
Juan Mayo Escudero es un portuense perteneciente al cupo abierto de los nacidos en Badajoz, ciudad en la que estudia Magisterio. Ejerce como maestro durante cuatro años en aquella provincia, en el municipio de Lobón. En 1982 es destinado primero a la localidad de Rota y luego a El Puerto de Santa María, donde he profesará como maestro de Educación Primaria y director en el Colegio Público Menesteo durante 20 años hasta
que, en el año 2005 es destinado como logopeda al prestigioso Instituto Español "Giner de los Ríos" de la capital lusitana: Lisboa, donde tiene previsto permanecer hasta el 2011, impartiendo clases de Enseñanza Primaria. ¿Regresará Juan a El Puerto? (En las fotografías, Juan Mayo en la actualidad y en 1997, hace once años).
Juan Mayo Escudero is a portuense who belongs to the ever increasing flock of those born in Badajoz, where he studied to be a teacher. He taught for four years in that province, in the Lobón area. In 1982 he was posted to Rota and then to El Puerto de Santa María, where he worked as a Primary School teacher and Head at the Menesteo State School for 20 years until, in 2005, he was posted as a speech therapist to the prestigious Spanish Institute "Giner de los Ríos" in the Portuguese capital Lisbon. He is planning on staying until 2011, teaching Primary School children. Will Juan ever return to El Puerto?
El profesor Mayo es un gran amante de las nuevas tecnologías, algo que supo inculcar en el ambiente familiar. En la actualidad su hijo Carlos es el responsable técnico de la edición en internet de los periódicos La Voz de Cádiz, de Cádiz y Jerez. Es, igualmente, una autoridad internacional por sus conocimientos e investigaciones sobre la Orden de la Cartuja. Prueba de ello es que ha publicado, en los últimos quince años, doce libros sobre esta interesante orden de clausura y es invitado a impartir charlas y conferencias en encuentros nacionales e internacionales: España, Italia, Austria, Bélgica, Inglaterra, Argentina, Suiza, Alemania, Francia, Portugal, Chequia, sobre esta forma de entender y vivir la religión católica. (En la fotografía, en una ponencia en el Congreso Internacional Cartujano Evora-2004, celebrado en Portugal, sobre la única Cartuja actualmente abierta en este país: la Cartuxa Scala Coeli, en Évora, a unos 100 kms. de Lisboa en dirección a Badajoz). (En la foto, con barbas, hace 25 años).
¿POR QUE LA VIDA DE CONTEMPLACIÓN?
¿POR QUE LOS CARTUJOS?
«En 1993, de viaje turístico por Burgos, visité la centenaria Cartuja de Miraflores, en la que compré "Diálogo en Miraflores", libro de lectura rápida en el que, en forma de diálogo y muy sencillamente, se explica toda la vida, ideal, mitos -verdaderos unos, falsos otros- de la Orden de la Cartuja.» Esa lectura, empapada en apenas unas dos horas, le despertó aún más la curiosidad por conocer cómo era la vida de monacato, contemplativa. ¿Como era la vida de los monjes cartujos? La respuesta la tenía al alcance de la mano pues, cerca de su casa, en El Puerto de Santa María, estaba la Cartuja de la Defensión, en la vecina Jerez de la Frontera. «Me acerqué a estos monjes cartujos -la verdad que con ciertos reparos de si iban a abrir las puertas a mi curiosidad- y tan bien acogido fuí que aquí llevo, desde 1994, trabajando entre manuscritos y libros antiguos de su biblioteca, investigando y dando a conocer a todo curioso de la Cartuja distintos trabajos, tanto en publicaciones de libros como en trabajos presentados en distintos congresos internacionales cartujanos y en conferencias en distintos foros».
Casi podríamos decir que Juan es un cartujo externo, una especie de promotor de la Orden, tal es su grado de conocimiento y sus trabajos de divulgación. Por ejemplo, esta crítica a la película “El Gran Silencio”, en la que actúa como comentarista en Radio Murcia. Juzguen ustedes. (En la fotografía en B/N, un monje paseando delante de la Cartuja de la Defensión de Jerez, imagen inédita pues los cartujos se fueron del recinto y su lugar lo ocupan ahora las Hermanas de Belén. En la foto a color, el cartel de la película 'El Gran Silencio' -trailer-).
