.G.L.)

Yo vivo muy lejos, de mi familia directa no queda casi nadie en aquel rinconcito del sur, estamos repartidos entre Europa y América, pero por muy lejos que se esté, la bandera y la Patria se llevan en el corazón y el mío está repleto de aquellos veranos, de aquellas tertulias a la sombra de los pinares de La Puntilla. Fue un tiempo tan felíz que recordar aquella época y además poder compartir la experiencia es sencillamente maravilloso. (Textos: Carmen Freidías).

5

loro_alquiladores_puertosantamariaHubo un humilde personaje en El Puerto de la segunda mitad de los cincuenta del siglo XX que por humilde, ni siquiera era personaje, pero sí un ser entrañable para los niños de entonces, como yo: el Loro de la calle Alquiladores.

En aquellas frías e interminables tardes de esos años, a la salida de los colegios nunca faltaba a su cita con los chavales que pasábamos bajo su balcón. Se entablaba rápidamente un fluido coloquio entre los de la calle y el del balcón, en el cual se trataban variados temas, como las preferencias sexuales de unos y otro, menciones apasionadas siempre relacionadas con funciones fisiológicas, sobre los difuntos próximos de los de abajo, cuestionándose indefectiblemente, por parte del plumífero, la honorabilidad de las señoras madres de los de abajo.

El Loro (sí, con mayúsculas) demostraba con su diestro manejo del lenguaje,  adecuado a la ocasión, que disfrutaba de un entregado pedagogo que, a "full time", debía vivir dedicado a la puesta al dia del vocabulario de su aventajado pupilo.

Cuando voy a mi Puerto y paso por la calle Alquiladores, mis ojos a través de sus gafas de vista cansada, siempre se dirigen a ese balcón hoy vacío y si bién no una oración, sí que le dedico al Loro de la calle Alquiladores una sonrisa. Y sigo mi camino esperando oir tras de mí una voz aguda y chillona que me diga: ¡¡Hijo de p**a!! 

Veamos que nos cuenta Luis Suárez Ávila: "azulejo_loroLos animales se parecen a sus dueños. Eso es cosa que siempre se ha dicho, yo no sé si con fundamento o sin él. Pero, sea como fuere, me vienen a la memoria una serie de ejemplos y verbi gratias que me llaman la atención sobre el particular. Del  mundo de las aves, los loros,  son animales de los que en este Gran Puerto ha habido unos buenísimos ejemplares, más que nada por su carácter cosmopolita y por el comercio con la Indias. En cualquier casa había un loro, una cotorra o un guacamayo que un embarcado había traído de regalo. Sin embargo, siempre estuvieron sometidos a la disciplina y enseñanzas domésticas y nunca disfrutaron de libertad plena, como ahora que se han escapado, o los han echado a la calle, por perversos, y han poblado en colonias numerosísimas todas las palmeras de la entrada de Vista Hermosa y se han extendido a todos los Pagos del término municipal. Son loros salvajes y cotorras montunas, sin formación específica que, abandonados por sus dueños, se han multiplicado sin tasa en un medio que no les es el propio y ya van por la décima generación, por lo menos. En cierto modo son como los cocodrilos que aparecieron en un pantano madrileño, las tortugas americanas que pueblan nuestros ríos, o los patos malvasía foráneos que han abandonado sus dueños, con peligro y detrimento de bastardear la especie autóctona en los humedales de Doñana.

En este Gran Puerto, han abundado los loros famosos.
La prueba de que esta Ciudad es una de las más relevantes cunas del flamenco es lo que cuenta  Don Nicolás de la Cruz Bahamonde, Conde de Maule, en su “Viaje de España, Francia e Italia, en 14 volúmenes, publicado en Cádiz, a comienzos del siglo XIX. En el volumen XII, página 502, refiere que en El Puerto de Santa María vio en una casa un loro de treinta y nueve años de edad, del cual dice: “Su condición es montés e idiomática a pesar de sus treinta y seis años que lleva de encierro en esta casa; pero es muy alegre y gitano; le gusta la música, principalmente los palillos o castañuelas, pues en oyéndolos tocar en los tonos de zapateado, fandango, boleras u otros, por este orden, se alegra, grita y baila llevando el compás de la música con sus patitas...”

