El Puerto es una ciudad muy relacionada de forma directa con Cristóbal Colón y con América. Cuenta fray Bartolomé de las Casas que “un marinero tuerto” le dió información a Colón “estando en El Puerto de Santa María” sobre “aquella tierra a la cual no pudieron llegar los terribles vientos”. También lo menciona su hijo Hernando Colón en su Historia del Almirante. Lo cierto es que el navegante pasó dos temporadas, al menos, en El Puerto: una entre los años 1484 y 1486 ó 1490 y 1491 (según diferentes investigadores), en la que preparaba el viaje del descubrimiento, y otra en 1493, organizando el segundo viaje al continente americano.
Esta ruta trata de descubrir y mostrar (en lo posible) El Puerto que vivió Colón: una villa marina y marinera, poblada de gentes de la mar (carpinteros de ribera, calafates, estibadores, marinos, marineros, cartógrafos, comerciantes, armadores, rederos, cordoneros, pescadores,...) y de edificaciones marítimas (muelles, varaderos, almacenes, hospital de San Telmo, Cruz de los Calafates, aduana, ermitas de Guía y de Santa Catalina, ...) en la que el río Guadalete, eje de su asentamiento y actividad, tuvo una destacada función.
La tradición marinera con que contaba El Puerto de Santa María propició la presencia de Colón en la ciudad para la gestión de su proyecto. En el descubrimiento americano esta ciudad participó con la carabela La Niña, armada en astilleros portuenses, y con la nao Santa María, cuyo piloto, Juan de la Cosa, (en la ilustración de la izquierda) acompañó a Colón en los dos primeros viajes y es autor del mapamundi que fuè realizado en El Puerto en el año 1500.
Desde El Puerto partieron otras expediciones que realizaron importantes descubrimientos geográficos: la de Alfonso Ojeda (1499-1500), en la que participaron Juan de La Cosa y Américo Vespucio, y la de Rodrigo de Bastidas (1504), donde iba de nuevo Juan de la Cosa y Vasco Núñez de Balboa.

