La biblioteca, el inquisidor Pedro Sánchez y el naufragio (y II)
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| Texto: Enrique Pérez Fernández
El inquisidor Pedro Sánchez
Una vez que falleció Guillermo Tirry en febrero de 1779, apareció por su casa un siniestro personaje de nombre Pedro Sánchez, comisario de la Inquisición en Cádiz. Registró a fondo la huérfana biblioteca y requisó 550 libros prohibidos por ser contrarios a la doctrina católica. Años después, en 1788, se lo decía en una carta al Inquisidor General: “En este asunto como en otros que han ocurrido, sin omitir la Visita General de las Librerías públicas y de algunas particulares, especialmente la del Marqués de la Cañada difunto, vecino del Puerto de Santa María, a donde pasé y recogí 550 libros prohibidos”.
La biblioteca, el inquisidor Pedro Sánchez y el naufragio (I)
| Imagen generada con IA.
| Texto: Enrique Pérez Fernández
“Y para mayor exornación me ha franqueado Don Juan Tirry, marqués de la Cañada, libros impresos y selectos manuscritos que enriquecen su célebre museo y le ilustran no sólo con el título de Tesorero de los caudales literarios, sino de justo poseedor de ellos.”
Quien esto escribió fue el primer historiador de la ciudad, Anselmo José Ruiz de Cortázar (1696-1772), coetáneo y amigo de Juan Tirry (1696-1763), y como los marqueses, hombre ilustrado que para documentar su obra -Puerto de Santa María ilustrado y compendio historial de sus antigüedades (1764)- se surtió principalmente de los fondos de la espléndida biblioteca que los Tirry atesoraron en su casa del Campo de Guía; de la que decía: “Aunque tiene esta casa muchas cosas dignas de expresarlas tanto en lo magnífico de sus piezas como en el adorno exquisito y de buen gusto, no debemos pararnos en su descripción por menor, pasando a describir su curioso gabinete, que es uno de los mejores que hay en España (sin que medie hipérbole ni ponderación en la línea que se refiere). Compónese de una librería de más de 8.000 volúmenes de todas facultades y en especial de Historia, Geografía y antigüedades y antiguos manuscritos y singulares monetarios.”
Así responde un videojuego a la poesía más desgarrada de Lorca
| Texto: José María Morillo
Dicen que Lorca escribió Poeta en Nueva York con el corazón hecho astillas, pero lo que pocos imaginaban es que, casi un siglo después, esos fragmentos rotos se convertirían en píxeles. Nace Aurora Dawn Poet, el primer videojuego inspirado en la obra neoyorquina del poeta granadino, una inmersión sensorial que convierte el verso libre en mundo explorable. Porque ahora Federico no solo se lee, se juega. https://store.steampowered.com/app/3570500/Aurora_Dawn_Poet/?l=spanish
Detrás del proyecto está Yellow Jacket, un estudio independiente radicado en Cádiz, que ha decidido ponerle motor gráfico a la metáfora. El portuense Jesús Torres, su director general y creativo, viene del teatro, y su transición al diseño interactivo es tan lógica como radical: “Si Lorca quiso acercar el teatro a quienes ni siquiera sabían que el teatro existía, nosotros queremos hacer lo mismo con él, con su universo lírico”. Así, del duende al joystick, sin perder la emoción por el camino.
| Texto: Ángeles Peiteado | Fuente: Cosasdecomé y Diario de Cádiz.
El anuncio de la mujer a caballo, las mallas de las botellas tejidas a mano en los patios y azoteas portuenses, la publicidad diseñada por Dalí… José María Morillo recupera las historias que llevaron el nombre de El Puerto de Santa María por toda España a través de comerciales pioneros. Los videos requieren horas de documentación y elaboración y aprovechan la Inteligencia Artificial para dar vida a las antiguas fotos.
| Texto: Antonio Cristo Ruiz Antonio Muñoz Cuenca, “Muñoli”, fue una persona que dejó una gran huella en El Puerto de Santa María. Posiblemente sea uno de los personajes de esta tierra que más ha representado el costumbrismo de un pueblo. Nació en la calle Santa Clara en 1938, y este año se cumplen 10 desde que se fue con los que no vuelven: el 25 de diciembre de 2015, en Santa María del Puerto. Se crió en una calle muy flamenca, Santa Clara. En aquellos años, muchos entierros pasaban por esa vía camino del cementerio: el último paseo por el pueblo. En algunas andanadas de la época se decía: “Te voy a mandar para Santa Clara”
Alarma ciudadana y silencio institucional ante la pérdida de patrimonio público
| Viñeta: Alberto Castrelo | Texto: Nerea López.