De ello se deduce la longevidad de los loros, la facilidad para los idiomas  --este es idiomático--, es melómano, y aficionado al flamenco –es muy alegre y gitano--, jaleador de los cantes  y bailaor.  Pero lo que no nos dice el conde de Maule es quién era el dueño de la casa, que seguramente sería igual, igualito en aficiones y condición, que el loro.
En la calle Alquiladores, cuando yo era chico, había un loro en un balcón, al que los niños y los mayores, le decían tacos, picardías y palabrotas. Pues el loro, no bien veía alguien pasar por la calle, prorrumpía en una sarta de insultos, que eran contestados por el viandante, con lo que el loro aprendía vocablos nuevos de esa jerga. Yo no sé quien era el dueño, ni si era persona educada, pero, con no haber cogido al loro y haberlo metido en un correccional, ya estaba retratado, por permitirle esa fea conducta y versación.

pstacido_puertosantamaria

En la calle Luna, desde 1927, hasta hace poco, estuvo abierta la tienda de tejidos y confecciones de Lolita Serafina --Dolores García de Quirós, casada con Vicente Acal--, cuya tienda frecuentaban las señoras al salir de misa en la Prioral. Pues bien, como Lolita era muy religiosa y su clientela también, el loro que tenía lo era igualmente. Y es que el loro cantaba con gran entonación eso de “Corazón Santo, tú reinarás...”, lo que era una delicia para las edificantes señoras que frecuentaban el establecimiento.

Otro loro famoso era el que tenía Rafael Alberti en su casa de El Puerto. En cuanto llegaba un camarada de visita le endilgaba “La Internacional”, con  revolucionario espíritu enardecido. Y es que cada dueño tiene y ha tenido el loro que le corresponde y cada dueño, en mala comparación, pero con toda propiedad, se parece a su loro. Eso es cosa del mimetismo ilustrado o cosa parecida, digo yo." (Texto: Luis Suárez Ávila).

1

reloj_frayjosecorderodetorres_puertosantamaria

Fray José Cordero de Torres, religioso lego del convento de San Francisco de El Puerto, nació en nuestra Ciudad en 1718 y falleció en 1797. Construyó el reloj de la torre de la Giralda de Sevilla, empezándolo en 1757 y terminándolo en 1764 'obra de singular valía --dice una popularísima descripción impresa-- por la exactitud con que funciona y la belleza de su construcción'. "La campana será o no la misma del reloj primitivo, que cambió por el suyo Fray José Cordero; pero  allí está el primoroso artificio, saturando de espiritualidad las horas de Sevilla" (Mariano López Muñoz). Realizó la reja de la Capilla de San Pedro de la Catedral hispalense, terminándola en 1780. Igualmente realizó los cuadros de cobre que se conservan en la Sacristía de la Prioral y el reloj de la torre del Convento de San Francisco. Tiene atribuido, aunque sin confirmar, la reja del entrecoro de la Cartuja de Jerez. (Foto: Francisco Sánchez).

4

falele_osborne_puertosantamariaRafael Osborne Fernández --Falele-- nace el 1 de abril de 1951, en la calle Larga, frente a Muebles Pantoja y a Tejidos Rendón, actuando como matrona en su alumbramiento la señora Gabiola. Es hijo de Tomás Osborne Macpherson y de Juana Fernández Rosado; el matrimonio tuvo seis hijas y un hijo, nuestro protagonista: Pilar Mamen, Marta, Rafael, Isabel, María Luisa, y María José.

De chico jugaba en la Plaza de Isaac Peral y en la de la Herrería, debajo de los soportales de la casa existente donde hoy está Romerijo. Recuerda que la pelota para jugar al fútbol --su gran afición-- la compraba en el “Refino de los Muertos”, con nótula 150 en Gente del Puerto. Salían corriendo cuando llegaba el guardia pues, como ahora, estaba prohibido jugar a la pelota en las calles. Jugaba con “el Choco”, Miguel hijo de “Barlete”, Vicente Serrano... De chico le encantaban las tiras de pescado seco que se venían, con mayor o menor abundancia, por la zona de la Ribera y de la Pescadería.

