3.795. El Palacio O’Neale. Nuevo libro de Antonio Gutiérrez, de la serie ‘Mansiones y Linajes’

La Asociación Cultural Puertoguía ha editado, como viene siendo costumbre en los meses finales de los últimos nueve años, un nuevo volumen de la colección “Mansiones y Linajes de El Puerto de Santa María”, el IX, del que es autor como de todos los precedentes, Antonio Gutiérrez Ruiz, habitual colaborador de Gente del Puerto. En este trabajo de investigación, se recoge la historia de la casa de calle Santo Domingo, 1, denominada “Palacio O’Neale”  y la de los propietarios y ocupantes de ella durante 225 años

En el volumen se narra la llegada a nuestra ciudad en 1612 del príncipe Manuel Filiberto de Saboya, nombrado Capitán General de las Galeras Reales, acompañado de un vistoso séquito, y su conexión con el espacio urbano historiado en tan lejana fecha. Después se cuenta la historia de tres generaciones de la familia O’Neale que ocuparon durante casi un siglo tan singular inmueble, desde que el irlandés Patricio O’Neale, fundador de la saga, se instaló en nuestra ciudad hasta que los O’Neale Rivero migraron a Jerez en el último tercio del siglo XIX, aunque continuaron manteniendo la propiedad, arrendando el inmueble. 

Fueron inquilinos del inmueble situado en la esquina de la calle Santo Domingo con Larga, Dolores Lasaletta y familia, Carmen Seoane, hermana del General Seoane, la familia Figueroa Ivison y la Viuda de Aldaz, finalizando la secuencia de vecinos y propietarios con el nieto de ésta última, José Luis de la Cuesta Aldaz, que la adquirió en los primeros años del siglo XX y la ocupó con su familia hasta su fallecimiento, en la década de los cuarenta del pasado siglo. Tanto de este significado personaje de la vida local, como de sus ascendientes y descendientes se incluye una completa biografía.

Antonio Gutiérrez relata en el volumen, con su personal discurso narrativo: “No sabemos si el estilo por el que nos hemos decidido desde el primer volumen de esta serie a contarles a ustedes, amables lectores, lo que averiguamos sobre las diversas familias que forman parte de la historia de cada casa, les agradará. Nuestra intención es precisamente esa, mostrar los datos ciertos y reales “adornados”, o novelizados, que es el término que suele aplicarse a este estilo de redacción, para que la ingente cantidad de nombres y datos que a lo largo estas páginas se mencionan y aparecen, no empachen al lector y consigan –al menos esa es nuestra intención- que la lectura del texto resulte lo más amena posible, al tiempo que aportamos nuestro modesto granito de arena a la historiografía local.”, como él mismo Gutiérrez define en el prólogo.

Finalmente, señalamos que el libro tiene 230 páginas, medio centenar de ilustraciones y más de 200 notas a pie de página informando de las referencias bibliográficas, aclarando,  ampliando y complementando el  propio texto y, a los que pueda  interesar su adquisición, informarles que ya pueden hacerlo en media docena de librerías y papelerías locales.