
Rafael Esteban Poullet nace en la Calle Larga, 13-15, el 26 de marzo de 1935. Hijo de José y Carmen, es el primogénito de 12 hermanos. Muy involucrado con el sector de la vitivinicultura, a su pesar, estuvo trabajando con su hermano Enrique y con su padre, en la Fábrica de Productos Enológicos que estuvo abierta desde 1905 hasta que, a finales del siglo XX, tuvo que cerrar víctima de la enésima reconversión del sector vinícola de la zona. Ahora, a destiempo, se dedica a todo lo que siempre quiso hacer, a las actividades culturales que siempre tuvo en un segundo plano pues, desde la vuelta del servicio militar el negocio familiar de los Poullet.
«A la tierra en la que uno nace se le toma aprecio, pero no siempre se acaba amándola como un amante ardiente y perseverante. El azar que nos ha permitido cautivos gozar de la existencia, no siempre acierta en nuestros deseos de plenitud con el horizonte de la mañana. Este es el caso de Rafael Esteban Poullet, nacido en las Puertas de Hércules en 1935. Cultivado en las ciencia del Mediterráneo, su hedonismo vitalista y creativo siempre está en lance con el tempestuoso Océano, lustros de convivencia con el que ha sabido pactar, empero, una armonía no siempre exenta de las sombras de la intolerancia del monoteísmo. La aridez del contexto en el que fue educado, lejos de acomodarle en la común cosmología de valores colectivamente compartidos, le impulsó a superar las barreras culturales enraizadas en el tradicionalismo comunitario, y en su obra está el resultado latente de su concepción de la vida inspirada en las entrañas del Egeo. ¿Quien no ha visto a Faelo cabalgar en dirección a Atenas a lomos del viento de Levante?». Biografía Íntima. Alfredo Hidalgo Lavié. Dr. En Ciencias Políticas. (En la fotografía, Faelo, caraceterizado de griego clásico, en una estancia de su casa de la calle Larga, en la década de los cincuenta del siglo pasado).

Faelo, al final del Parque Calderón, en la escalera de acceso al desaparecido Puente de San Alejandro, con apenas siete años.
Estudió en el Colegio de Las Carmelitas hasta que hizo la primera comunión; luego vendrían la Academia Poullet y los Jesuitas. Empezó Comercio con D. Juan Díaz Gómez --peritaje mercantil-- que abandona tras su incorporación al servicio militar y, definitivamente a la empresa.

En el Cuartel de San Fernando de Sevilla, durante el Servicio Militar, el segundo por la derecha de la fila superior.
Los Esteban, o como son conocidos en El Puerto, los Poullet, han destacado siempre en el mundo de las artes o las ciencias. Y Faelo es un humanista que ha tocado muchas disciplinas tanto literarias como plásticas, además de su incursión en el mundo de la cinematografía, la antropología, el diseño, la arqueología. En literatura ha cultivado la poesía, narrativa y teatro. En artes plásticas ha practicado la acuarela, el collage --una de especialidades-- o la cartelería.
DE LA MEDUSA AL ERMITAÑO.
En 1962 fue socio fundador de la Asociación Cultural Portuense Medusa, junto con José Luis Tejada, Manuel Martínez Alfonso, Rafael Tardío Alonso, el Padre Pascual,... Medusa cierra sus puertas en 1978 y luego, dos años después nace en Jerez, en el Bar La Parra, la que sería la Tertulia “El Ermitaño”, con Carlos Aladro, Julio y Mariano Rivera Cross, Paco Bejarano, ... La Tertulia se traslada a continuación a El Puerto, en verano al Bar El Ermitaño --de donde toma nombre el grupo--.

Jardin de la Casa de Faelo, en Larga, 13.
Durante varios veranos las reuniones se celebraron en el jardín griego de Faelo, en su casa de la calle Larga, 13; luego sin abandonar dicha calle, se encontrarían en el jardín de la casa de Zacagnini, con algunos intermedios. Y ahora, tras casi 30 años de vida y haber tenido una etapa en el pub Milord, se reúnen en el Hotel Santa María.

Faelo, en su primera visita a Madrid, en la Ciudad Universitaria.
ENCUENTRO CON LA MUERTE.
En abril y mayo de hace ahora dos años --en 2006-- Faelo vivió una experiencia cercana con la muerte. Una hernia de hiato hizo que los médicos no contaran con él. Faelo veía que se moría. Pero lo superó. En la pseudoagonía no le vino nunca el pensamiento religioso. Experimentó una narrativa de la muerte con un libro en blanco: quería vivir. Solo quería vivir. Además, no alcanzó a ver esa luz al final de un túnel que quienes han tenido una experiencia cercana a la muerte afirman haber visto. Como no podía ser de otra manera, una película, “El Séptimo Sello” de Ingmar Bergman, fue el paralelismo de su econtronazo con la muerte. En la escena final, los protagonistas huían en un bosque de algo que les perseguía y Faelo, en el hospital huía de lo que él era consciente que tenía que escapar.