Estudió en el Colegio de Las Carmelitas, donde hizo la Primera Comunión e hizo el Preparatorio e Ingreso en el Colegio de La Pescadería.

faleleosborne_comunion_puertosantamaria

Durante la Primera Comunión, de manos del Párroco de la Prioral, Manuel Salido.

El bachillerato lo estudió en Jerez, en el Colegio de los Marianistas entre 1960 y 1964 y luego volvió a los Jesuitas  a El Puerto entre 1965 y 1968, terminando en Sevilla el Preuniversitario. Inició los estudios de Derecho que abandona en el curso tercero. Fue socio de 'Memphis' la rama juvenil de la desaparecida y añorada Agrupación Cultural Portuense 'Medusa', con nótula 181 en Gente del Puerto.

faleleosborne_equipo1_puertosantamaria

Fila superior, de izquierda a derecha, Falele Osborne, Medinilla, El Nene, Emilio Flor, Pepe Grande, Nani Paullada. Agachados, Paullada chico, V.L. Gómez, Mesa,  Paco Zamudio, Bellvis. Curso 1958/59.

montecillo_puertosantamariaENTRE EL CASINO Y LA RIOJA.
Rafael se inicia en el mundo laboral en el Casino Bahía de Cádiz, con la responsabilidad de Control de Juego. En 1985 se marcha a trabajar a la bodega que el Grupo Osborne tiene en La Rioja, Bodegas Montecillo (Fuenmayor), donde empieza a trabajar en el mundo de la bodega desde abajo: con la báscula, tomando muestras, en la vendimia. Luego pasaría a los laboratorios, donde estuvo por espacio de tres años, llegando a hacer 15 o 20 catas de diferentes vinos a diario, para controlar la calidad de aquel rioja. Lo acordado es que estuviera allí por cuatro años pero permaneció nueve,  hasta el año 1994 en el que regresa a El Puerto, por la enfermedad de su padre.

faleleosborne_toneleria_puertosantamaria

Rafael Osborne, en la tonelería de la bodega.

PORTEÑO ANTES QUE PORTUENSE.
Añoraba El Puerto desde fuera, como solo se echa en falta cuando se está lejos. «Me identifico con El Puerto. Lucho y quiero por y a El Puerto». Los sábados, siempre que puede se va a La Placilla a comprar, a respirar los olores de su infancia. «Siempre me he sentido más porteño que portuense. Portuense he sido cuando he ido al fútbol a defender los colores del Racing».

faleleosborne_racing_puertosantamaria

El pequeño Falele, con su padre, Tomás Osborne Macpherson, cuando era presidente del Racing Club Portuense, en el desaparecido estadio Eduardo Dato.

La situación de la crisis generalizada impide que las bodegas Osborne, los altos costos de producción y salarios, quizás impide que en el Departamento de Relaciones Públicas no lleguen a ser tan rumbosos como antaño pero, ¿que bodega lo es hoy? «Lamento que mis paisanos se queden con esa impresión y haya caído en el olvido lo que Osborne ha hecho por la sociedad portuense».

ENTRE JEREZ Y EL PUERTO.
En 1994 se incorpora a las Bodegas Bobadilla (Jerez) propiedad del Grupo Osborne hasta su cierre en 1997. Allí hizo de todo, pues aunque sus funciones fueron las de Director Comercial y de Relaciones Públicas también “miraba el vino”, controlaba el estado de los caldos que se criaban en las vasijas de aquellas bodegas.

toro-04LA BODEGA “EL TIRO”.
En 1997 se incorpora, ya en El Puerto, a la Bodega El Tiro (llamada así por haber estado en aquellos terrenos el “Tiro de Pichón”), de elaboración de brandy, como Director de RRPP. En aquellos tiempos se sacó al mercado el brandy “Toro”, más acorde con los gustos de los nuevos tiempos pero no alcanzó la demanda requerida y dejó de embotellarse. Recordamos que Bardem hizo un anuncio en el Museo Guggenheim de Bilbao, como lanzamiento del producto, una apuesta novedosa y moderna de la dirección general de las bodegas de entonces. En El Tiro permanece hasta el año 2007, en el que cesa la actividad de las visitas de forma reglada, realizándose en la actividad bajo demanda.