Primer Mapa Mundi. Juan de la Cosa. Año 1500. El Puerto de Santa María.
Ver más información en nótula núm. 584 de GdP.
Como consecuencia de la conquista y colonización americana El Puerto de Santa María participó del comercio a gran escala con América, lo que movió la economía de la ciudad durante toda la Edad Moderna. América significó desde entonces un nuevo rumbo para la ciudad de El Puerto y toda la bahía de Càdiz. Como resultado de esta relación, El Puerto cuenta con un notable patrimonio cultural, en el que destaca un tipo de edificación
característico: las casa-palacios de cargadores a Indias, construidas en los siglos XVII y XVIII. También se realizaron y donaron obras de arte de carácter religioso. La relación con el continente americano se siguó manteniendo posteriormente y continua en la actualidad.
ITINERARIO
1. San Blas, San Telmo y Espíritu Santo
De izquierda a derecha, observamos los tres edificios. La ermita de San Blas es el más antiguo. A partir de ella fueron levantados el hospital de San Telmo, dedicado a gentes del mar, y el convento del Espíritu Santo. Éste fué iniciado en el siglo XV, ampliado en el siglo XVIII y remodelado en 1851.
2. Ribera del Guadalete
Desde los restos del estribo del puente del siglo XVIII puede observarse el Guadalete, que en el siglo XV corría sin canalizar. Ésta era zona de varaderos, careneros, embarcaderos y atarazanas.
A nuestra izquierda observamos el Monasterio de la Victoria comenzado en 1504 en las cercanías de la ermita de San Roque, existente en el siglo XV. En la Sierra de San Cristóbal estaba la ermita de Sidueña.
En la otra orilla o “la otra banda del río”, zona de esteros y marismas, continúan como entonces, las importantes salinas de El Puerto.
3. Soportales de la Ribera
A espaldas del mirador seguimos la línea de soportales, que en El Puerto son más conocidos como “los portales”. Servían de abrigo para la realización de diferentes actividades. En este lugar se encontraba en el siglo XV la “cruz de calafates”, aproximadamente en la embocadura de la calle Caldevilla. Muy cerca de esta cruz estaba la ermita de la Consolación.
4. Ribera del Río
El nombre de esta calle es muy significativo. También lo es el de la calle Puerto Escondido, que hace referencia a un antiguo embarcadero.
Debido a los muchos meandros que tenía el curso del Guadalete, la zona ribereña pudo estar más retrasada en el siglo XV en algunos tramos.
5. Continuación de la Fachada al río
Pasamos la plaza de la Herrería, abierta al Guadalete, y seguimos por la C/ Jesús de los Milagros, a cuya derecha, entre ella y la C/ Misericordia, continuaba la fachada fluvial de la ciudad. La fisonomía de toda la ribera cambió a mucho a partir del siglo XVI.
Obsérvese cómo a partir de su cruce con la C/ Palacios, el terreno se eleva suavemente.
6. Castillo San Marcos
En la segunda mitad del siglo XV pertenecía ya a los Duques de Medinaceli y era sede del cabildo de la villa. Es resultado de la transformación de la mezquita del siglo X en la iglesia-fortaleza cristiana, en la segunda mitad del siglo XIII.
Fue uno de los principales santuarios peninsulares, dada la fama milagrosa de su titular, a la que Alfonso X El Sabio le dedicó veinticuatro de sus Cantigas: un corpus conocido como el cancionero de Santa María do Porto.
7. Plaza de Juan de la Cosa
La plaza de Juan de la Cosa ocupa lo que fue el antiguo pósito o alhóndiga de la ciudad, cuya fachada, del siglo XVIII, ha quedado desplazada al fondo.
Una reproducción cerámica de la carta naútica y un busto del cartógrafo recuerdan la figura del piloto de la nao Santa María y autor del primer mapamundi, cuya leyenda dice: “Juan de la Cosa la fizo en El Puerto de Santa María anno de 1500”.
8. Bajada del Castillo.
En nuestro recorrido hemos ido subiendo sobre le nivel de la ribera hasta el pequeño promontorio sobre le que se levantó el santuario-fortaleza, hoy Castillo de San Marcos.
Ahora continuamos por la bajada del Castillo, que en el siglo XV, era zona de embarcadero y diversas actividades relacionadas con el río y el mar.
9. Plaza de Colón
Constituía también zona ribereña en la época de Cristóbal Colón. El actual azulejo es una reproducción del que fué instalado en 1938, año de la remodelación del lugar.
En lo alto estaba construido en el siglo XV un mesón conocido como Posada del Toro, que pertenecía a la familia de los Valera.
10. Antigua Aduana Ducal
Edificio de la antigua Aduana Ducal del siglo XV.
Los dos escudos de la fachada corresponden a la familia de la Cerda, duques de Medinaceli. El actual es una ampliación del primitivo edificio del siglo XV.
11. Calle Palacios
Es una de las principales arterias de la ciudad. Debe su nombre actual a que estaba limitada por la antigua aduana, que probablemente, en algún momento, al igual que el castillo, fue residencia ducal, y el nuevo palacio que levantaron los duques siglos más tarde frente a la Iglesia Mayor Prioral, que, desde aquí, vemos al fondo.
12. Iglesia Mayor Prioral
En los últimos años del siglo XV esta iglesia estaba aún en construcción.
Una de las principales capillas que se abrieron en el interior del templo, la primera al lado del Evangelio, dedicada a la virgen del Rosario; fue de la familia Valera, a la que pertenecían los alcaides Diego y Charles de Valera, miembros distinguidos del gobierno, que jugaron un papel directamente relacionado con la empresa de las Indias.
13. La Placillla
Este lugar sigue siendo la zona de mercado de la ciudad, como ya lo era en el siglo XV. Las antiguas carnicerías estaban donde se encuentra el popular Bar Vicente. Sus sucias aguas, cargadas de desojos, iban a parar al río a través del caño de la villa, que corría bajo la calle Ganado.
Nuestra ruta continúa por la calle Ricardo Alcón o calle del Muro, por donde discurría la antigua muralla de la ciudad.
14. Carta sobre Colón y mapamundi de Juan de la Cosa
En el Centro Cultural Municipal Alfonso X El Sabio podemos ver reproducciones de dos documentos claves sobre la relación de El Puerto y Cristóbal Colón con el descubrimiento de América: la carta de 19 de marzo de 1543 en la que el Duque de Medinaceli informa a su tío el cardenal Mendoza de su relación con el descubrimiento del nuevo continente, y el mapamundi de Juan de la Cosa.
15. Muelle de las Galeras
Pasando la plaza de la Herrería atravesamos por lo que hoy es Parque Calderón y llegamos al antiguo muelle de las Galeras, cuyo nombre se debe a que en él se aprestaban las galeras reales que fondeaban en el Guadalete, cuya misión era defender la costa.
Actualmente el muelle se denomina de San Ignacio, y es punto de atraque del Vapor del Puerto.
16. Ermita de Ntra. Sra. de Guía
Seguimos nuestro paseo junto a los muelles, donde todavía se puede observar la actividad marinera de la ciudad. En las actuales Bodegas Gutiérrez Colosía estuvo situada la Ermita de Guía, a cuya titular se encomendaba los navegantes.
En ella tiene su origen el monasterio de San Francisco de la Observancia, pues fue aquí el primer lugar donde se instalaron los frailes antes de pasar a su emplazamiento actual. La ermita dió nombre a toda la zona conocida como “Barrio de Guía” o “Campo de Guía”.
17. Playa y Ermita de Santa Catalina
Si seguimos el camino por la orilla del Guadalete, calle Bajamar, llegaremos hasta el Paseo José Luis Tejada y la desembocadura del río, más alejada del centro urbano de lo que estaba en el siglo XV.
Continuando por la línea de playa, actual Paseo de la Puntilla, se llega hasta el Castillo de Santa Catalina (s. XVI), donde se levantaba a finales del s. XV la ermita del mismo nombre. Desde este sitio salieron muy probablemente algunas de las expediciones que partieron de El Puerto.
Otros lugares destacados fuera de ruta son:
18. Hospital de la Misericordia
19. Ermita de Santa Brígida y Convento de San Francisco de la Observancia
20. Casa de los Torrejón
21. Reproducción de la Carabela La Niña
Realizada por Luis Miguel Coín Cuenca en 1992, que como la primera, armada en los astilleros portuenses, también realizó la misma travesía cinco siglos después. (Textos: Centro Municipal de Patrimonio Histórico. Fotos: Jorge Roa. ).