De manos del ministro Utrera Molina, recibiendo trofeo por su corto premiado en Sevilla.
EL CINE.
En la década de los sesenta del siglo pasado, rodó un corto en 8 mm: “El cuento de los juguetes abandonados”, que fue premiado en Sevilla con el Festival del Giraldillo. Luego vendría el documental “La Ciudad de los Muertos” rodado en el cementerio de El Puerto.
También el corto “Petit Cherie” y “Serenata para un joven estudiante”, en 1970, siendo su último trabajo “El Circo”, rodado tras la muerte de Franco. Con el cambio de formato, de cine a video, lo deja. No le ilusiona hacer cosas para ser vistas en pequeñas pantallas. Conserva, inédito, el guión del documental “Suite Rocío. La otra Virgen del Rocío”. (En la fotografía de la izquierda, Faelo, a finales de la década de 1960).
LITERATURA: LA POESÍA.
En Poesía hizo algo durante el servicio militar, que olvida, y luego continuará con la prosa para retornar a los poemas, después de su primer viaje a Grecia en 1977. Tiene publicados en la antología “Selección de Apócrifos. Poemas Sacros y Profanos” (1985-89). En 2001 se incluye un poemario suyo en “Et in Arcadia ego” en la colección de poesía del Aula de Cultura “José Caldalso, de la Ciudad de San Roque, o “El Lecho Pródigo” presentado el pasado jueves día 23 de abril en la Fundación Alberti. Tiene inédito tres libros de poesía y ha publicado en revistas como Arrecife (1987), Alora (1992), Zurgai (1992) y Por ejemplo (1997).
NOVELA PARA EL CINE.
En Narrativa, su novela publicada por la editorial Barataria y actualmente agotada, “Yo, Juan, el discípulo amado”, es la primera entrega de una trilogía sobre los orígenes del cristianismo desde un punto de vista totalmente heterodoxo. Le seguirán “Pablo y Bernabé” y “La pasión de Sergio y Baco”, todas ellas basadas en guiones cinematográficos de Faelo y posteriormente novelados. Precisamente en la pasada edición del Festival de Cine de Málaga se presentó la semana pasada un proyecto de largometraje del director español Emilio Ruiz Barrachina, titulado “El Discípulo”, inspirado en esta su primera novela. La película se hará en verano y tratará de la vida y Pasión de Jesús, desde un punto de vista histórico. En el reparto, están previstos: Joel West, Ruth Gabriel, Marisa Berenson y Carlos Bardem. La producción asciende a 5 millones de euros y los diálogos han sido revisados por el catedrático de la Complutense Antonio Piñero. La película iba a ser dirigida por Eloy de la Iglesia, interesado en el texto en 2005, pero su fallecimiento, un año después, dejó inacabado el proyecto.

Faelo, a finales de la década de 1950 del siglo pasado.
TEATRO.
Ha terminado recientemente una obra que espera pasar a limpio y cuya acción transcurre en el ambiente de la posguerra civil en El Puerto y sus bodegas; lleva por título “Y saltó el Levante. (La Coartada)”.
COLLAGE: SUITE ROCÍO
En 1992-1993 se estrena la Suite Rocío, aunque Faelo ya se había especializado en mezclar el presente con el pasado mas o menos clásico a través de la técnica del “collage”. Es Rocío la invención y diseño de una colección de 74 estampas apócrifas de la Virgen del Rocío y 10 carátulas de cabecera según esquemas de los siglos XVIII y XIX en libre interpretación, teniendo como base material iconográfico de los siglos mencionados. «Suntuosos montajes, de imágenes realizadas a base de grabados antiguos. En sus composiciones, Ella, la Virgen, es elevada por el mar en una barca fenicia, con su gran ojo pintado en la proa, se la ve delante de los templos griegos, en Babilonia, entre ciervos y jabalíes, debajo de los pinos del Coto de Doñana, en todas las épocas y todas las civilizaciones. Pregunté cómo se le había ocurrido la idea y él me dijo que sólo era un intento de describir la realidad». Vivi-Ann Sjörgren. Andalusiens Groava Salt. (Sal gorda de Andalucía. Helsinki. 1996. Final del Capítulo “Coronación de la Virgen”.
Los cuadros están, en su mayoría en el Salón de Plenos de la Hermandad del Rocío, excepto la última parte, dedicada a Grecia, que se encuentra en el Museo Municipal.

Otras colecciones de Faelo, otras carpetas como “Picasso y el Toro de Osborne”, (en la ilustración superior) “Picasso, el Amor y el Mediterráneo”, “Roberto Alcázar y Pedrín en la Batalle de Keronea” (en la ilustración inferior), “La Doncella y el Toro de Osborne”, producciones de 1996, se vinieron a sumar a su amplia producción de collages. En Internet, estuvo durante un mes expuesto la serie inédita de collage a color “El Mito de la Anunciación”, en la web de Tusitala Comunicación.