A partir del año 2008 se incorpora a la Bodega de Mora --en la calle de Los Moros-- donde atiende a los clientes VIP del Grupo Osborne desde el Departamento de RRPP y en la actualidad ocupa la dirección de dicho departamento como Jefe de Relaciones Públicas corporativo, con sede en la Bodega de Mora.

faleleosborne_raul_puertosantamaria

Rafael Osborne en la Bodega de Mora, atendiendo al goleador de 'La Liga de las Estrellas', el delantero madridista Raul González, quien estuvo en El Puerto invitado por Osborne para participar en el programa radiofónico de José María García, junto con el entonces seleccionador nacional José Antonio Camacho. En el transcurso de una cena se le hizo entrega del premio 'Carácter Propio' instituído por la firma porteña a través de una votación popular.

ENTRE DOS JUANAS.
Se casa con Juana Ruiz Barros en 1979 --hace 30 años ya-- con la tiene dos hijos: Tomás y Rafael: el primero es arquitecto y el segundo es publicista y experto en RRPP. Aficionado a la cacería y el fútbol, pudo haber hecho carrera en este deporte ya que “era de los buenos” y fue tocado por un ojeador del Levante, en los juveniles, pero su padre no lo consideró procedente y no autorizó aquella vocación. ¿Quien sabe que papel habría jugado Rafael si se hubiese encaminado por esos derroteros?

faleleosborne_equipo2_puertosantamaria

Rafael, capitán del equipo de San Luis Gonzaga, durante su etapa de jugador de fútbol en la categoría de juveniles. De izquierda a derecha, fila superior: Juanófeles Ruiz Herrera, Tuti Pastor, Rafael Osborne, Jesús Grande Lassaletta, Tano Fernández y Angel Moreno Zamorano. Agachados, José Manuel Pérez Sánchez --Chicho--, Juan Flor, Manuel González Verano (Taberna Bodega Obregón, con nótula 060 en Gente del Puerto), Alvaro Rendón y Emilio Flor.

faleleosborne_hermanas_1993_puertosantamaria

Con sus hermanas, en una instantánea tomada el 9 de agosto de 1993. De izquierda a derecha. Pilar, Mamen, Marta, Rafael, Isabel, María Luisa y María José Osborne Fernández.

faleleosborne_pandilla_puertosantamaria

Esta pandilla, de la que forma parte Falele, está formada desde que tenían 10/11 años y aún se reúnen, casi todos los viernes, a cenar. De izquierda a derecha, de pie Tuty Pastor, Miguel Lizaso, Miguel Silóniz y Juan Carlos Ballesteros. Sentados, Javier Merello, Javier Gómez, Nicolás Terry (Coli), Jorge Gutiérrez y Falele Osborne.  Al fondo, sentado, el cuñado de Falele, Paquito.

miguelangelpantoja_puertosantamaria

Miguel Ángel en su estudio, trabajando en un diploma. Al fondo una vitrina con objetos de sus múltiples colecciones.

Miguel Ángel Pantoja del Puerto nació en nuestra Ciudad dos días antes de la festividad la patrona, la Virgen de los Milagros, en 1937, hijo de José Pantoja Leal y Ana del Puerto Capilla.  Quinto de seis hermanos: José María, Francisca, Diego, Antonio, Miguel Ángel y  Ángel. Desde su educación elemental hasta el bachiller, realizó sus  estudios en eI colegio privado Don Juan Díaz, “el Cojo”, con nótula núm. 138 en Gente del Puerto.

familiapantoja_puertosantamaria

La familia Pantoja del Puerto al completo en un montaje fotográfico (no hay que olvidar el Estudio de Fotos de la Familia Pantoja): de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha: José María, Francisca, Diego.  Ana del Puerto Capilla y José Pantoja Leal. Antonio, Miguel Angel y Angel.

miguelangelpantoja_diploma_puertosantamariaA muy temprana edad y durante años sucesivos, se matriculó en la Academia de Bellas Artes de Santa Cecilia, donde recibe clases de dibujo artístico y pintura bajo la dirección del célebre pintor Juan Lara Izquierdo, como profesor, obteniendo notas de sobresaliente, premios y diplomas de reconocimiento. A la finalización de los cursos se exponían los trabajos de los alumnos más destacados. Su primera obra fue adquirida por 200 pesetas en  1952, que ya eran pesetas para la época, cuando apenas contaba quince años. La venta de aquella acuarela le produjo una enorme alegría.