El proceso concursal de la sociedad municipal Impulsa El Puerto S.L.U. sigue generando consecuencias más allá del plano económico. La última alerta se enciende en la Sierra de San Cristóbal, donde se ha anunciado la subasta de una finca rústica de más de 625.000 metros cuadrados que incluye una veintena de cuevas-cantera, bienes protegidos con la categoría de Bien de Interés Cultural (BIC) y vinculados al futuro Parque Arqueológico del entorno de Doña Blanca.
La parcela, situada dentro del ámbito urbanístico PAU-CN-2 y atravesada por la Variante de Los Puertos, se encuentra en el epicentro de un debate que mezcla gestión patrimonial, planificación urbanística y deuda municipal. Su salida al mercado no ha pasado desapercibida para colectivos ciudadanos y grupos políticos que ven en esta operación un riesgo claro de privatización de suelo con valor histórico, etnográfico y ambiental.
Canónigos portuenses en la Catedral de Sevilla: una aproximación histórica
| Vista de la Catedral de Sevilla. Grabado en plancha de cobre de 1792 de Bertuch. Procede de la obra, Porte-Feuille des Enfans. Grabado coloreado a mano con color de época | 16 x 21,5 cm.
| Texto: Antonio Gutiérrez Ruiz (*)
Aunque estos clérigos paisanos, esta “gente de El Puerto”, no tienen la publicidad y resonancia de nobles o militares, bien es cierto que en su época el desempeño de una canonjía acreditaba una categoría social importante, ocupando un elevado status en ella, algunos de propia cuna, y más aún cuando se trataba de una catedral tan importante como la hispalense, denominada en esa época como “Santa Iglesia Patriarcal de Sevilla”. Por ello, y satisfaciendo nuestra propia curiosidad, con la ayuda documentalista de Ana María Becerra, nos animamos a compartir algunos datos sobre los 8 clérigos, en realidad 9 si contamos también a Juan Antonio Vizarrón, localizados como nacidos y bautizados en El Puerto de Santa María que ocuparon diversas dignidades durante el siglo XVIII en la catedral de Sevilla.
¿Sabías que Pedro Muñoz Seca, el maestro del teatro cómico español, dedicó una de sus obras a un bodeguero de El Puerto de Santa María? En este video te contamos la apasionante historia del vino oloroso Sangre y Trabajadero, de las Bodegas Cuvillo, y su vínculo con la tradición de la botadura de barcos en los astilleros de la Bahía de Cádiz. Y como llegó este vino hasta la Guardia Real y a mercados internacionales como Londres, Canadá o Perú.
Te revelamos cómo este singular oloroso sigue siendo protagonista de un ritual marítimo, con un vino único en el mundo, en el que se estrellan botellas contra el casco de los buques antes de hacerse a la mar, siguiendo una tradición ancestral. Pero también conocerás la entrañable amistad entre Muñoz Seca y Carlos del Cuvillo, así como el legado de una de las sagas bodegueras más queridas de Andalucía la baja.
| Dibujo del sarcófago de Medina Sidonia en una de las láminas que Guillermo Tirry envió en 1764 al conde Caylus. Biblioteca Capitular y Colombina de la catedral de Sevilla.
| Texto: Enrique Pérez Fernández
Era uno de los objetos más destacados de la colección arqueológica de los marqueses: pieza digna del Gabinete de un Soberano, sentenció Guillermo Tirry. Procedía de Asido, la Medina Sidonia romana. Se descubrió al construirse el convento de San Francisco asidonense, entre 1620 --cuando tomaron posesión del solar-- y 1625, al cimentarse el inmueble.
Por entonces, según contó en 1724 un cronista de la orden religiosa, se hallaron “muchos ídolos truncos [truncados, incompletos] y sepulcros primorosos y otras lápidas con algunas inscripciones, que la poca curiosidad o la providencia de quererlo aprovechar todo, dejó por cimiento en la misma fábrica. Todavía la codicia, a mi ver, más que la curiosidad, reservó un sepulcro de mármol, con dos figuras y algunos bajeles, que lo adornan todo con otras molduras muy primorosas que hoy sirve de aguamanil en la sacristía de nuestro Convento.Todo el Convento está fundado sobre diferentes arcos y bóvedas antiquísimas, que por considerarlas los alarifes muy firmes, pareció conveniente que sobre ellas se fundase el Convento.”
También quiero avisarles que,
si en mi discurso notan cierta rima,
es rindiendo homenaje a Muñoz Seca,
siempre en alta estima,
y su don Mendo…
¡cuyo olvido, por parte de quien compete
no comprendo!