José Joaquín Solís Muñoz-Seca nace el 18 de febrero de 1939, en plena Guerra Civil. A partir de los dos años de edad Joaquín se traslada a vivir con su familia a El Puerto, a la casa de su abuelo, Francisco Muñoz Seca, --hermano del comediógrafo-- al número 18 de la calle Vicario, hoy Dr. Muñoz Seca.




Equipo de camisola con los colores pontificios. De pie de iizquierda a derecha, Pepe Alba, Pepe Casado, Luis Ortega, Manolo Moreno, Pepe Benjumeda y Paco Rábago. En cuclillas Manolo Rascón, Enrique Pedregal, Gonzalo Zaragoza, uno de los dos hermanos Gómez González --pero su padre era el encargado de la Granja Misericordia de la duquesa de San Fernando sita en la entrada a Vistahermosa donde hoy se encuentra el Hotel Los Jándalos y cuyos productos se vendían en la tienda lindante a la Farmacia Hörh--, y Joaquín.

DOCTORANDO. Joaquín fue doctorando e hizo los Cursos de Doctorado en el Instituto Rocasolano del Consejo Superior de Investigaciones Cientificas (CSIC) donde trabajó durante tres años en su tesis 'Coeficientes Joule-Thomson de vapores orgánicos' compaginando esta labor con la de Profesor Ayudante en la Catedra de Química -Fisica. Precipitadamente marchó a Cepsa en Tenerife para hacer un Curso de Ingenieria del Petróleo y, como anécdota, cabe señalar que nunca leería la tesis por lo que, formalmente, no es doctor, aunque le avalan sus conocimientos, como ha demostrado a lo largo de su dilatada trayectoria profesional. Durante aquella estancia en Tenerife fue profesor de Ingeniería Química en la Universidad de La Laguna.
SERVICIO MILITAR. El Servicio Militar lo realizó entre 1959 y 1963, en la Milicia Naval Universitaria, entre San Fernando (Cádiz) y Marín (Pontevedra). Pocos recuerdos agradables guarda de aquel periodo y el sentimiento de haber perdido tres veranos en una época vital de su vida. Alcanzó el grado de Teniente de Infantería de Marina, el cual ejerció durante los cuatro meses de prácticas como Teniente de la 3ª Compañía del Batallón de Desembarco del Tercio Sur de la Armada. Entre sus ‘azañas bélicas’ destaca un desembarco en la playa de Santa Catalina, a la altura del Pinar de Mochicle, cuando se estaba planteando la construcción de ‘El Cangrejo Rojo’, mas tarde ‘Club Mediterráneo’. El susto de los ‘aborígenes’ --así se denominaba a los habitantes en el Plan de Maniobras-- que encontraron a su paso fue de impresión. TRAYECTORIA PROFESIONAL. Durante sus 46 años de vida profesional, vinculado al sector energía-petoquímica, los ha desarrollado en empresas del Grupo CEPSA, en todos los sectores que conforman la industria del petróleo: Refinerías, Petroquímica, Exploración y Producción. Es miembro de la American Chemical Society.












