En este canal de vídeo de YouTube (pulsar aquí), abierto hace 15 años, reúne cerca de 100 grabaciones del dramaturgo y guionista portuense Juan García Larrondo / El Andreion [*], incluyendo escenas de sus obras teatrales, entrevistas, apariciones televisivas, podcasts y otras intervenciones públicas. Su trabajo abarca una intensa y diversa producción en literatura dramática, poesía e imagen. Forma parte de la Academia de las Artes Escénicas de España y la Asociación de Autores de Teatro, y ha sido reconocido con numerosos galardones, entre ellos el prestigioso Premio Internacional ‘Teatro Romano de Mérida’ por su obra ‘El Último Dios’.
| Texto: Enrique Pérez Fernández | Imágenes generadas con IA
Aquí termina la serie que en los últimos meses hemos presentado en Gente del Puerto acerca de las vidas de los marqueses de la Cañada y el patrimonio cultural que acumularon durante gran parte del siglo XVIII en su casa-palacio del portuense Campo de Guía; un adelanto de la monografía que actualmente escribo sobre la historia de la familia Tirry. En este último texto resumo los hechos que marcaron las personalidades de los marqueses y las huellas de un legado perdido que hemos evocado.
La colección de pintura. Murillos a orilla del Guadalete
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| Texto: Enrique Pérez Fernández
Juan Tirry, el II marqués de la Cañada, comenzó a formar su colección pictórica a fines de la década de 1720, a la vez que las de objetos arqueológicos, científicos y etnográficos, el monetario y la biblioteca. Los testimonios de los ilustres visitantes que la conocieron no refieren el número de obras que la formaban, se limitaron a destacar las que consideraron más notables, que en suma fueron quince: ocho Murillos y siete de tres artistas de los Países Bajos (Cornelis Cort, Van Ostade y Van Mieris).
En la investigación que realizo sobre los marqueses aún queda mucho por averiguar de la pinacoteca, dudas por resolver, ampliar en lo posible el número de lienzos hoy conocidos y localizar los que aún puedan existir en manos privadas y en museos. Por tanto, lo que aquí y ahora expongo tiene un carácter parcial y provisional.
La biblioteca, el inquisidor Pedro Sánchez y el naufragio (y II)
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| Texto: Enrique Pérez Fernández
El inquisidor Pedro Sánchez
Una vez que falleció Guillermo Tirry en febrero de 1779, apareció por su casa un siniestro personaje de nombre Pedro Sánchez, comisario de la Inquisición en Cádiz. Registró a fondo la huérfana biblioteca y requisó 550 libros prohibidos por ser contrarios a la doctrina católica. Años después, en 1788, se lo decía en una carta al Inquisidor General: “En este asunto como en otros que han ocurrido, sin omitir la Visita General de las Librerías públicas y de algunas particulares, especialmente la del Marqués de la Cañada difunto, vecino del Puerto de Santa María, a donde pasé y recogí 550 libros prohibidos”.
La biblioteca, el inquisidor Pedro Sánchez y el naufragio (I)
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| Texto: Enrique Pérez Fernández
“Y para mayor exornación me ha franqueado Don Juan Tirry, marqués de la Cañada, libros impresos y selectos manuscritos que enriquecen su célebre museo y le ilustran no sólo con el título de Tesorero de los caudales literarios, sino de justo poseedor de ellos.”
Quien esto escribió fue el primer historiador de la ciudad, Anselmo José Ruiz de Cortázar (1696-1772), coetáneo y amigo de Juan Tirry (1696-1763), y como los marqueses, hombre ilustrado que para documentar su obra -Puerto de Santa María ilustrado y compendio historial de sus antigüedades (1764)- se surtió principalmente de los fondos de la espléndida biblioteca que los Tirry atesoraron en su casa del Campo de Guía; de la que decía: “Aunque tiene esta casa muchas cosas dignas de expresarlas tanto en lo magnífico de sus piezas como en el adorno exquisito y de buen gusto, no debemos pararnos en su descripción por menor, pasando a describir su curioso gabinete, que es uno de los mejores que hay en España (sin que medie hipérbole ni ponderación en la línea que se refiere). Compónese de una librería de más de 8.000 volúmenes de todas facultades y en especial de Historia, Geografía y antigüedades y antiguos manuscritos y singulares monetarios.”