LAS TÉCNICAS.
Grafitos, acuarelas, carboncillos, lapiz color, témpera, pastel y acuarela, carboncillo y grafito, óleo sobre cartón, tintas diversas, tinta china, óleo sobre lienzo, tinta y lápiz color, óleo sobre cartulina, grafito y lápiz color sobre lienzo, óleo sobre madera, carboncillo y sanguina, acrílico sobre tabla, tinta y rotulador, comic en collage, ... son las técnicas que ha utilizado Faelo para expresarse a lo largo de su prolífica vida de artista plástico. Una selección de su obra fue mostrada en la exposición antológica “Itaca 2000” celebrada entre el 28 de agosto y el 12 de septiembre de 1999, en el Centro Cultural Alfonso X “el Sabio”.
Faelo ha tocado otras expresiones artísticas como el tradicional “Belen” o “Nacimiento”, entre los años 1940 a 1962, el último. Paso desde el nacimiento popular hasta los dioramas grandes, que obtuvo el primer premio provincial. Y ahí lo dejó. Con la Academia de Bellas Artes realizó un belén realizado con figuras de arpillera, saliendo de lo tradicional.

Exposición Colectiva celebrada en el patio de operaciones de la Caja de Ahorros de Cádiz de la Plaza del Polvorista, en 1986. De izquierda a derecha, Rafael Bayo, Juan Bayo, Pepe Zamorano, Paco Arniz, Mari Carmen Orellana, Pepita Lena y Faelo. (Foto Colección Francisco Arniz Sanz).
CARTELERÍA, DIPLOMAS
Ha cultivado diversas técnicas para la cartelería y el cartelismo, género que ha cultivado y culminado en El Puerto habiendo realizado las convocatorias del Carnaval 2004 y la Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino de este año 2009. El año pasado realizó el cartel del cincuenta aniversario de la refundación de la Hermandad del Rocío Con anterioridad ha diseñado el Cartel del Congreso de Enfermería de Cádiz en 1990. El Congreso Nacional de Odontología Infantil en 1995. Ha realizado también la serie de carteles de la Fundación Goytisolo, desde el año 2003. También lleva realizando los diplomas (todos originales e individualizados) de los Premios de Patrimonio Histórico Local, a razón de dos por año. (En la ilustración, el cartel anunciador del Carnaval de El Puerto del año 2004).
EXPOSICIONES.
Feria del Vino. Montilla (1961). Casino de Labradores. Medusa. (1964). Caja de Ahorros de Jerez. Jerez (1971). Castillo de San Marcos. (1979). Casa de la Cultura (1980). Diseños. (1981). Casino Bahía Cádiz (1982) Caja de Ahorros de Jerez (1984). Caja de Ahorros de Cádiz (1986). El Tragaluz. Jerez (1987). La Caja de Pandora (1988). Club Taurino Celso Ortega (1989). Bodega San Fernando (1992). Auditorio Municipal San Miguel (1992). Bodega San Fernando (1993). Galería Trinidad Gautier. Jerez (1993). Sagitario (1994). Auditorio Municipal San Miguel (1994). Sala Victoria. Sanlúcar (1994). Centro Cultural Alfonso X. (1995). Plastilírica (1996). Sala La Imperdible. Sevilla (1997). Centro Alfonso X (1998). Plastilírica (1998). Centro Cultural Alfonso X (1998). Antológica. Centro Cultural Alfonso X (1999). (En la fotografía de la izquierda, descubriendo junto al alcalde de la Ciudad, Enrique Moresco, el cartel anunciador de la Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino 2009).
«El concepto del arte y de lo bello ya no puede ser el mismo que se tenía antes de la Revolución francesa. Ésta y los románticos lo cambiaron para siempre. Y no digamos después de Auschwitz e Hiroshima y ahora de Kosovo. [,,,] Sin renovación, tanto la vida como el arte se estanca y muere. Tanto la vida como el hombre que hace verdadero arte se renueva, prosigue hacia lo eterno para mayor gloria de éste». Mi Concepto de la belleza en el arte pictórico. Exposición Antológica. Faelo Poullet. 1999.

Faelo, en Jordania, el pasado año 2008.