Ya desde entonces advierte en si su inequívoca tendencia hacia la pintura realista, de cuidadoso dibujo, haciendo suyas las técnicas del dibujo a lápiz y a la plumilla, destacando muy especialmente la acuarela, técnica que valora sobremanera.

miguelangelpantoja_bellasartes_puertosantamaria

El 17 de abril de 1953, asistiendo a una clase en la Academia de Bellas Artes de Santa Cecilia, de la que era alumno distinguido y premiado.

miguelangelpantoja_avion_puertosantamariaEn el año 1959, realiza el Servicio Militar, como cualquier ciudadano de entonces, en el Ejercito de Aire, en la Base Aérea de “La Parra’ de Jerez.. De ese período conserva el recuerdo de buenas amistades, pero también de "no tan buenos momentos vividos". Lo cierto es que Ia denominada "Mili" le pareció interminable. (En la imagen, accediendo a un avión en la Base de Jerez).

BODA EN ALEMANIA.
Sus inquietas ansias hacían lo desconocido y su insaciable búsqueda de nuevos horizontes, le indujeron a marchar, muy joven, al extranjero. Echó sus raíces en la moderna Alemania, donde en 1961 se casó con Helga Hölzer-Himmelmann y tuvo dos hijos que viven en Alemania.

INTERIORISMO.
Allí cursó sus estudios de Decorador-Interiorista (“Innenarchitekt”, titulo en Alemán), en el “Institut Für Lernsysteme”, de Hamburgo. Diplomado con la nota “1=Sehr Gut” (sobresaliente), madurando profesionalmente con éxito en la industria del mueble en empresas de ámbito internacional, donde ejerció esas labores tan vinculadas con sus tendencias, (planificación, dirección de montaje y decoración de ferias y exposiciones, tales como: Feria Internacional del mueble de Colonia- ¡la mayor del mundo!; Paris; Londres; Amsterdam; Bruselas; Madrid; Barcelona; etc.

miguelangelpantoja_alemania_puertosantamaria

En la imagen, Miguel Ángel Pantoja, a la izquierda, posando ante una de sus obras premiadas, en Alemania.

Su profesión  también le depara, por sus continuos desplazamientos, la ocasión de conocer ampliamente los distintos parajes, no sólo de ese pais, sino igualmente, de la mayor parte de los estados europeos, los Estados Unidos de América y Canadá. Al mismo tiempo intensifica su vocación por la pintura, que nunca olvidó, formando parte del Grupo Artístico “Das Fachwerk” en Bad Salzuflen. Obtuvo un premio en el “Werbezeichnwettbewerb der Volkshoschule” en Herford. En Alemania expuso con mucho éxito obras con temas españoles y alemanes.

miguelangelpantoja_galeras_puertosantamaria

Una imagen costumbrista pintada por Pantoja en 1998: La Fuente de las Galeras Reales.

También tomo parte en numerosos cursos de Programación, Dirección de Personal, Organización de Empresas, etc. Debido a la capacidad bilingüe, (habla alemán perfectamente), actuó de coordinador comercial, a nivel de dirección en el Departamento de Exportación  en todas las relaciones con países de habla hispana. Del mismo modo y durante años, impartió como docente Cursos de Español para alemanes en la “Volkshochschule” (Escuela Estatal para Adultos) en las ciudades de Vlotho, Löhne, Herford, etc.

miguelangenpantoja_expo1990_puertosantamaria

En una exposición de su obra, en diciembre de 1990, en El Puerto.

Después de muchos años tras la muerte de su esposa regresa El Puerto, donde volvió a contraer matrimonio, el día 7 de Diciembre de 1989 con Margarita María Tienza Villalobos, maestra de Primera Enseñanza, dedicándose con afán y entusiasmo a la pintura como expresión artística. Ha obtenido varios primeros premios en Certámenes de Pintura y ha expuesto sus obras paulatinamente en exposiciones individuales y colectivas. También, en ocasiones, el cartelismo ha sido motivo de su atención.

miguelangelpantoja_coches_puertosantamaria

Con la Junta Directiva del Club de Vehículos Históricos de El Puerto.