Tiza, vino y talento: el chicuco que cambió el mostrador por los pinceles
Imagen idealizada de Manuel Quevedo López, a los 30 años, generada con Open AI. El monumento reproducido: el Castillo de San Marcos, está basado en un óleo del pintor.
En el siglo XIX muchos cántabros emigraron al sur, especialmente a la bahía de Cádiz, donde se dedicaron al comercio en los tradicionales ultramarinos, siendo conocidos como chicucos. Uno de ellos fue Manuel Quevedo López, quien llegó a El Puerto de Santa María en la década de 1880 y trabajó en la tienda "La Burra". Su talento para el dibujo fue descubierto por un bodeguero que le permitió formarse como pintor en Sevilla. Realizó obras sobre paisajes locales, aunque acabó regresando al norte tras enamorarse de una vasca, dedicándose allí a la pintura y restauración. Su hijo Bonifacio siguió sus pasos en Cádiz, como comerciante y también como artista. Sus descendientes ofrecen a una institución cultural de El Puerto, dos de sus obras que se puede ver ampliadas en el interior de esta nótula.
Las dos obras de Manuel Quevedo: lugares reconocibles
| Texto: José María Travieso Peralta [*]
Especialmente en el siglo XIX se acentuó la emigración de cántabros al sur de la península, y muy especialmente a las localidades de la bahía de Cádiz: la propia Cádiz, San Fernando, El Puerto de Santa María. Muchos de ellos se dedicaron al comercio, y regentaban los famosos ultramarinos, en lenguaje local, almacén de comestibles. En esta zona se les denominó específicamente chicucos a los que se dedicaron, en concreto, a esta actividad, y allí en Cantabria, de forma más genérica, jándalos.
| Texto: Antonio Cristo Ruiz Antonio Muñoz Cuenca, “Muñoli”, fue una persona que dejó una gran huella en El Puerto de Santa María. Posiblemente sea uno de los personajes de esta tierra que más ha representado el costumbrismo de un pueblo. Nació en la calle Santa Clara en 1938, y este año se cumplen 10 desde que se fue con los que no vuelven: el 25 de diciembre de 2015, en Santa María del Puerto. Se crió en una calle muy flamenca, Santa Clara. En aquellos años, muchos entierros pasaban por esa vía camino del cementerio: el último paseo por el pueblo. En algunas andanadas de la época se decía: “Te voy a mandar para Santa Clara”
La colección numismática y los objetos etnográficos y científicos
| Monedas de los marqueses de la Cañada que en 1758 publicó Enrique Flórez. A la izquierda y derecha, Hércules Gaditano con la piel de león y la clava; al reverso el rayo de Júpiter. De tiempos de Augusto (27 a.C.-14 d.C.). La del centro, decía Flórez, “sumamente rara y exquisita”.
| Texto: Enrique Pérez Fernández
La afición del II marqués de la Cañada Juan Tirry por el coleccionismo le vino a fines de la década de 1720, cuando vivía con su tío y suegro Guillermo la mejor época en sus actividades comerciales. En septiembre de 1729 Guillermo obtuvo el título de marqués de la Cañada, mientras su navío San Felipe navegaba rumbo a América. Por entonces Juan, a la edad de 32 años ya tenía en la residencia familiar de la gaditana calle San Francisco una buena colección numismática que con los años amplió y convirtió en una de las mejores de España. Y también reunió objetos de culturas lejanas y científicos, destacando una cámara oscura. Eran las aficiones de un hombre culto e ilustrado que heredó su hijo Guillermo.
El arte de Francisco Javier Monge Reinado no necesita galas ni manifiestos. Nacido en El Puerto de Santa María en 1956, su trayectoria no sigue los caminos de la academia ni del mercado, sino más bien la senda obstinada de quien ha hecho del arte una prolongación de la vida. Su casa natal en la calle del Vicario, convertida en espacio expositivo, taller y almacén, es quizá el mejor resumen de su propuesta: arte sin ceremonia, pero con vocación.
| En la desembocadura del río Guadalquivir los actores Manolo Morillo, Dioni Torres, José Manuel Batista y el director de la película Rafael Sadoc, durante el rodaje.
| Texto: Verbigracia García L.