Victor Bellvis Acosta --Belva-- nace en El Puerto el 13 de julio de 1985. Hijo de José Ignacio y Carmen, porteño y jerezana, es el segundo de dos hermanos y nieto del conocido bancario jubilado del Andalucía, Rafael Bellvis. Vive en la calle Manuel Álvarez, 44, pegado al coso taurino, a una de sus grandes aficiones: el mundo de los toros. Tiene un perro, de nombre Henry, que lleva con la familia once años. Estudió primaria y parte de secundaria en el Colegio SAFA-San Luis, terminando sus estudios de bachillerato en el Instituto “Pintor Juan Lara”. En la actualidad estudia Ciencias Empresariales en Jerez de la Frontera. Satisfecho de los estudios que está llevando a cabo, el año próximo tiene previsto terminar la carrera de grado medio en Inglaterra, en la Universidad de Wolverhampton, con una beca Erasmus. (Victor, con su Cannon reflex, en el burladero de fotógrafos de la Plaza Real).
Victor, no tiene antecedentes familiares en el mundo de la fotografía. Su afición a la Semana Santa le hace entrar en el mundillo de los objetivos y las cámaras, empezando en el año 2004 con una cámara réflex de carrete, de forma autodidacta y agradeciendo los consejos de los profesionales que va conociendo, con los que llega a entablar una relación de amistad.
Apasionado tanto de la fotografía cofrade como de la taurina, colabora con la web taurina
DISTINCIONES SEMANA SANTA.


Dicha empresa era valenciana y se encargaba del suministro de intendencia de los ejércitos de Tierra, Aire y Marina de Guerra, así como a las prisiones. Se mudó posteriormente junto a su familia a una casa al lado del antiguo penal de El Puerto, edificio que no existe en la actualidad.




García Caballero, Agustín “el de la Carne”. En el mismo mercado -en la misma Plaza- a donde Juan Barrero acude hoy a diario, uno de los puntos de venta que tiene abiertos y donde personalmente atiende a su clientela (en la fotografía superior). Ha dedicado y dedica toda su vida laboral al oficio de carnicero/tablajero.
TERTULIA TAURINA LA GARROCHA.
Juan ha sido, hasta hace un año y durante cinco, presidente del Consejo de Administración de Tele Puerto, la televisión local, siendo accionista desde sus comienzos. Se metió en esa aventura «--Por colaborar y ayudar en hacer algo por El Puerto, aventura que nos ha costado a mí y a varios un disgusto económico... ¡con el cariño que se montó esta televisión local!, en la que algunos han querido eludir sus responsabilidades, y otros hemos estado dando la cara más allá de lo que nos correspondía.»
EL UNIFORME.
LA PARTITURA



FORMACIÓN MUSICAL.
Ha colaborado en tres óperas en el Teatro Villamarta, de Jerez. «La Boheme», de Puccini; «El Diluvo de Noé», de Briteen y, recientemente, “Tourandó” también de Puccini, bajo la dirección de Enrique Patrón, de la Orquesta de Málaga y la jerezana “Germán Álvarez Beigbeder”. Fue clarinero (en la foto) durante tres temporadas: entre 2005 y 2007, estrenándose como tal en el Festival Taurino a beneficio de Apadeni en el año 2005, tocando a tres clarines, junto con Jesús Rosso Morro y Juan Antonio Tur. Luego ya continuaría con Tur durante esas tres temporadas.