Diario de Cádiz, recogía la triste noticia: «Entre las tres y las cuatro de la mañana del 23 de febrero de hace 27 años un penetrante olor a madera quemada y el crujir de las viejas tejas de la techumbre del noble edificio, despertaron a los vecinos del inmueble de al lado que, alarmados ante la columna de humo que se colaba por las ventanas de sus casas avisaron a los bomberos y a la policía municipal. Cuando llegaron los bomberos el incendio afectaba al escenario y al patio de butacas, teniendo dificultades para realizar su trabajo al encontrar rotas las bocas de agua más cercanas, por lo que tuvieron que utilizar otra situada en la calle Nevería. Ante lo incontrolable de la situación, fueron avisados también los bomberos de Cádiz, Jerez, Chiclana y los de la Base Naval de Rota para colaborar en la extinción del fuego. La magnitud de la catástrofe se vio acrecentada al prender rápidamente las vigas de madera que servían como soporte al techo del coliseo portuense, que rendido ante el fragor de las nocturnas y traicioneras llamas, cayó fulminantemente sobre el patio de butacas impidiendo cualquier posibilidad de salvación. (Las tres fotos anteriores pertenecen a la Colección de Carlos Pumar Algaba).















Un grupo de Scouts Católicos instalaron una tienda de campaña en la Plaza de Juan Gavala con objeto de recaudar fondos para las misiones. Era el Domund (Acrónimo creado en 1943 por las Obras Misionales Pontificias, cuyo primer Director Nacional, el monseñor Ángel Sagarminaga lanzó a la calle el eslogan "DoMund" que quiere decir "Domingo Mundial de la Propagacion de la Fe). Recaudaron 1200 pesetas de la época con huchas como la de la imagen de la izquierda, en esta ocasión, con una figura oriental.
Ese año fue Reina de las Fiestas de la Hispanidad, María Victoria Osborne Sanz-Magallón (imagen de la izquierda) y el mantenedor de los Juegos Florales, Francisco Montero Galvache, periodista y escritor. La Flor Natural fue para Rafael Guillén por su poema ‘Símbolo y perfil de Simón Bolíbar’ con Accesit para Julio Alfredo Egea. El premio a la poesía de tema libre, para Francisco Toledano Serrano por su poema ‘Llena de gracias’. El premio al trabajo en prosa sobre ‘La Hispanidad hoy’ quedó desierto.
José Pantoja Leal nació en Medina Sidonia el 7 de octubre de 1907, falleciendo en El Puerto el 10 de febrero de 2000, con 92 años. De pequeño asistió a la escuela del Catón, las cuatro reglas de aritmética y poco más. La situación económica, el lugar y su poca afición a l colegio no dieron para otros estudios. De mozalbete, aparte de sus correrías propias de chiquillos, siempre estuvo muy cercano a su tío paterno Juan, representante de las máquinas de coser ‘Singer’ en Medina, Paterna y Casas Viejas --hoy Benalup Casas Viejas--, utilizando para sus desplazamientos un charré tirado por un caballo. A José le encantaba acompañarle en los viajes, una aventura para el pequeño, que le ampliaría los horizontes y el mundo de las ventas y las máquinas que hacían la vida más fácil.
José ve un anuncio colgado en el escaparate de un comercio en la calle Larga: «Se necesita cobrador» y, sin apenas pensarlo, entra en el comercio --una delegación de las máquinas de coser ‘Singer’-- y muestra su interés por el puesto que se demanda. Casualidad tras casualidad, resultó que el inspector jefe de zona se encontraba en el comercio, al que sorprendió llamándole por su nombre «--Vd. es don Celestino Madrera», lo que asombra al interpelado, al que justifica el conocimiento por las visitas que hacía a su tío Juan a Medina. Le aceptan para el puesto, pidiéndole dos fiadores, al tratarse de un empleo en el que se manejan fondos. Su hermano Antonio le consigue a esas dos personas y, al ser muy joven, el contrato se hará a nombre de su padre, de igual nombre. El sueldo semanal sería de 21,75 pesetas mas el 5% de los cobros y el 20% de las ventas al contado.
SÁNLUCAR.