Recordó a Menesteo, al yacimiento de Doña Blanca y a su principal excavador, Diego Ruiz Mata. También se dio un paseo por El Puerto andalusí, hasta llegar a 1281.
Uno que se llamaba Alfonso,
que era décimo y muy chulo,
dijo: "¡Aquí va una iglesia…
para turismo en el futuro!"
Y la Virgen de los Milagros,
con acento muy gadita,
entonces curaba juanetes, tristezas
y hasta el alma con tiritas.
Las estatuillas de Hércules y Neptuno de Sancti Petri
Islote y Castillo de Sancti Petri | Foto, Dolores Estrada.
| Texto: Enrique Pérez Fernández
En abril de 1764 Guillermo Tirry hizo dibujar 50 de los objetos más destacados de su colección arqueológica para enviárselos, en 13 láminas, al francés conde de Caylus, uno de los más reconocidos anticuarios de la época. Y también mandó una copia al coleccionista de antigüedades cordobés Pedro Leonardo de Villacevallos, con quien su padre y él mantuvieron de antiguo un estrecho contacto. De esta copia, en 1772 el también cordobés y numismático Manuel J. Díaz Ayora sacó otra que es la que en 1993 localicé en la Biblioteca Capitular y Colombina de la catedral de Sevilla cuando preparaba con José Ignacio Buhigas un artículo para la universidad hispalense sobre los marqueses de la Cañada y su gabinete de antigüedades.
Guillermo Tirry y Tirry, del esplendor a la quiebra
| La casa de los marqueses de la Cañada en 1873. Detalle de una vista de la ciudad de la gaditana Litografía Alemana.
Texto: Enrique Pérez Fernández
Fue el primer titular del marquesado de la Cañada que nació en España --en Cádiz-- y el primer y único Tirry que lo fue por vía paterna y materna al ser primos hermanos sus padres. El I marqués, dotado con un innato talento para los negocios, tras su exilio de Irlanda dedicó su vida a formar en El Puerto de Santa María y Cádiz un sólido patrimonio que heredó su sobrino-yerno Juan, que no supo o no pudo mantener. Su hijo Guillermo, el tercer marqués, conoció los tiempos de esplendor, los de decadencia y en los últimos años de su vida la quiebra económica, incluida la venta y dispersión del patrimonio cultural que él y su padre atesoraron durante medio siglo.
Evocación de un rico patrimonio atesorado a orilla del Guadalete
Casa de los marqueses de la Cañada del Campo de Guía (por calle Aurora, donde hoy se encuentra el Edificio Diplomático), 1755. De fondo el Guadalete. Detalle de un plano del Archivo Militar de Segovia
| Texto: Enrique Pérez Fernández
Antonio Ponz, el célebre historiador autor del imponente Viaje de España escribió en 1794: “En El Puerto de Santa María vi hace años la casa del Marqués de la Cañada Guillermo Tirry, y en ella la célebre colección de preciosidades de todas clases, dignas de la instrucción y buen gusto de dicho Caballero, que después de su muerte pasaron a poder de otros dueños; y he vuelto a ver parte de ellas en Cádiz y en Xerez.
| Antonio Ponz (1725-1792). Autorretrato, 1774.
Era mucho lo que allí había de libros raros y estimables hasta siete mil volúmenes, y lo mismo de pinturas, estampas, medallas, dibujos y otros monumentos de la antigüedad. Ciudadanos de esta clase parece que merecerían más larga vida: en mi dictamen son de grande ornamento para las Ciudades donde están establecidos.”
Con el fin de evocar ese rico patrimonio perdido que existió en El Puerto, estoy escribiendo una monografía sobre la vida de los marqueses de la Cañada. Como anticipo, presentaremos a los lectores de Gente del Puerto en varias entregas algunos de los bienes culturales que durante medio siglo reunieron los marqueses en su casa-palacio del Campo de Guía, derribada a comienzos del siglo XX, donde hoy está el Edificio Diplomático, junto al hotel boutique Soho Puerto (antes Hotel Santa María)
| Vista aérea del Edificio Diplomático por la Avenida de la Bajamar, donde estuvo la casa-palacio de los marqueses de la Cañada y su "colección de preciosidades de todas clases", junto al Hotel Boutique Soho Puerto (antes Hotel Santa María).
| Texto: Francisco González Luque. | Fotografías: Alejandro Fernández Galván y Francisco González Luque. El pasado 9 de abril se presentó en la Bodega Osborne el libro La capilla de la Aurora. Historia y patrimonio, del historiador del arte Francisco González Luque, publicado por Ediciones El Boletín a iniciativa de la Hermandad de la Humildad y Paciencia. La obra, dividida en dos capítulos principales, ofrece un minucioso análisis histórico y artístico de la cofradía de Nuestra Señora del Rosario de la Aurora desde el siglo XVII hasta su desaparición en el XIX, destacando su papel docente y su valiosa biblioteca. También se abordan las otras cofradías que compartieron la capilla y se dedica un extenso apartado al estado reciente del edificio, incluyendo su deterioro, cierre en 2014 y el proyecto de intervención de 2019. El autor denuncia el abandono institucional sufrido por este patrimonio, al tiempo que documenta con rigor su evolución hasta la actualidad.
