Juan Escolano Paul nació en la vecina villa de Puerto Real el 21 de septiembre de 1938, por lo que es doblemente porteño: del Real Puerto y del de Santa María., ciudad en la que vive desde 1971. Hijo de Antonio Escolano y María Teresa Paul, es el quinto de ocho hermanos. Su padre,Coronel de Intendencia de la Armada hizo que la familia se moviera a Canarias y Madrid. Con 25 años Juan se independiza y se va a vivir a Sevilla. Hizo la carrera de Perito Industrial en Cádiz, donde estaba destinado su hermano que era Ingeniero Industrial y dos años de Aparejador. Entró en el mundo de la consttrucción de la mano de su hermano Javier, arquitecto, llevando representaciones de productos para obras y dejó los estudios: "--A mi me gustaba la calle, no quería otro tema". Volvió con la jubilación del padre a su ciudad natal para vivir con él, mientras venía mucho por El Puerto y aquí conoció a la que sería su mujer, Mª Carmen Pico Ruiz-Calderón, Chica, con la que ha tenido cuatro hijas y 5 nietos. Pero lo que de verdad le gusta, lo que le apasiona y lo que llena muchas horas de su tiempo y de su vida es hacer felices a los demás a través de la magia. Ha sido presidente y fundador de la Asociación Ilusionista Gaditana. También ha sido un gran tirador, participando en Campeonatos de Tiro al Plato, obteniendo grandes triunfos por toda España.

Juan Escolano y su mujer Mª Carmen Pico Ruiz-Calderón, 'Chica'.
1938: UN AÑO DIFÍCIL.
El año de nacimiento de Juan se forma en Burgos el primer gobierno de Franco, restaurándose como emblemas el escudo y la corona imperial de los Reyes Católicos. En Barcelona se proyecta la película 'La casta Susana', uno de los pocos filmes estrenados durante la Guerra Civil. Se crea en España la Magistratura del Trabajo y se funda la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE). Nace el director de Cine Pedro Olea mientras en EE. UU., la transmisión radiofónica de 'La guerra de los mundos', de H. G. Wells provoca pánico en varias ciudades.

