
| Texto: José María Morillo.
Jesulín de Ubrique tenía 21 años cuando, aquel 20 de octubre de 1995 –se cumplen mañana 30 años-- vio cómo la plaza de toros de El Puerto de Santa María se convertía en un hervidero de mujeres. Más de 14.000 abarrotaron los tendidos para la segunda de las tres corridas que el torero organizó bajo el lema Va por ellas, un espectáculo taurino pensado para rendir homenaje a su público femenino. La escena, con bragas agitadas como banderas, o arrojadas durante el paseíllo del torero y un ambiente cercano a una gigantesca despedida de soltera, quedó grabada en la memoria colectiva de los años noventa.