«--Es difícil tocar el clarín?». «--Si señor y mucho --replica rápidamente Joselete--, a mi me enseñó Arce a tocar y el clarín no es igual que la trompeta». «--Yo le enseñé a tocar --agrega Arce--, pero diga usted que aprendió en seis meses, y ya mi compadre es tan bueno como yo (queda dicho). Además --continúa Arce--, es un trabajo de pulmones, pues es un instrumento tan grande y tan potente sin ninguna llave, rodar sus notas hay que sacárselas del pecho». «--¿Que toque es el más difícil en los toros?». «--El despeje de plaza --responden a dúo--. Es el más difícil, ¿sabe usted --prosigue Joselete--, porque es el más largo, porque tiene muchas notas difíciles, unas altas y otras bajas, y que además, como es el primero..., pues estamos nerviosos --nos dice finalmente Arce--». «--¿Veis bien los toros desde allí arriba en vuestra escalerilla?». «--Los clarineros --nos dice Arce--, casino podemos ver los toros, somos esclavos de nuestra obligación, tenemos que etar pendientes siempre del pañuelo de la presidencia». (En la fotografía, Manuel Arce Beuzón, al toque de clarines).
«En el ocaso del siglo XIX, el vino de Jerez más bebido en casa y tertulias era el tipo “Oloroso” --para los británicos “Golden”-- que se acostumbraba a tomar más como aperitivo sin tapas al mediodía y después de la cena. Era el “Sherry” que se servía en las películas de época cuando alguien pedía un “Jerez” sin otro apelativo. Dicen los más ancianos del lugar que un buen caldo de carne acompañado de unas gotas de “Oloroso” era capaz de resucitar a un muerto. Ni los ingleses habían inventado el “Cream” -que no es otra cosa que el famoso “torito” de nuestra tierra- ni a nadie se le había ocurrido esa cursilería de “consomé al Jerez”. (En la imagen, etiqueta actual de 'Manzanilla Maruja'. Colección J.M.M.)
Cuando el siglo XX comienza su andadura, se inicia el cambio de gusto hacia algo más ligero y capaz de ser ingurgitado en notables cantidades, retando la entrada en estado de catalepsia. Eran los tiempos de los ventorrillos, los tablaos, el buen cante, las fiestas nocturnas que veían la salida del sol al compás de bulerías, fandangos, alegrías ... Es la entrada por la puerta grande del mundo de la juerga de un vino de Sanlúcar de Barrameda con nombre de mujer: la “Manzanilla”. Aun no tenían vigencia por estos alrededores más que dos Ferias, las de Sevilla y Jerez. Su consumo llegó a alcanzar tal notoriedad que incluso vieron la vida las primeras cañas, varillo alargado de gordo cristal, estrecho de boca, que en número de nueve se traían a las mesas, ocupando el cañero que ha llegado hasta nuestros días. (En la ilustración, obra de Muñoz Cebrián, se observa el medallón alegórico al nuevo Vino 'Fino' que lanzaría la Bodega Terry, alternándolo con la -ora 'Manzanilla', ora ''Solera Fina Olorosa, ora 'Fino Maruja'--, inspirando en el personaje de García Lorca, 'el Camborio'.. Colección de F.G.)
Don Fernando A. de Terry y Carrera entra también, como era lógico por su carácter emprendedor, en el terreno de juego e intenta en honor de una de sus hijas el registro de “María” para su “Manzanilla”. El Registro de Marcas y Patentes que en la primera década del siglo dirige el Vizconde de Eza (los títulos nobiliarios empiezan a caciquear) niega su inscripción por estar ya registrada para galletas esa misma palabra: “María”. Se insiste con un sinónimo y he aquí que abre sus vírgenes ojos una moza compuesta y destinada a una larga vida. Se llamó y se llama “Maruja”. (Ilustración: Galleta 'María').
El folleto publicitario señalaba que la música era de “La Chaparrita” y la letra de José Hernández Andino, representante de Terry en Badajoz La solera de “Maruja” --hasta casi 1954-- se rociaba todos los años con una importante partida que se adquiría a Barbadillo, de Sanlúcar. A medidados de los cicuenta pasa de moda la “Manzanilla” y después de un ligero predominio del “Amontillado¡ salta del banquillo de reservas el vino “Fino”. Esto es cosa de los tiempos actuales.» M.G.G.



