"Un periódico consta siempre del mismo número de palabras, haya noticias o no las haya." Henry Fielding.
En la fotografía, la periodista Melissa Rivas Lobo, junto a un “perchero de árbol», el árbol de la Ciencia, el árbol del Bien y del Mal. Melissa ha trabajado a ambos lados de la trinchera en el mundo de la comunicación: informando al público de la actividad de los políticos e informando a los periodistas de la actividad de los políticos. No sabemos como, pero siempre aparecen los políticos en su vida profesional, aunque no son el único objetivo de la información. También existen otras noticias. Tiene sentido del humor, es digna hija de su padre y de la tierra que la vió nacer: a ella y a Don Pedro Muñoz Seca.
Construyendo está el árbol de su vida y se apoya, de vez en cuando, en ese árbol científico, maléfico y bondadoso que es el perchero: lo tiene a escasos metros de su mesa de trabajo. Un perchero donde se cuelgan conceptos, se descuelgan ideas, se cosechan pensamientos y se buscan almas puras. Entre papeles, periódicos, libros, citas, proverbios, cantares y sentencias:
- "Si su madre dice que lo ama, verifíquelo". Sección de noticias del Chicago Tribune.
- "Aquí no toleramos los errores y cuando los descubrimos no descansamos hasta corregirlos". Joseph Pulitzer. El premio más prestigioso de periodismo lleva su nombre.
- "A veces ser el último en informar es mejor que estar equivocado". Chicago Tribune, luego de dar erróneamente por ganador a Dewey en vez de quien salió electo presidente de los Estados Unidos, H. Truman.
- "Si te equivocas en las cosas pequeñas, los lectores no confiarán en ti para las cosas grandes". Jack Fuller, abogado y periodista, corresponsal de guerra, ganador del Pulitzer.
- «El periodismo mantiene a los ciudadanos avisados, a las putas advertidas y al Gobierno inquieto». Francisco Umbral y su bufanda.
- «El periodismo consiste esencialmente en decir 'lord Jones ha muerto' a gente que no sabía que lord Jones estaba vivo». G.K. Chesterton. Escritor hijo de la Gran Bretaña.
- «Los periódicos en España se hacen, en primer lugar para que los lean los periodistas; luego los banqueros; más tarde, para que el poder tiemble y, por último e inexistente término, para que los ojee el público.» Antonio Fraguas Forges, humorista, dibujante, filósofo.






Las ideas relacionadas con los cabellos entre los pueblos del Mediterráneo partían de la base de que éstos simbolizaban la plenitud y la vitalidad del hombre. El cabello no es una parte del ser humano que dependa de su voluntad, crece de forma espontánea, incluso más allá de la muerte durante cierto tiempo. El cabello era por lo tanto portador de muchos simbolismos, y de alguna manera, cada individuo se sentía representado por sus cabellos. Cuando el cabello se caía o se volvía gris, el individuo se sentía amenazado por la edad o la enfermedad y sentía mermada su capacidad vital.
"De nuevo en ruta, logran escapar de las Sirenas, cuyo canto hace enloquecer a quien las oiga. Para ello, Odiseo ordena a sus hombres taparse los oídos con cera exceptuándolo a él y manda ser atado al mástil. Escapan también de las peligrosas Caribdis y Escila. Consiguen llegar a Trinacria (nombre griego de Sicilia), la isla del Sol."
Corrían los años 60 y 70 del siglo pasado. Por entonces El Puerto no era todavía segunda residencia de casi nadie y la especulación de los ladrillos no había alcanzado su paroxismo en nuestra Ciudad. Un hombre del Puerto hizo por los portuenses mucha más cosas que tantos y tantos políticos que han pasado por la Casa Consistorial, desde su puesto de empleado público: proporcionarles una vivienda digna cuando la Constitución que hoy nos lo ‘asegura’, todavía no estaba promulgada.