La pintura y el dibujo es su arraigada pasión, que comparte, aunque en menor escala, con otras aficiones, tales como la colección de juguetes antiguos, soldados de plomo, objetos militares, curiosidades etc. etc., igualmente tiene pasión por los automóviles y motos antiguos, siendo en la actualidad vicepresidente y tesorero del Club de Vehículos Históricos de nuestra Ciudad.

miguelangelpantoja_sables_puertosantamaria

Colección de sables de paseo y otros, perteneciente a una de las muchas colecciones de las que es entusiasta poseedor nuestro protagonista.

miguelangenpantoja_feria1941_puertosantamaria

En la imagen, de pequeño,
preparado para la Feria
de 1941. La foto está reali-
zada en Estudios Pantoja.

Un buen amigo, Paco Solís Muñoz-Seca, le escribió en 1973 en Colonia estos versos:

A MIGUELILLO,
ESPAÑOL Y SIN SOMBRERO.


De tu pasado saliste
como aquellos puestos de chucherías
que en nuestros recuerdos felices
de feria en feria se veían

Tienes figura de artista,
de gitano aristócrata,
también tienes algo de sabio
y de escondidos resabios.

Los arcos de los Portales
sombrearon tus pasos,
y tus amores en el Parque
en algún Otoño murieron.

¿Te acuerdas de aquellas Ferias,
en la de “Ganao” y en la Victoria,
cuando llenos de luz y alegría
lo pasábamos en la gloria…?

Recordando te haces hombre.
¡Qué suerte la tuya Miguel, qué suerte
ser del Puerto y por dos veces!

5

juanbermudezjaen_puertosantamariaJuan Bermúdez Jaén (EL Puerto 1915 - Barcelona 1972), era hijo de Rafael Bermúdez Delgado y Juana Jaén Delgado. Desde muy jovencito ayudaba a su padre en un taller de bicicletas

Juan Bermúdez nació en plena Primera Guerra Mundial. Ese año --1915-- Franz Kafka publica “La Metamorfosis” y Picasso pinta su famoso “Arlequín”, Einstein da a conocer su “Teoría de la Relatividad” y Sigmund Freud publica su tratado de Metapsicología. El gaditano Manuel de Falla, compone “El Amor Brujo”. Es el año en el que nacen el político comunista Santiago Carrillo, el banquero estadounidense Rockefeller, la actriz sueca Ingrid Bergman, el escritor Arthur Miller, el dictador chileno Augusto Pinochet, el cantante Frank Sinatra. En 1915 mueren el neurólogo alemán Alois Alzheimer, el fundador de las Juventudes Socialistas, Tomás Meabe y el filósofo y pedagogo Francisco Giner de los Ríos.

milagrostejadapeluffo_puertosantamariaSe casó con 25 años, en octubre de 1940, con Milagros Tejada Peluffo (El Puerto 1917 - Madrid 2002) conocida como Lalo --hermana del fallecido poeta José Luis Tejada-- era hija de Felix Tejada Mayo y Milagros Peluffo Delgado. El matrimonio se fue a vivir a la Ribera del Río, 37 y tuvieron cuatro hijos: Milagros (Lalote), Juan Luis, Francisco Javier y José Manuel. Conforme iba aumentando la familia, se trasladaron a la Granja de San Javier (frente a lo que queda del Paseo de la Victoria). Le pusieron ese nombre porque su hijo Javier, al nacer, estuvo en serio peligro de muerte y se encomendaron al patrón de El Puerto, San Francisco Javier.

La suegra de Juan Bermúdez fallecería a los pocos días de nacer el poeta José Luis Tejada. Las hermanas José Luis y la futura mujer de Juan Bermúdez, Lalo, fueron internadas como únicas alumnas en esa circunstancia en el Colegio de Las Carmelitas, donde permanecieron hasta que Milagros Tejada Peluffo pudo hacerse cargo de ellos, por eso el poeta la llamaba cariñosamente “madre hermana”. Allí Milagros cursaría --por que se aburría-- la carrera de Piano.

tejadamayo_puertosantamariaJuan Bermúdez y dos de sus hermanos trabajarían en la Fábrica de Hielo propiedad, a partes iguales, de José León de Carranza y de su suegro Felix Tejada Mayo. A su fallecimiento, Juan le compra a las hermanas Tejada la parte que heredaron, asumiendo la gerencia de dicho establecimiento, hasta que se abrió una nueva fábrica en el Muelle, dejando de ser rentable, ante la fuerte competencia que sobrevino. Juan Bermúdez llegó a afirmar que, sin la fábrica «que ha sido toda mi vida, ya no me quiero quedar en El Puerto». Además llegaba el momento en el que los hijos empiezan a estar en edad de iniciar carreras universitarias y Juan y su mujer Lalo, querían permanecer cerca de sus hijos. Se plantean abandonar El Puerto.