LIBROS DEL PROF. MAYO
SOBRE TEMÁTICA CARTUJANA.
- La Vida del Padre Ramos de la Peña. Cartujo de Jerez. 1998.
- Santos y Beatos de la Cartuja. 2000.
- Protocolo primitivo y de fundación de la Cartuja de Jerez. 2002.
- Expansión y organización de la Orden Cartujana. 2002.
- Libro Becerro de la Cartuja de las Cuevas, Facsímil inédito (2 tomos). 2003.
- El aislamiento de la provincia lusitana. 2003.
- Los Sagrarios Cartujanos Españoles (con Hortensia Deniz Yuste). 2003.
- Extremeños y Portugueses vinculados con la Orden de la Cartuja. 2004.
- Iconografía de San Bruno. (Español, Portugués y Francés). 2006.
- A Cartuxa de Lisboa, legado de ContemplaÇÃo. (Portugués). 2007.
- Transcripción, estudio y Facsímil del Manuscrito 18259 de la BNM. 2007.
- La Congregación Nacional de las Cartujas de España. 2008.
OTRAS PUBLICACIONES DEL PROF. MAYO
SOBRE LA ORDEN CARTUJANA.
- La Llave Cartujana. Ponencia. 2000. (*)
- Mapa Cartujano de 1785. Ponencia. 2001.
- Mapa Histórico sobre la Orden Cartujana y Expansión. Multimedia. 2002.
- Historia y Vida comentada de la Cartuja de Jerez. Multimedia. 2002.
- Cartujas Portuguesas. CD Multimedia. 2002.
- Mapa de la Expansión de la Orden de la Cartuja. 2003.
- A Orden Cartuxa en Portugal. de José Pinharanda Gmes. Maquetación y Fotos. 2004.
- Vida y Obra del Monje Cartujo Portugus Pintor Frei Miguel Guedes de Sousa. CD Multimedia. 2004.
(*) La Llave Cartujana, también llamada la Passe Partout, sistema muy simple de llave y cerradura que da acceso, desde centenares de años, a todas las dependencias de un monasterio cartujano, una especie de llave maestra muy original. Pero no sólo de un monasterio cartujano sino que esa llave abre, con ciertas diferencias o modificaciones, todos los monasterios de la Orden Cartujana. Esta ponencia -tema único jamás estudiado ni por los Cartujos ni por estudioso alguno- fue presentada por Juan Mayo en el año 2000, en la Cartuja de Aggsbach (centro-norte de Austria) (Ilustración: Escudo de la Cartuja).
ENTREVISTA.
¿Vd. descubrió a El Puerto o El Puerto le descubrió a Vd.? --Busqué la costa y encontré El Puerto. Me conquistó su ubicación y su aspecto de Ciudad y lo temporal ha devenido en los años viviendo allí.
¿Por qué escogió la enseñanza: vocación o casualidad? --Mi ilusión era estudiar Medicina, cambié de opción, no se muy bien por qué, y el gusto por el magisterio me ha venido con el paso del tiempo.
En los Congresos Internacionales sobre los Monjes Cartujos, Vd pasa por unos de los mayores expertos a nivel nacional… --Quizás los trabajos que he presentado llamen la atención por su atractivo o curiosidad. En Austria mi ponencia versó sobre la llave “Pass par Tou”, que significa paso para todo, o pasaporte. Es la típica llave cartujana que abre todas las puertas no solo de una Cartuja sino de todas las del mundo, con ligeras variaciones. Monjes de EEUU o Suiza, me indicaron que desconocían ese dato.
Profesor Mayo, ¿Por qué los Cartujos? --Siempre me ha llamado la atención la vida de clausura. Su hermetismo. Y quieres averiguar, observar, lo que esconden. Luego el conocimiento de los hechos te demuestra que la realidad es mucho más sencilla de lo que aparenta. Lo oculto tiene más éxito que lo que está a la vista.