Juan, tirador, recibiendo un premio de manos del que fuera alcalde, Enrique Pedregal.
BALBUCEOS CON LA MAGIA.
Su afición por la magia viene desde pequeño en Canarias, pues con su hermano Jaime improvisaba espectáculos que hacía a los familiares y amigos. Más tarde, durante su estancia en Madrid en 1950, un tío suyo, el almirante Eduardo Gener Cuadrado que era además un afamado poeta, le enseñó algunos trucos de magia y lo llevaba los domingos al Circo Price. Recuerda Juan una actuación del mago Lichan y la suerte que tuvo en un sorteo, lo que hizo que bajara a la pista a recogerlo. Aquello fue determinante para su afición. En 1953 lo mandan interno a estudiar en el colegio de los Salesianos de Utrera para, a los dos años regresar a Madrid para estudiar en la Institución Docente de la Almudena (I.D.A.), donde otro mago, Burman, le impactó sobremanera en una fiesta de fin de curso. A partir de ahí leía en su casa a escondidas un libro de magia que tenía su hermano Tito, su gran apoyo en la magia, y que conserva en su biblioteca particular el 'Boscar'. Con su hermano aprende a hacer y preparar trucos, rutinas de mago, desde los más fáciles a los más complicados, desde los más comunes a los más insólitos. (En la imagen, portada del número 1 de la Colección de DVD's dirigida y presentada por Escolano 'Una Vida Mágica'. La piratería informática y el copiado de los dvd's llevó al fracaso económico, que no artístico, aquel proyecto).
ESTUDIOS Y MAGIA: TAMARIT.
En Cádiz empezó la carrera de Perito Industrial en 1958, que continuó en Madrid al año siguiente. Juan cae enfermo y le encarga a su hermano Jaime, médico en la actualidad que le traiga un libro para pasar el tiempo: 'Magia con Naipes' de Santiago de la Riva. Aquello fue su inicio con las cartas. En diciembrte de 1959 conocea en el bar de la Facultad de Filosofía a un gran mago y con el tiempo, también, un gran amigo, probablemente uno de los mejores del mundo con las cartas: Juan Tamarit y Sainz del Terrero. En enero de 1960 había una comida de la Sociedad Española de Ilusionismo (SEI). Avisado e invitado por su padre, acudió junto con Tamarit y allí tuvo la oportunidad de conocer a insignes magos: Juan Antón, Luis Fernández, Juan Antonio Vega, Carlos Salayero, Ramón Varela, Carlos Muro, Gortari, Alfredo Florensa y Santiago de la Riva, así como al presidente de aquellas fechas, Carlos Díaz Contreras con quien, años después, coincidiría en Cádiz y del que guarda un grato recuerdo por su forma de ser.
Escolano quedó impresionado ante las personas y los acontecimientos vividos aquella tarde de enero.
"Por mi amistad con Juan Tamariz he tenido la suerte de asistir a a muchos Encuentros en El Escorial, ¿a que llamamos los magos 'El Escorial'? Pues son unas reuniones que creó hace poco más de 35 años Juanito Tamariz, ó la Escuela Mágica de Madrid, pero si puedo decir que el alma de estas reuniones es Juanito. Allí cada año, a principios de Noviembre Juan invitaba alrededor de 30 Magos. Al principio eran magos nacionales hoy puedo decir que es internacional. Por alli han pasado cientos de Magos de toda España y gracias a estas reuniones he conocido la magia de las cartas muy profundamente y he tenído amistad con muchísimos magos, allí conocí a Tony Cachadita, Juan Font, Alfredo Moliné Roberto, Paviator, Miguel Gómez, Paco Roda, el desaparecido Pepe Carroll y en especial Armando Gómez un mago muy joven en aquellos años con el que he mantenido una gran amistad con él hasta los dias actuales."

Reunión de magos en Madrid: De izquierda a derecha, Luís Fernández, Ramón Varela, Carlos Muro, Juan Antón y enfrente un joven Juan Escolano, J.A. Vega Julio Cerez, desconocido y de espaldas Rafa Ceballo.

Haciendo “La Carta Cambiante”. Escuela de Peritos I, de Madrid. Año 1962.
CARABIAS Y SYLDINI.
En aquella época se hizo costumbre ir a los bares a ensayar con los amigos en lugar de asistir a clases de la Universidad. En 1961 actuó en el Circo Price de ayudante de magia, con la coctelera mágica, en un festival organizado por Alfredo Florensa y Yulipén. Conoció a Julio Carabias (en la imagen de la izquierda), el mago del humor, en los Festivales de Magia que Carlos Díaz Contreras organizaba durante los fines de semana en el Salón de Actos del Instituto Ramiro de Maeztu. Conoció a Syldini, de la mano de Fernando Maymo, en Radio Maymo, durante una conferencia que impartió en su llegada a España Fue un año muy interesante, con actuciones diversas con Conchita Bautista, Los Pekenikes, Los Relámpagos, Juan Pardo. Incluso llegó a actuar en Televisión Española, en el programa 'Ambo Atto' presentado por Jesús Álvarez, con Boliche y Chapinete.
En medio, metido de lleno en el mundo de la magia, las actuaciones y la farándula, hizo las milicias universitarias, terminó y continuó los estudios quedándose con en el peritaje industrial. En Sevilla llegó a trabajar en el mundo dela publicidad con la Agencia Greko y en Puerto Real con su primo Tito Barrena, hoy corresponsal de Diario de Cádiz en la villa vecina montó una tienda de muebles, para encaminar sus pasos profesionales, allá por 1967 en el mundo de la representación de los materiales para la construcción, donde hoy continúa. (En la imagen, una caricatura de Escolano en la actualidad).