«El Excmo. Ayuntamiento de El Puerto de Santa María ha venido prestando a la ciudad y a su término municipal el servicio de agua potable, contando para ello con los medios necesarios para el desempeño de tan fundamental función. La forma de prestación ha sido diversa en el tiempo, siendo razones de oportunidad, en cada momento, y siguiendo los cauces legales, las que han aconsejado la adopción del sistema más adecuado. La organización del servicio de abastecimiento de agua por gestión directa con órgano especial, data de 1953, en que se suministraba el agua desde los Pozos Municipales de La Piedad. En 1958 se incorporó El Puerto de Santa María al Plan de abastecimiento conjunto a la Bahía y zonas limítrofes denominado "Abastecimiento a la Zona Gaditana" en el que la captación, depuración y conducción hasta las ciudades es gestionada por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, quedando la distribución a cargo de cada ciudad. Capta el agua en el embalse de Los Hurones, la depura en Cuartillos, la almacena y regula en San Cristóbal y en La Belleza y pasa a la red municipal donde se hace cargo de ella el Servicio. A partir del 4 de Abril del año 1966, por Orden del Ministerio de la Gobernación, quedó municipalizado el Servicio de Abastecimiento de Aguas, prestándose mediante Órgano Especial de Gestión. Posteriormente el Pleno del Excmo. Ayuntamiento, el 27 de Diciembre de 1974, acordó alterar la forma de prestación suprimiendo el Órgano Especial de Gestión y adoptando la modalidad de gestión directa sin órgano especial, autorizado por el citado Ministerio de la Gobernación el 25 de Agosto de 1975. Durante este periodo el Servicio de Aguas ha estado muy escasamente dotado de medios y de personal y como consecuencia de ello estaban en manos de terceros aspectos importantes como la lectura, liquidación y cobro de recibos.
El auge de la Ciudad en los años 80, puesto de manifiesto en un aumento considerable de la población y en la transformación de la ciudad en zona turística de primera magnitud, crea nuevas necesidades que difícilmente tienen solución con la forma de gestión del Servicio Municipalizado de Aguas, precisando el Excmo. Ayuntamiento dar una mayor agilidad a la gestión para afrontar con éxito la nueva situación. Simultáneamente, la Comisaría de Aguas del Guadalquivir se dirigió al Ayuntamiento exigiendo el cumplimiento de un Decreto Ministerial de aquellas fechas que obligaba a los productores de vertidos, incluso los municipios, a depurarlos. A tal fin se redactó un Plan de Saneamiento Integral que preveía la ejecución de colectores y depuradoras en un plazo de diez años. La Comisaría de Aguas, al aprobar este plan, recomendó la creación de algún órgano de gestión independiente del Ayuntamiento que fuera capaz de gestionar estas obras. Con motivo de todo ello, la Comisión Informativa de Aguas acuerda nombrar una Comisión Especial, el 30 de Septiembre de 1981, que pusiera en marcha los estudios precisos para independizar el servicio, mediante la creación de una sociedad anónima, al amparo de lo dispuesto en la Ley de Régimen Local. El Pleno de la Corporación, el 5 de Marzo de 1982, aprobó la conversión del Servicio municipalizado de Aguas en Empresa municipal de índole privada con carácter de sociedad anónima. El 24 de Septiembre de 1983 mediante la firma de Escrituras se constituyó la Empresa Municipal de Aguas, con el nombre de Aguas del Puerto, Empresa Municipal, S.A. en anagrama APEMSA, de conformidad con la Resolución del Ministerio de Administración Territorial de fecha 11 de Mayo de 1983». "La obra de la fuente" de Jesús M. González Beltrán. 1989.
El cartel publicitario de los productos de Alfonso & Antonio Sancho, nos habla del Amontillado SI y la Manzanilla J e, igualmente hacen referencia a las afamadas viñas de su propiedad “El Caribe” y “La Peña”. Otros productos de esta casa eran: el Amontillado Quijote el Amontillado Solera Majestad, y los Finos Caribe y El Abuelo, el Oloroso Único (especial para enfermos) el Tres Cortados Hércules, el Moscatel Fontanal, Jerez Quina Víncitor y el Digestivo Pax. La bodega estaba situada donde hoy se encuentra Bodegas 501. Alfonso Sancho Mateos, fue uno de los precursores del Consejo Regulador de los vinos del Marco de Jerez y ferviente luchador para que los vinos de El Puerto se incluyeran en dicha denominación de origen. Dejamos para otra ocasión, acaso de la mano de su bisnieto por parte de padre, el Prof. Dr. Bernardo Rodríguez Caparrini, una nótula mejor documentada sobre la vida y obra de este porteño insigne.
«Alfonso Sancho Mateos era el hijo primogénito de Antonio Sancho Díez de Alda-Sopranis (1824-1903) y de María Antonia Mateos Valdés (1835-1899), naturales ambos de El Puerto de Santa María. Alfonso fue lo que podríamos llamar “un portuense no nacido en El Puerto”, pues tanto él como su hermana Josefa, tres años menor, nacieron en la cercana ciudad de Jerez de la Frontera, mientras que sus otro nueve hermanos (siete hembras y dos varones) vinieron a el mundo en El Puerto de Santa María». Del libro «Alfonso Sancho Mateos: los primeros años formativos de un bodeguero (1858-1879)» de Bernardo Rodríguez Caparrini. Biblioteca de Temas Portuenses.
1969, aunque se imprimió, nunca salió a la calle. Fue secuestrado por la Delegación Provincial de Información y Turismo cuyo delegado aquel entonces en Cádiz era Rafael Landin Carrasco, a quién dos años mas tarde, la Corporación Municipal, por su colaboración en la campaña de solidaridad con los porteños desfavorecidos “Navidad con Amor”, le concedía la medalla de oro…