Tiene editados 12 libros y varios discos compactos multimedia, siendo uno de los ponentes que más tiene publicado en los congresos internacionales a los que ha asistido ¿Cuál es ahora su preocupación cartujana desde que los monjes se fueron de la Cartuja de Santa María de la Defensión de Jerez? --Trabajo ahora con los Cartujos de Portugal, colaborando en la digitalización e informatización de sus fuentes documentales de toda la Orden Cartuja en el país fronterizo. En la Cartuja de Evora me retiro una media de 10 días al año. Curiosamente, los tres cargos más relevantes: Prior, Procurador y Vicario, son españolas; de Carmona, Córdoba y Puerto Real.
Dígame, ¿de que se habla en esos congresos? --Mire, de todo, no sólo de algo de espiritualidad, sino principalmente de historia y curiosidades de la Orden.
Bueno, mójese, y hábleme sobre El Puerto, su ciudad de adopción. --No me gusta su ambiente político. Siempre enfrentándose unos con otros. Ha habido épocas en las que abría el Diario pensando en que improperios me iba a encontrar ese día, lanzado por unos políticos contra otros. Por otro lado he de decir que aquí, nunca me he sentido extraño como en otras poblaciones cercanas. El Puerto es una ciudad acogedora e integradora.
El futuro local… ¿Cómo lo pinta, profesor? --La gente joven buscará trabajo fuera de aquí si continúan sin instalarse más empresas importantes en la zona, aunque no se quieran ir El Puerto, que es como una privilegiada Ciudad de Vacaciones.
¿Cómo cree que lo ve la gente? --Un alumno me dibujó sentado al ordenador, mordiéndome las uñas, con un pitillo en la boca cuando fumaba y muy alto (mide 1.90). Hay quien me ve como una persona seria, malage, ciezo. Pero cuando me conocen me han descrito como un cordero con piel de lobo. Eso si, quienes me conocen saben que detesto los enrevesamientos de personalidad y que intenten darme las vueltas.
¿Hubiera profesado la Orden de Cartujo? --Si hubiera sido religioso, que no lo soy, quizás me hubiera metido a Cartujo, empero soy una persona muy activa y conversadora. Aunque nunca digas “de esta agua no he de beber, ni esta p**** no me cabe”. (En una foto reciente, en la Embajada de España en Lisboa -a la derecha- junto con el presidente de la Junta de Extremadura, Sr. Vara).

Francisco Galán Rodríguez, “Patesca”, nace en El Puerto en 1880. En ese año Alfonso XII decreta la abolición de la esclavitud en Cuba; en Panamá comienza la construcción del famoso Canal y, mientras se aprueba en Madrid el Reglamento de las corridas de toros, en El Puerto se inaugura el coso taurino. Menendez y Pelayo publica la “Historia de los Heterodoxos Españoles”. Un heterodoxo sería a lo largo de su centenaria vida nuestro Patesca, nacido en una Casa Palacio venida a menos, la de Aranibar, esquina frontera con el Castillo de San Marcos. Hijo de Antonio Galán natural de Cádiz, Marino Mercante, y de Josefa igualmente nacida en Cádiz. Desde muy joven se traslada a Sanlúcar de Barrameda --andando-- para ver a su novia. Allí se casa con Josefa Espinosa, y es allí donde comienzan a llamarle “Patesca” apodo heredado de su padre. (Fotografía: Patesca con su esposa, Josefa Espinosa, en 1946. Nótense la cantidad de anillos de oro que luce en sus manos. Colección Antonio Leveque).





La leyenda de la placa dice así: «La Comisión del Apostolado del Mar a Don Francisco Galán Rodríguez, marinero jubilado, en su centenario y como público testimonio de afecto y agasajo por su dilatada vida y méritos laborales. Puerto de Santa María, 8 de diciembre de 1983». De la celebración de este acto se cumplen mañana lunes veinticinco años. Murió en 1986, a los 106 años, en posesión de sus plenas facultades mentales.