La Sociedad Gaditana de Ilusionismo, que ha presidido durante años Juan Escolano, con su amigo Juan Tamarit, en alguna de las reuniones que celebraban en el Bar Camas, de El Puerto.

En casa de Juan Escolano, el auditorio entregado, ante una actuación de nuestro protagonista.
LA HABITACIÓN DE LA MAGIA.
En su casa de la calle Santo Domingo, frente a la Fundación Rafael Alberti,tiene un estudio donde fomenta la magia y la cultura de la magia. A esa habitación, en una preciosa casa del XIX, las nietas le llaman 'el cuarto de magia del abuelo'. Está deseando finalizar su vida profesional para dedicarse por entero, de forma más intensa aún. Está dado de alta en la Seguridad Social en un curioso epígrafe: Ilusionistas, Payasos y Caricatos, sin duda una ocupación, la de hacer felices a los demás, que Escolano lleva muy a gala.

Juan Escolano, en su casa, en La Habitación de la Magia.

Otras instantánea de Escolano, desde otro rincón de La Habitación de la Magia, preparando un juego con cordones.


Jugaba en el Ejido de San Juan, “el Lejío” como popularmente se le llamaba, a “la vuelta a la manzana”, el “salto del múa” -casi siempre le tocaba en la pared aguantando la fila y le daban el espolique-, a “la china”, a “la comba”. Merendaban pan con aceite y azúcar en casa; en el colegio pan con chocolate y mientras merendaba, de pie hacía cola, relevando a su madre, para comprar el carbón que alimentaba la cocina y la copa o brasero. También llegó a hacer cola en el 

CUIDANDO NIÑOS.








Unos meses atrás, Ventura Lozano Moreno, a la sazón Secretario de Casa de la Cultura y yo mismo mantuvimos una reunión para estudiar la posibilidad de organizar algún concierto para la juventud en el que fueran protagonistas un grupo de El Puerto como el grupo al que pertenecía, Blend, muy conocidos por aquel entonces. La idea era dar un recital de canciones de los Beatles que comprendieran lo años entre 1960 y 1969, coincidiendo que en 1.975 Los Beatles anunciaron su separación como grupo. La entrada tenía que ser gratuita; solo había que retirar las invitaciones en la misma Casa de la Cultura con anterioridad. Para la propaganda de la cartelería recurrimos a la Bodega Osborne, la cual por mediación de Antonio Ramírez Ariza, por entonces relaciones públicas de la prestigiosa bodega de El Puerto, no dudó en aportar los carteles completamente gratis. (En la imagen, un cartel promocional de The Beatles).
No todo fue fácil. Fueron largas noches de ensayos e hicimos un trabajo de investigación, con un guión para comentar cada canción, quien la compuso, el año y sobre todo como influenció en nosotros y donde las escuchamos por primera vez. El grupo tenía que interpretar el tema lo mas parecido posible, pero con el sello personal que los caracterizaban. También se haría una breve traducción en español de cada una de ellas para los que no sabían inglés. Pepe Palacios, que no pertenecía al grupo, se ofreció a colaborar con este acontecimiento para tocar la guitarra eléctrica, imitando los solos que hacia Jhon Lennon. En esta ocasión yo me hice cargo de la guitarra acústica para acompañar como George Harrison, José Luis Parra el bajo de Paul Macarney, Juan de Dios Nogués la batería como Ringo Star y Juan Carlos Dueñas se encargó de los teclados para cubrir las orquestaciones que rellenaban algunas canciones de Los Beatles. De las voces se encargaron Pely, Juan de Dios y quien esto escribe --dependiendo de la canción que la cantaba uno u otro-- mientras los demás hacían segundas y terceras voces. (En la imagen cartel original del anuncio de la repetición del concierto el 6 de Febrero de 1.976).
1. Love me do. 2. I sow her standing there. 3. Twiat and shout. 4. Please please me. 5. All my living. 6Tilll there was you. 7. Que noche la de aquel día. 8. And I love her. 9. Can’t buy my love. 10. No replay. 11. Rock an roll music. 12. I need you. 13. Yesterday. 14. Michelle. 15. She loves you. 16. From me to you. 17. I want to hold your hand. 18. Obladi Oblada. 19. Heres comes the sun. 20. Let it be (1970).
En vista del éxito, algo inesperado para la época en El Puerto, Ventura Lozano propuso que se repitiera el día seis de Febrero , es decir, una semana después, para la gente que se había quedado sin poder entrar el concierto anterior, consiguiéndose el mismo lleno que en el anterior. La Casa de la Cultura, entregó una placa conmemorativa a cada uno de los componentes del grupo de manos del Secretario de la institucvión y la felicitación y agradecimiento de Manuel Martínez Alonso, alcalde de El Puerto en aquel año 1.976. Empezaban a soplar otros aires en El Puerto, menos difíciles, además del Levante. (Texto: Francisco Ramírez Tallón, Koky).
Nació en Córdoba el 15 de mayo de 1943. Hijo de Antonio León Amo, quien fuera director del Banco Hispano Americano y de Josefa García González, procedente de Montilla (Córdoba) llegó a El Puerto con 5 años, donde estuvo viviendo hasta 1966, es decir que se marchó con 23 años, aunque ha vuelto muchas veces y por muchas razones como leerán a lo largo de esta nótula. El olor de los vinos de Montilla y los de El Puerto influirían, de alguna manera, en la forma de entender la vida de este porteño afincado en Córdoba. Estudió en el Colegio de las Carmelitas párvulos y preescolar con la Señorita Paquita hasta pasar al Colegio de La Pescadería. Al finalizar el bachillerato y, muy influido por la amistad con aquel conocido médico de El Puerto, Miguel Duro del Moral, le entró la vocación y estudió Medicina en la Facultad de Cádiz, entre 1960 hasta 1963. En 1966 finaliza la carrera con sobresalinete en la Reválida de la Licenciatura. Fue Delegado de Facultad en los años 1965 y 1966, y miembro por elección del Consejo Nacional de Estudiantes. Hizo las Milicias Universitarias, licenciándose como Alférez de Complemento. Pero Sus raices con El Puerto se habrían afianzar más aún. (Fernando León, impartiendo una conferencia).