Vida y legado de un sabio del romancero y el flamenco
| Foto: Pérez Ventana
| Texto: José María Morillo.
Mañana se cumplen dos años del fallecimiento de Luis Suárez Ávila, (El Puerto de Santa María, 1944-2023), una figura esencial en la investigación del romancero de tradición oral y del flamenco. Abogado de profesión, desde 1958 comenzó una labor única: la recopilación de romances épicos en boca de los gitanos bajoandaluces, descubriendo un legado oral sin parangón en el mundo hispánico. Sus hallazgos revelaron conexiones insospechadas con los romances sefardíes y lo consagraron como pionero en este campo.
El blog Los Fardos de Pericón que administra el escritor, investigador y productor de Canal Sur Radio, Javier Osuna García, ha elaborado un proyecto para convocar elI Premio Nacional de Investigación Flamenca Luis Suárez Ávila, como tributo justo y necesario a una vida dedicada a preservar y entender el alma profunda del flamenco. El proyecto se ha hecho llegar a una entidad financiera y al Ayuntamiento portuense para que lo contemplen en su programación cultural y de investigación.
| Texto: Antonio Cristo Ruiz
Ha vivido toda una vida en El Puerto de Santa María, y fue una gran persona que no merece quedar en el olvido. ¡Y eso que escribió cuatro o cinco libros! Los que le conocimos sabemos bien cómo era Salvador Cortés Núñez, “el Chigüi”. Muy apreciado por todos los que lo tratamos. Salvador no sabía decir “no”. Pasó muy malos momentos tras el fallecimiento de su esposa, Juana Cortés Jiménez, hermana del gran cantaor flamenco José Cortés, “Pansequito del Puerto”.
| Texto: José María Morillo
Detrás de la imponente silueta negra del Toro de Osborne se encuentra el portuense Manuel Prieto Benítez, conocido artísticamente como Manolo Prieto. El documental emitido por Radio Nacional de España el pasado 28 de marzo, con guion de Nacho Álvaro, rescata la dimensión compleja y fascinante de este pionero del diseño gráfico español. A través de las voces de expertos como Emilio Gil, académico de Bellas Artes; Sofía Rodríguez, directora del Museo Nacional de Artes Decorativas; el investigador Juan Aguilar; el numismático Javier Gimeno; su nieta Marta Prieto, actual presidenta de la Fundación Manolo Prieto, y el testimonio íntimo de su hijo Manuel, se reconstruye el legado de un creador polifacético.
| En la imagen, Luis Garrido Quijano y José Fernández Villegas, durante el acto de donación de la obra pictórica | Foto: Academia de BBAA
| Texto: Verbigracia García L.
La Academia de Bellas Artes Santa Cecilia acoge una nueva muestra pictórica que celebra la trayectoria artística del pintor portuense José Fernández Villegas, socio y antiguo alumno de la institución. En el marco de esta exposición, el artista ha realizado la generosa donación de su obra Centenario de la coronación canónica de nuestra patrona La Virgen de los Milagros 1916-2016, una pieza de 2016 que sintetiza su personal interpretación de la iconografía religiosa.
| Texto: José María Morillo
El martes 18 de marzo, de manera repentina, se apagó la voz de Daniel Bastida Monge (1968-2025) a los 56 años. Conocido por su aguda mirada sobre la actualidad y la cultura, Bastida dejó una huella que no olvidaremos en los medios de comunicación locales y en quienes lo leyeron y escucharon a lo largo de los años.
Formado en Turismo, Imagen y Sonido, y Cine, su trayectoria profesional estuvo marcada por una inquietud intelectual que lo llevó a trabajar en distintos medios audiovisuales y a colaborar en diversas publicaciones, aunque también tuvo esporádicos trabajos más prosaicos, para vivir. Su incursión en el Diario de Cádiz comenzó en otoño de 2006, cuando Francisco Andrés Gallardo le abrió las puertas de la sección de opinión local Bienteveo, donde su pluma incisiva diseccionaba la realidad portuense. Aquel fue solo un primer capítulo: Bastida regresaría años después con nuevas columnas y críticas culturales, siempre con su sello inconfundible.
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