movimientos de acción social, sin embargo, con la escalada de la Guerra, en claro contraste a su trayectoria anterior, toma otros derroteros de carácter exclusivamente espiritual, a pesar de que la idea no fuera compartida por muchos sacerdotes rurales y urbanos que convivían día a día en medio de un pueblo con las heridas recién abiertas.
La sección ‘Nosotros el mundo’ era conducida por José Ignacio Buhigas Cabrera. Se trataba de breves comentarios sobre información internacional que grababa de los distintos partes informativos de la radio y posteriormente tecleaba para su publicación. Años más tarde la recuperarían Agustín y Pepe Buhigas para Diario de Cádiz, permaneciendo dos años como sección en las páginas de Diario de Cádiz. Las trágicas muertes de Martín Luther King y Robert Kennedy en abril y junio de 1968 respectivamente, fue el gran referente para crear la sección ‘Nosotros el mundo’. No les daría tiempo, por el cierre prematuro, del medio, de contar la llegada del hombre a la Luna. (En la fotografía, José Ignacio Buhigas Cabrera, en una fotografía perteneciente a la colección de T.S.C.)
Si bien es cierto que la Junta Interparroquial de Acción Católica del postconcilio compuesta por: Domingo Luis Renedo Fernández, José Adame Vázquez, Manuel Buhigas Cala, Rafael Caballero Bonald, José Luis Álvarez Sevilla, Antonio Ojeda, Rafael Tejada, Vicente Terrada, Manuel Lagares y Antonio del Cuvillo Jiménez, que figuraba como Director de la publicación por ser Presidente de Acción Católica, favoreció que un grupo de colaboradores formado por personas de distintas edades y de las más diversas condiciones sociales como estudiantes, trabajadores, profesionales y jubilados, capitaneados por el cariño y la entrega de un hombre como Agustín Merello, hicieron posible que una Hoja Parroquial se convirtiera en un medio de comunicación social. El cierre de Cruzados supuso para todos un duro golpe y de manera especial para Jesús María Serrano, que desde niño se impregnó del olor de la tinta y de los ajetreos de la imprenta pero cuya corta edad impidió ver sus versos y poemas en las páginas de Cruzados. (En la fotografía, Agustín Merello del Cuvillo, imagen perteneciente a la colección de Kitty Pastor).
‘Fintas callejeras’ sección de Agustín Merello y que colaborara también en su confección José González Montaño. Una de las secciones más temidas por los cargos públicos y religiosos de aquella época. Comentario con cierta acidez sobre las injusticias sociales y olvidos de los munícipes del Ayuntamiento. Se daban prisa en solucionar desde la Corporación Municipal los desaguisados, como por ejemplo las Fintas Callejeras del último número: ‘Más que nuestra veterania, más que nuestra estadística, quisiéramos conmemorar nuestra eficacia’ ‘Y ahí le duele; o no conseguimos hacernos oír, o nuestra voz es tímida o… tal vez abunden mucho los sordos’ ‘Algunos, hasta pensarán que estamos de luto; pero no lo crean: las apariencias engañan.’ Esta última Finta Callejera, sin pretenderlo Agustín, fue una premonición de lo que iba a suceder una semana después.
El autor de esta nótula, Antonio Carbonell, recibió en su domicilio la visita de la ‘autoridad competente’ que por aquel entonces desde las altas esferas, locales y provinciales recibieron las oportunas consignas debido a que varios artículos, entre ellos, ‘Fintas callejeras’ ‘La Propiedad’
Pero sobre todo gratitud, sin ningún género de duda, de la misma manera que lo hubiera hecho Agustín Merello, a IGDAG, la imprenta donde se editaba Cruzados, de Domingo Luis Renedo Fernández, a quien en mas de una ocasión le costó el dinero que Cruzados saliera a la calle. Y como no, a José Fernández, Eduardo Maza Carmona, Vicente Utrera Caro, Antonio Albaiceta Revuelta José Cabrera, Antonio Pérez, Antonio Rodríguez López y los Gravan, padre e hijo, cajistas, maquinistas y personal de IGDAG que hicieron también posible ‘Treinta años y nuestro número tres mil’.
Además de los colaboradores, articulistas y reporteros, Cruzados contaba con una reducida cartera de clientes que se anunciaban en aquella década de los años sesenta. Se superaban en los suplementos dedicados a la Patrona que gracias a ellos se financiaban. ‘Muebles metálicos García Aspera’, ‘Fernández Prada-Seguros Generales’, ‘Frutería Casa Lolete’, ‘Cuvillo, Fino C, Oloroso Sangre y Trabajadero’, Salvatierra Radio’, ‘Osborne’, ‘Asesoria General de Empresas Jiménez’ ‘Transportes Viuda de Requejo’… Antonio Carbonell Lopez.
El pasado jueves, cerca del mediodía, tuve ocasión de presenciar como, un muchacho en trance de ahogarse en el Canal, era salvado por la rápida y eficaz intervención de unos barqueros. El hecho no es nuevo. Diríamos que es algo que se repite con frecuencia todos los veranos. Diríase también que la cosa carece de importancia, que cualquiera es capaz de auxiliar a un semejante que esté en peligro. Tal vez. Pero el caso es que, providencialmente, los barqueros ‘estaban allí’, como están en otras muchas ocasiones. Y es que por ‘estar allí’ una persona salvó su vida. Sin pensamos un poco, la cosa nos parecerá mas importante de lo que habitualmente nos creemos. Invito a los lectores a que lo hagan. (30 de julio de 1965). 
Otro embajador porteño en Madrid. Pepe Jiménez Vázquez, “Bigote”, nació en pleno verano canicular, probablemente en la calle Durango en El Puerto el 3 de agosto de 1922. Su padre se llamaba Cristóbal y su madre Catalina, siendo el menor de cuatro hermanos: Alfonso 'el Nino', guardacampo, que era un cuerpo de vigilancia de los campos que estuvieron en activo en nuestra Ciudad, al menos hasta el final de la década de los sesenta del siglo pasado; Ana, que casó con un Sancho, estableciéndose en Sevilla tras el casorio; y Cristóbal, que murió durante la Guerra Incivil en Madrid -a Bigote le cogería con 14 años-, adonde marchó con un Zamacola.