El cine de la provincia de Cádiz suma una nueva propuesta de interés con Aulas de cine, el esperado largometraje de Rafael Sadoc, que acaba de iniciar su rodaje tras más de siete años de desarrollo, donde cuenta con la colaboración de actores de El Puerto de Santa María. No se trata simplemente de una película más sobre jóvenes y enseñanza, sino de un retrato íntimo y metacinematográfico sobre lo que ocurre cuando la cámara entra en el aula... y el aula se convierte en cine.
Hay personajes que no salen en los libros de historia, pero se quedan en la memoria de los barrios, en las esquinas donde aún se respira lo auténtico. Luis del Pino Robles, más conocido como Luis ‘el de los huevos’, fue uno de esos gaditanos de casta, hechos a la vieja usanza, que lo mismo te cantaban una copla que te contaban un chascarrillo. Repartidor desde niño, artista por vocación, emigrante por necesidad y soñador hasta el final, Luis fue un hombre de los que sabían ganarse la vida con las manos, y los aplausos con el alma.
El documental sobre la descolonización africana silenciada de Guinea
| Lorenzo Benítez, en el centro de la imagen, durante el rodaje en Madrid
| Texto: Verbigracia García L.
El Puerto de Santa María acogerá el próximo 15 de mayo el prestreno nacional del largometraje documental Negro limbo, dirigido por Lorenzo Benítez (1970), gaditano y residente en nuestra Ciudad, con la participación del portuense Antonio RosaLobo (1994) en el equipo de marketing y comunicación. La película se podrá ver por primera vez en España en salas en los nuevos cines Artesiete Bahía Platinum, en el Parque Comercial Bahía Mar, cuya estrategia de apertura al municipio también abarca el apoyo a la producción local y el cine independiente.
Guillermo Tirry y Tirry, del esplendor a la quiebra
| La casa de los marqueses de la Cañada en 1873. Detalle de una vista de la ciudad de la gaditana Litografía Alemana.
Texto: Enrique Pérez Fernández
Fue el primer titular del marquesado de la Cañada que nació en España --en Cádiz-- y el primer y único Tirry que lo fue por vía paterna y materna al ser primos hermanos sus padres. El I marqués, dotado con un innato talento para los negocios, tras su exilio de Irlanda dedicó su vida a formar en El Puerto de Santa María y Cádiz un sólido patrimonio que heredó su sobrino-yerno Juan, que no supo o no pudo mantener. Su hijo Guillermo, el tercer marqués, conoció los tiempos de esplendor, los de decadencia y en los últimos años de su vida la quiebra económica, incluida la venta y dispersión del patrimonio cultural que él y su padre atesoraron durante medio siglo.
La participación de María Lizaso en el jurado del TartgetPrize introduce una mirada especialmente enriquecedora, nacida de la confluencia entre la pintura, la ciencia y la experiencia vital. Artista multidisciplinar de El Puerto de Santa María, Lizaso encarna un perfil poco común en el panorama actual: el de quien ha transitado de la Biología —su formación inicial— y la labor como Técnica Ambiental, al mundo de la creación artística, sin renunciar a la exigencia ni al compromiso. Su formación en el Taller del Prado y su especialización en técnicas de grabado se desarrollaron en paralelo a su maternidad, un hecho que atraviesa, de forma sutil pero constante, su obra.
¿Sabías que Salvador Dalí diseñó una botella de brandy y protagonizó anuncios de televisión? En este vídeo te contamos la historia detrás de la colaboración entre Salvador Dalí y Osborne, donde el genio del surrealismo creó la llamativa botella del brandy Conde de Osborne Reserva y se convirtió en imagen del brandy Veterano.
Descubre también la increíble vida y obra de Dalí: desde su revolucionario Método Paranoico-Crítico, sus colaboraciones con Luis Buñuel, Hitchcock, los Hermanos Marx y Walt Disney, hasta su etapa en Estados Unidos, su polémica relación con el franquismo, su participación en Eurovisión 1969, y la creación del famoso Teatro-Museo Dalí en Figueras (Gerona).