En otro momento, en la consulta privada, una señora muy 'desenvuelta', al entrar al despacho, le dice: "--¿No está su padre, que es a quien yo quiero ver?". A lo que Fernando le respondié: "--Lo siento. pero mi padre es Director de Banca y el Médico soy yo, que es a quien Vd quiere ver". Aquel fue el principio de una buena amistad. (En la fotografía de la izquierda, otra instantánea en la Feria de 2008: Fernando León, María Benjumeda Abreu, y la mujer de Fernando, Encarnita Gil de Reboleño).

Hija de Javier Govantes de Soto, natural de Osuna (Sevilla) y de la porteña Teresa Pico Ferrer, vino a nacer a El Puerto, como la mitad de sus 10 hermanos con ella, y bautizada en la Prioral para, a los pocos días regresar al Osuna paterno donde se crió y vivió su primera juventud.





Era y es una gran aficionada a la Feria, ¡ojú! donde cantaba flamenco –no existían aparatos de megafonía en aquellas Ferias de Ganado- y bailaba y enseñó a bailar a muchos. Recuerda que con el locutor de Radio Puerto, 










BODEGA LA GALLERA.

VOLPA, LA COLA DEL PUERTO.

Y el jarabe era suministrado por la ya mencionada fábrica valenciana CITRANIA. Como todo acaba en la vida, las grandes empresas se comieron a la pequeña y tuvo que cerrar, a principio de los 70 del siglo pasado, cuando una caja de 24 botellines de 25 cl. costaba 72 pesetas. La maquinaria, moderna y en muy buen estado, fue adquirida por Ruiz Mateos para gasificar vinos y vender 'champagnes o cava' sin denominación de origen. Y El Puerto, volvió a perder otra empresa y varios empleos, en la década de los setenta del pasado siglo.