Organizó, pintó los carteles, realizó los folletos, de las cuatro “Fiestas del Cante de los Puertos” en los años 1971-1974. (Esos carteles se pueden encontrar hoy en subastar por Internet, así como otros dibujos de flamencos realizados por Suárez). Ha sido productor de numerosas grabaciones discográficas, salvando del olvido muchos materiales sonoros que se tenían por perdidos. En 1973 realizó, para el Arquitecto Miguel Oriol, siete gruesos volúmenes que contenían todas las invariantes arquitectónicas de El Puerto, desde pavimentos, husillos, guardacantones, escaleras, patios, portadas, rejas, bluendes, rótulos, soportales, fresqueras,... etc. muchos hoy perdidos. Fue el organizador del traslado de los restos mortales del Capitán General Don Francisco Javier Uriarte y Borja desde El Puerto al Panteón de Marinos Ilustres. (Foto de la izquierda: original de Claude Alexandre. París. 1997. Colección J.M.M.)

Memorias de don José Bernal, ambos publicados por la Concejalía de Cultura. Hizo una edición de las memorias de Federico Rubio. (En la fotografía a color superior, Luis Suárez ofreciendo una ponencia sobre el Romancero de Tradición Oral, en el Aniversario del Quijote, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Fue presentado por Luis Alberto de Cuenca, Director General de Bellas Artes y por Jon Juaristi, catedrático de la Universidad de Alcalá de Henares, Director de la Biblioteca Nacional y del Instituto Cervantes. Año 2005. Entre el auditorio, en la primera fila, se encontraban las porteñas Merche Macaria y Choni Lassaleta. Foto: Andrés de Gabriel). La ilustración, dibujo a carboncillo de Diego del Gastor, realizado por Suárez en 1973.
depósitos del Museo, sin poderse exponer por falta de espacio; consiguió la donación al Museo de los materiales arqueológicos y ánforas de Don Francisco Ciria y de otros particulares que tenían alguna colección antigua; ha diseñado los uniformes de los clarineros municipales y de los alguacilillos de la Plaza de Toros, y tres reposteros—sin realizar todavía-- además de diplomas y cuanto ha sido requerido por el Ayuntamiento; redactó el proyecto de Reglamento de Protocolo, honores y distinciones del Ayuntamiento. (En la fotografía con D. Diego Catalán Menéndez-Pidal, paseando por el Olivar de Chamartin, la finca de Don Ramón Menéndez Pidal, donde está su casa, sus archivos y su biblioteca, un verdadero oasis en medio de Madrid.) La ilustración es de otro portuense, Carlos García Gil, caricaturista en prensa escrita y teatro., socio fundador que fue de la Academia de Bellas Artes 'Santa Cecilia'. Está realizada en Madrid en 1960.
Recibió el Premio Provincial a la Cultura. Ha sido miembro asesor del Servicio de Publicaciones de la Diputación Provincial y del la Fundación Andaluza de Flamenco. Ha recibido varios premios literarios y artísticos. Se le impusieron la Cruz al Mérito Naval, la Medalla de Plata del Ilustre Colegio de Abogados de Cádiz, la Coquina de Oro de El Puerto de Santa María (1972)... Tiene publicados trabajos en infinidad de libros y revistas; es colaborador fijo del Diario de Cádiz y del Diario de Jerez... Conoce la historia, el casco y el término de El Puerto palmo a palmo. Es un prestigioso abogado con bufete abierto en la calle donde nació y vive: San Juan, 17. (Ilustración: Autorretrato de Luis Suárez, joven).
Tal y como resaltó el alcalde en su intervención: «Luis Suárez es poseedor de un amplio currículo investigador y autor de un buen número de publicaciones sobre aspectos del patrimonio etnográfico portuense. También, es propietario de una interesantísima biblioteca y una colección particular de carácter documental, fundamentalmente gráfica que, justo es decirlo, lo de particular nunca lo ha sido del todo, pues ha estado siempre a disposición de estudiosos e investigadores y también a disposición del Centro Municipal de Patrimonio Histórico cuando se le ha requerido» La respuesta de Luis Suárez, se puede leer en los comentarios de este mismo artículo.