En el año 1962 se trasladó la familia a Madrid donde abrieron como buenos porteños de la provincia de Cádiz una freiduría -un Freidor- que no tuvo éxito.  Y tres años mas tarde se trasladan a Barcelona. En 1978 las dos Milagros, Lalo y Lalote, madre e hija, vuelven por cuestiones de trabajo a la capital de España. (En la imagen Félix Tejada Mayo, padre de Lalo, con sus nietos Lalote que sostiene en sus brazos a José Manuel. Entre las piernas de su abuelo está Juan Luis y a la derecha Javier, hijos de Lalo Tejada Peluffo y de Juan Bermúdez Jaén).

Larga-Autobus-de-la-Estacion-(25.09.1955)LA GUAGUA 'CAMPANITA'.

Según relata Javier Bermúdez Tejada, la Guagua fue posiblemente con el de Bootello uno de los primeros autobuses que tuvo El Puerto, al que llamaban “el omnibus”. Era una guagua canaria, de madera, con los asientos igualmente de madera, que llegó a nuestra Ciudad en muy mal estado y que Juan Bermúdez, aficionado a la mecánica desde pequeño, arregló. Todo lo que caía en sus manos con averías encontraba solución: coches, camiones, taxis, ante la atenta mirada de su hijo Francisco Javier (quien en la actualidad vive en Barcelona), que le ayudaba y escuchaba vestido con un mono mecánico.

Aquel transporte hizo su primer trayecto desde la Estación de Tren hasta la Playa de Valdelagrana; nació con esa vocación transportar a los viajeros procedentes de Sevilla o Jerez a la playa, entre arenales y el bosque de pinos que era el Coto de Valdelagrana. Más adelante, este autobús amplió su recorrido por la circunvalación de El Puerto y como transporte para las Ferias. (En la imagen, el autobús de la Estación, en una instantánea tomada el 25 de septiembre de 1955, en la calle Larga. Foto Colección Vicente González Lechuga).

laguagua_miguelangelpantoja_puertosantamaria

En la imagen, la Guagua de Juan Bermúdez, en un cuadro de Miguel Ángel Pantoja, pasando por delante del actual Echate P'yá, Restaurante Los Portales y Casa Flores. Al fondo el edificio donde hoy se encuentra Romerijo.

La Guagua, “el omnibus” que tenía matrícula de Cádiz, se llamaba “Campanita” y carecía de claxon para avisar, solamente tenía un pedal en el suelo que al pulsarlo activaba el sonido de una campana. En ocasiones, los pasajeros picaban al conductor y le cantaban la canción “Campanita de la Aldea” para, a continuación el chofer pisar el pedal produciendo un sonido característico. Aquel “clin,clin” acompañaba a la canción, muchas veces, hasta el final del trayecto.

CAMPANITAS DE LA ALDEA.

Eres buena y eres mala
pero como te quería
todito te lo pasaba

Campanitas de la aldea
que llamáis al amor mío
no toquéis tan temprano
que hace frío, mucho frío

Está nevando en la aldea
y mi amor ya se ha dormido
no quiero que se despierte
que soñando está conmigo

Guarda silencio campana
mientras mi cariño duerme
que no quiero darle un beso
para que no se despierte

Callada ya está la fuente
dormidos los surtidores
y hasta que el sol no sonría
llorando estarán las flores

Parece que allá en el cielo
se desnudan los almendros
y las torres de la aldea
de novia se están vistiendo

Guarda silencio campana
mientras mi cariño duerme
que no quiero darle un beso
para que no se despierte.

campanitasdelaaldea

Campanitas de la Aldea (bolero por bulerías),
interpretado por el Cojo de Huelva.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies