De Anís del Mono a la Feria del Vino Fino
| Texto: José María Morillo
A simple vista, las ciudades de Badalona y El Puerto de Santa María podrían parecer dos mundos separados por los más de 900 kilómetros que las distancian. Sin embargo, una observación más profunda revela una serie de conexiones históricas, económicas y culturales que han tejido un lazo sorprendentemente sólido entre esta urbe catalana y la localidad porteña.
Uno de los vínculos más destacable se encuentra en la industria licorera. En 1870, Badalona vio nacer a Anís del Mono, un destilado que con el tiempo se convertiría en uno de los licores más consolidadoss de España. En 1975 el Grupo Osborne, con sede en El Puerto de Santa María, compró Destilerías Vicente Bosch, la fabricante del conocido destilado. La historia tomó un giro significativo en 2021 cuando Osborne trasladó la embotelladora de Anís del Mono a tierras portuenses, manteniendo en Cataluña únicamente el proceso de destilación. Este movimiento no solo representó una decisión empresarial estratégica, sino que también consolidó una relación que, aunque menos visible, llevaba décadas en construcción.