La apertura del bar está fechada en 1908. Por entonces se le conocía con el nombre de “Los 48”, el mismo que una manzanilla de Sanlúcar. Por entonces varios bares de la ciudad tenían este tipo de nombre, coincidiendo con el de un vino. Luego, parece que en la década de los 30, el bar pasó a llamarse “La Solera”, su nombre actual, y pasó a formar parte de las instalaciones del Hostal Loreto, situado también en la calle Ganado, junto a La Solera (Calle Ganado n. 17. Teléfono: 956543562). El bar se convirtió en la cafetería del hostal y se abrió una puerta interior que los comunicaba. Por allí pasaron los toreros que intervenían en la plaza de Toros de El Puerto ya que estos solían pernoctar en el Hostal Loreto y luego salir en coche de caballos, con gran expectación, hasta la plaza.
Comenzó en la hostelería en 1960. Tenía 16 años y se colocó en el hotel Fuentebravía de El Puerto, en la cocina. Fue aprendiendo el oficio, le gustó y a los pocos años abrió un chiringuito en la playa de La Costilla en Rota donde triunfó con el marisco que traía de El Puerto de Santa María. Y a partir de ahí el éxito. Se marcha de la ciudad y comienza a montar negocios de hostelería que le llevarían a la élite y a llegar a tener a su cargo en toda España a más de 1.200 personas en negocios relacionados con el ocio y que incluían desde restaurantes, servicios de caterings, hoteles y hasta bingos.
Es un gran conocedor de los vinos. En su establecimiento están por todas partes. Encima del mostrador, en unas pequeñas estanterías que dificilmente caben en el local y en un armario climatizado donde guarda lo mejor. Se muestra partidario de no cobrar grandes cantidades por los vinos “porque los vinos no sólo deben maridar con la comida sino también estar acordes con esta economicamente. No se le puede cobrar a alguien una cantidad por la comida y más del triple por los vinos.”
José Luis no cierra ni el 24 por la noche ni el 31. Porque me gusta estar con mis clientes esos días “y porque muchas personas buscan un lugar donde comer en esas ocasiones y no lo encuentran. Los clientes se repiten cada año”. Reconoce que por lo singular de su establecimiento la relación con los clientes es muy especial: “Tienen que tener paciencia porque estoy sólo para todo, pero eso se suple con un poco de conversación. Tengo gente que viene desde fuera a comer el cocido o a probar los arroces y me enorgullece mucho que repitan”.


ESCRIBE DON PEPPONE


EL FLAMENCO.








partido que dispute el Racing. Concretamente fue en la Plaza del Polvorista, donde se desarrollaron los primeros encuentros, en un terreno improvisado para la ocasión al que acudían todas las fuerzas vivas de la ciudad y un sin fin de personas que durante la década se aficionaron y llenaban el recinto. El funcionario municipal, escritor y periodista Mariano López Muñoz fue el fundador del club y Genaro González Noval, su primer presidente [...] La equipación se estrenará en el segundo encuentro del que tenemos referencia y que se produce el 4 de marzo de 1928 en la Plaza del Polvorista, un “match” entre el Racing Football Club y el Español F.C. de Jerez de la Frontera, según la prensa local. El partido finalizó con un empate a un gol. El equipo portuense alineó a M. Conejo, M. Sevillano, F. Martínez, Mayo, A. Silóniz, el goleador portuense del encuentro, Puente, Campos, González, J. Grant, F. Sevillano y A. Arias. Fue Silóniz el autor del gol racinguista y la equipación que portaba el conjunto de El Puerto fue donada por un convecino de la ciudad, Sr. Don Elías Ahuja y Andría, que también contribuiría en el fútbol gaditano. Este insigne portuense es hijo adoptivo de la ciudad desde 1928. Filántropo, político, comerciante y académico, muy activo y partícipe en la sociedad de El Puerto en aquellos tiempos.» Diego Patrón Aguilera, de su trabajo de investigación: «1928... El Fútbol portuense de estreno. El balompié en El Puerto en los años veinte».