LA FOTOGRAFÍA.
Muchas fotos de novios se realizaban en su estudio, que va mejorando con el tiempo. Ha finalizado la Guerra Civil. El Estudio Pantoja está en auge y su trabajo aumenta especializándose en bodas y comuniones, que seguro existen en la actualidad en las cajas y álbumes de muchas familias portuenses, con la estampilla de Foto-Pantoja en el reverso. (En la imagen, de la izquierda, la tienda de Pantoja que era, además de tienda de fotografías, quincallería y ya Delegación de Créditos Rucas).
Créditos Rucas era una cadena de establecimientos especializados en las ventas al contado --también funcionaba la venta al plazos--, con la que se empezarían a dotar los hogares de El Puerto de los primeros electrodomésticos que en aquella época se lanzaron al mercado: neveras, cocinas de butano --que comenzaron a entrar en el mercado--, máquinas de coser Alfa, bicicletas B.H., camas metálicas con el célebre somier Numancia y otras niqueladas, colchones de muelles, además de baterías de cocina y multitud de pequeños electrodomésticos, siendo prácticamente, líderes en la zona. (En la imagen de la izquierda, publicidad de Créditos Rucas en ABC).







Porque Luis Caballero Noguera, alcalde de El Puerto de Santa María entre 1952 y 1958, era de ideología monárquica y, aunque ostentase el cargo de alcalde, no era bien visto por los censores el halago hacia alguien que no estaba vinculado directamente con el régimen franquista. Ante esta tachadura en su libreto, la agrupación quedó confundida, ya que era una de las letras más aplaudidas en los ensayos.
José Luis Martín Ruiz fue nacido el 3 de enero de 1957, hijo de Pablo Martín, carpintero de profesión y de Isabel Ruiz, en el municipio onubense de Galaroza. Está casado y tiene dos hijos. Sus aficiones principales son el senderismo y la micología. Analista del paisaje, este geógrafo que refleja lo que ve en los territorios, en mapas y planos, se niega a ser comparado con Juan de la Cosa, el cartógrafo que hiciera en el Puerto el primer Mapa Mundi en el año de 1500, pues, mientras el ilustre santoñés hacía mapas de la tierra desconocida y con la información que tenía mediante la observación a ras del suelo, él los hace de la tierra conocida y mediante el uso de fotografías aéreas.
El año de su nacimiento, 1957, lo fue también de los pintores Ángel Lara Barea y Franco Policastro, del gestor turístico Enrique Fernández de Bobadilla, del naturópata y kinesiólogo Juan Sánchez Requena, del escultor Pablo Tejada, del actor Manolo Morillo, del maestro coctelero Juan Franco del Valle. En Madrid se estrenaba ‘La Venganza de Don Mendo’, versión de Gustavo Pérez Puig, con los hermanos Ozores. El Colegio conocido como Asilo de Huérfanas, en la calle Cielos, instalaba un internado y medio pensionado, bajo los auspicios de la Junta de Protección de Menores. Se construye en la calle San Juan, la caa del Curar, en el espacio que ocupaban unos almacenes en mal estado. El Ateneno de Sevilla se desplazaba a El Puerto para rendir un homenaje a Pedro Muñoz Seca. En las carreteras españolas ya se podían admirar 16 toros de Osborne, diseñados por el artista Manolo Prieto.
CASA DE VELÁZQUEZ.
EQUIPO DEL PGOU.

GEOGRAFÍA Y ESTADÍSTICA.
En este sentido son de destacar los vuelos de 1956, 1969 y 1977/78, teniendo este último una excepcional importancia histórica por ser una imagen muy cercana a las primeras corporaciones municipales democráticas. Actualmente se está trabajando en digitalizar las imágenes procedentes de un vuelo realizado en 1.992, año de gran importancia ya que coincide con la entrada en vigor del PGOU de la ciudad y puede verse como ha evolucionado la ciudad desde dicho año, así como la eficacia y grado de cumplimiento de lo planeado. (En la imagen, portada de la Ortofoto Municipal del año 2004, en soporte electrónico).

Joaquín Calero Cuenca nace el 14 de agosto de 1890 en San Fernando Cádiz, fruto tercero del matrimonio formado por Antonio Calero Piñero y Marcelina Cuenca Romero, ambos naturales de San Fernando. Sus otros hermanos, María Candelaria (1881), José Antonio (1888) y Manuel (1892), vivieron en la casa familiar en la calle San Joaquín, núm. 8. Allí pasó su infancia, salvo los años 1894 y 1896 que vivió en Filipinas, a donde se trasladó su madre y hermanos, al estar destinado allí su padre en el Arsenal de Cavite como Contramaestre de la Armada, residiendo posteriormente en Madrid, donde vivió su juventud.







CONCEJAL Y ALCALDE.