Evocación de un rico patrimonio atesorado a orilla del Guadalete
Casa de los marqueses de la Cañada del Campo de Guía (por calle Aurora, donde hoy se encuentra el Edificio Diplomático), 1755. De fondo el Guadalete. Detalle de un plano del Archivo Militar de Segovia
| Texto: Enrique Pérez Fernández
Antonio Ponz, el célebre historiador autor del imponente Viaje de España escribió en 1794: “En El Puerto de Santa María vi hace años la casa del Marqués de la Cañada Guillermo Tirry, y en ella la célebre colección de preciosidades de todas clases, dignas de la instrucción y buen gusto de dicho Caballero, que después de su muerte pasaron a poder de otros dueños; y he vuelto a ver parte de ellas en Cádiz y en Xerez.
| Antonio Ponz (1725-1792). Autorretrato, 1774.
Era mucho lo que allí había de libros raros y estimables hasta siete mil volúmenes, y lo mismo de pinturas, estampas, medallas, dibujos y otros monumentos de la antigüedad. Ciudadanos de esta clase parece que merecerían más larga vida: en mi dictamen son de grande ornamento para las Ciudades donde están establecidos.”
Con el fin de evocar ese rico patrimonio perdido que existió en El Puerto, estoy escribiendo una monografía sobre la vida de los marqueses de la Cañada. Como anticipo, presentaremos a los lectores de Gente del Puerto en varias entregas algunos de los bienes culturales que durante medio siglo reunieron los marqueses en su casa-palacio del Campo de Guía, derribada a comienzos del siglo XX, donde hoy está el Edificio Diplomático, junto al hotel boutique Soho Puerto (antes Hotel Santa María)
| Vista aérea del Edificio Diplomático por la Avenida de la Bajamar, donde estuvo la casa-palacio de los marqueses de la Cañada y su "colección de preciosidades de todas clases", junto al Hotel Boutique Soho Puerto (antes Hotel Santa María).
| Texto: José María Morillo
Detrás de la imponente silueta negra del Toro de Osborne se encuentra el portuense Manuel Prieto Benítez, conocido artísticamente como Manolo Prieto. El documental emitido por Radio Nacional de España el pasado 28 de marzo, con guion de Nacho Álvaro, rescata la dimensión compleja y fascinante de este pionero del diseño gráfico español. A través de las voces de expertos como Emilio Gil, académico de Bellas Artes; Sofía Rodríguez, directora del Museo Nacional de Artes Decorativas; el investigador Juan Aguilar; el numismático Javier Gimeno; su nieta Marta Prieto, actual presidenta de la Fundación Manolo Prieto, y el testimonio íntimo de su hijo Manuel, se reconstruye el legado de un creador polifacético.
| Texto: José María Morillo.
Hace más de 30 años, en octubre de 1994, cuando ya llevaba casi cuarenta en las carreteras españolas, el toro que diseñara para bodegas Osborne el portuense Manolo Prieto estuvo a punto de desaparecer, por el decreto del Ministerio de Obras Públicas, que instaba a retirar las vallas de las márgenes de las carreteras. Tras las peticiones de indulto desde el Ayuntamiento de El Puerto de Santa María, comunidades y parlamentos autónomos, numerosos municipios, asociaciones culturales, artistas, políticos y periodistas: el toro se salvó... y ahí sigue, menos en Cantabria, Cataluña, Ceuta, Canarias y Murcia.
En la cartografía artística contemporánea, Juan Herrador Granero se erige como un testigo privilegiado del encuentro entre la ilustración publicitaria y el arte pictórico. Nacido en la monumental Úbeda en 1943, pero desde hace más de tres décadas afincado en El Puerto de Santa María, Herrador ha transitado los caminos del diseño gráfico, la docencia y, sobre todo, la pintura, con una pasión que trasciende lo meramente profesional.
Su estilo, anclado en el hiperrealismo, lo ha llevado a plasmar la identidad festiva y tradicional andaluza en obras de gran formato, entre ellas los carteles de la Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino (2008) o la Fiesta de los Patios (2013) entre otros.
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