Ramón Vélez que vive en la actualidad en la calle Molinete y tiene 82 años, cuenta que Bigote acompañaba al Beni y a él en las noches madrileñas ya que Pepe Bigote llevaba bastante bien el compás, incluso a veces se permitía dar sus pasitos de bailes y cantar. Eso le hizo estar durante un tiempo con el cantaor flamenco Rafael Farina.Refiere Ramón que «una noche los tres, Beni, Bigote y yo mismo, fuimos contratados para que actuaran para Ava Gardner. A la actriz, famosa por aquella época en las noches madrileñas ,desde un principio no le cayó nada bien a Bigote y llegó a decir que Bigote era un chico muy feo. A raíz del ‘incidente’ Bigote tuvo que abandonar la fiesta no sin antes tomarse un respiro y dar buena cuenta, a su manera, de la Diva… Al terminar la noche, Beni y nos dirigíamos a la pensión donde se encontraba Pepe y quisimos, como buenos amigos, compartir el dinero que habíamos recibido de la actriz norteamericana: unas quinientas pesetas de la época. En ese momento Bigote puso otras quinientas encima y quedamos los dos extrañados. Claro, después el cachondeo fue mayúsculo cuando Bigote nos dijo, que se había tomado el atrevimiento de coger del bolso de la actriz la cantidad que el consideraba que podía saldar la ofensa que le había hecho la actriz americana.» Ramón refiere que en una época de su vida ya estando Bigote ‘mejor situado” necesito de su colaboración pues un mal asunto le había llevado a una situación nada deseable y que le había dejado sin trabajo durante tres meses. Bigote, no solo le presto lo que necesitaba, sino que además le ofreció la cama de la pensión donde dormía.
Es a partir de 1963 cuando Bigote conoce a Lucio que lo convierte en relaciones Públicas del más afamado restaurante de Madrid, Casa Lucio en la Cava Baja Madrileña. Allí con su universidad labrada en la calle, talento innato descubre una nueva vida a la que jamás pudo haber soñado, Ministros, artistas, futbolistas, entrenadores, personalidades de cualquier rango y condición trataba con exquisita educación comentando que lo mejor de España era El Puerto. Años mas tarde, otro restaurador, Esteban que había sido compañero de Lucio, abre a escasos metros de Casa Lucio un restaurante, Casa Esteban, también afamado por los madrileños y Bigote comparte sus relaciones publicas en ambos lugares. (En la fotografía, Lucio Blázquez, de Restaurante Casa Lucio).
Por otra parte cuando el sector pesquero porteño estaba en todo su apogeo, era Bigote quien atendía en Madrid a los exportadores y vendedores, caso de José Agarrado, Juan Crespo y un largo etcétera. Aquí cabe destacar a Pepe Romerijo pues la amistad con Pepe Bigote es la que posibilita en Madrid la presencia de Romerijo en numerosísimas ocasiones tanto en Casa Esteban como en Casa Lucio, al igual que le ocurrió a ‘El Cochino’. (En la fotografía, Esteban López Mariscal, del madrileño Restaurante Casa Esteban).
Manuel Gutiérrez Morillo, Manolito ‘El Cochino’ era el administrador de nuestro protagonista. Resulta que Bigote llegado a El Puerto, entregaba una importante cantidad de dinero a ‘El Cochino’ para que hiciera de Banco ya que se fiaba poco de los banqueros y así de esa manera además de ser su estancia más agradable siempre tenía a la mano la ayuda indispensable de su gran amigo y banquero particular Manolito ‘El Cochino’. Tuvo una excelente vinculación con el Racing de aquellos años, con jugadores, directivos y entrenadores. (En la fotografía de la izquierda, Manolito 'el Cochino').




Un día, del verano de 1979, estábamos sentados en la terraza de Romerijo, cuando apareció de repente Antonio Arribas; conocido por ser uno de los “choris” más famoso de Marbella. Antonio y Pepe se fundieron en un abrazo. Y Arribas fue al grano: “Pepe, necesito medio millón de pesetas ya mismo”. Y Bigote se fue derecho a Pepe Romero, dueño del establecimiento... Media hora más tarde Arribas nos decía adiós con mucha prisa. Romero, que había adelantado la pasta, tenía sus dudas. Y Bigote le decía: Antonio Arribas no sólo volverá con el dinero en la fecha prevista sino que, además, repartirá ganancias. Y así fue. Hombres así, con ese don, son necesarios en muchos sitios. Al menos para evitar que siga habiendo timadores de cuello duro, y traidores por sistema.» (En la fotografía Pepe Romero, quien auxilió a Antonio Arribas, el cual formó parte con Luis Ortiz, ex marido de Gunilla von Bismark, Rogelio Llagostera y Jorge Morán, el grupo Los Choris, animador de las fiestas de la jet marbellí.) Manolo de la Torre.
